Imagínate que unes en una misma aplicación TikTok, Instagram, Facebook, WhatsApp, eBay, LinkedIn, Skype, Tinder, Slack y PayPal. Eso es WeChat, una gran red de redes sociales que aglutina distintos espacios donde comunicarse, realizar transacciones económicas y leer las noticias. Precisamente su poder aglutinador es lo que facilita el control de los usuarios por parte de las autoridades chinas.
WeChat se ha convertido en una aplicación con gran presencia en el país asiático. Consigue diariamente un tráfico de 100 millones de llamadas en todo el mundo y su cifra de usuarios supera los 1.200 millones según Statista. Aunque la gran mayoría de sus usuarios se encuentran en China, la aplicación también se utiliza internacionalmente. Los usuarios que la usan desde fuera de las fronteras chinas están sometidos al espionaje del país cuando interaccionan con cuentas que sí se encuentran en China, según un estudio de The Citizien Lab, un grupo de investigación de la Universidad de Toronto.
Esta aplicación está sometida a una fuerte vigilancia y censura por parte del Gobierno chino: cualquier dato que se introduzca en la app puede ser utilizado en contra de los usuarios (por ejemplo, contra disidentes), tanto si han cometido un delito como si no. Además, esta aplicación recoge por su cuenta datos biométricos y se reserva el derecho a bloquear a los usuarios por “compartir rumores maliciosos” si presentan una opinión crítica con el Gobierno. Este fue el caso de un usuario que, según contaba la BBC, fue bloqueado e incluido en una lista de personas sospechosa por compartir fotos de la manifestación del 30 aniversario de las protestas en la plaza de Tiananmén.
¿Qué es WeChat?
WeChat es una aplicación para smartphones desarrollada por la empresa china Tencent que llegó al mercado del país asiático en enero de 2011. La plataforma no se limita a ser una única red social, sino que contiene distintas redes multipropósito.
Su gran aportación es que consigue aunar en un mismo espacio una gran cantidad de usos. Esta multifuncionalidad se produce porque el Gobierno chino no permite la entrada de empresas de Internet extranjeras en su territorio, haciendo que una gran cantidad de redes sociales se concentren en WeChat. La plataforma ha conseguido ser omnipresente en el país, permitiendo que las autoridades puedan vigilar todo lo que ocurre en sus herramientas.
La aplicación ofrece servicios de mensajería y llamadas sin coste directo para el usuario, espacios donde intercambiar historias, chats donde hablar con viejos compañeros de clase, soportes donde pagar facturas o hacer compras online, canales de comunicación para relacionarse con compañeros de trabajo, plataformas multimedia donde compartir fotos y vídeos, boletines de noticias, etc. Por toda esta variedad de usos en un mismo soporte, se ha descrito a WeChat como una superaplicación.
¿Qué tiene WeChat en común con TikTok?
La otra red social china que se ha hecho muy popular recientemente ha sido TikTok. Aunque estas dos aplicaciones son muy diferentes en su uso y funcionamiento, tienen un importante punto en común: las dos han estado en el punto de mira de la administración Trump. El presidente ha señalado a WeChat como una amenaza para la seguridad nacional, ya que almacena sus datos en servidores instalados fuera del país, lo que podría suponer un problema de espionaje para Estados Unidos.
En el caso de TikTok, aunque no hay pruebas de que espíe a sus usuarios, preocupa al Gobierno de Estados Unidos por la cantidad de cuentas creadas y su rápida expansión. En agosto de 2020 hicieron público su número de usuarios, que como recoge CNBC, ya ha superado los 100 millones en Estados Unidos.
ByteDance, la empresa propietaria de TikTok, alcanzó la semana pasada un acuerdo con las compañías Oracle y Walmart para evitar su prohibición. Así, Oracle se convertirá en proveedora tecnológica de TikTok en EE.UU. Es la respuesta que la aplicación ha ofrecido a Trump, quien exigía a ByteDance vender sus operaciones en el país a una empresa local como medida para rebajar la amenaza para la seguridad nacional.
¿Por qué WeChat no tiene nada que ver con TikTok?
La gran diferencia entre TikTok y WeChat es que la primera se desarrolló pensando en su uso fuera de las fronteras chinas, evitando la censura del Gobierno. Incluso TikTok está prohibida en China. Dentro del país asiático sí se permite el uso de Douyin, una aplicación con la misma inteligencia artificial y forma de uso, aunque sometida al control del Gobierno chino. Las redes de ambas herramientas están completamente separadas y los usuarios de una no pueden comunicarse con los de la otra.
Por el contrario, WeChat nació en el interior del país asiático y su hegemonía se ha construido dentro de las fronteras chinas. Con esta configuración, lo está teniendo más difícil para conquistar al público occidental. Uno de sus mayores usos fuera de China es establecer canales de comunicación entre ciudadanos chinos residentes en el extranjero y sus amigos y familiares en China.
Tencent, la empresa líder de Internet en China
Tencent Holdings Limited es la empresa multinacional china desarrolladora de la aplicación WeChat. La compañía comenzó su actividad en el año 1998 y alcanzó su primer éxito con QQ, un programa de mensajería para ordenador que para el año 2000 había alcanzado 40 millones de usuarios. A día de hoy, la empresa es líder en el mercado de Internet chino. Su filial Tencent Games lidera el ranking mundial por ingresos de las empresas de videojuegos.
La expansión de los teléfonos inteligentes y las aplicaciones de mensajería instantánea en el móvil hizo que Tencent se planteara su estrategia apostando por seguir teniendo el control de los usuarios chinos, pero esta vez con una aplicación para smartphones: WeChat. La plataforma se ha impuesto al resto de aplicaciones de mensajería combinando múltiples propósitos de interacción online en un único espacio.
Tencent ha conseguido ingresos millonarios a lo largo de su historia gracias a los juegos online que ha ido implementando a través de distintas aplicaciones financiadas por la publicidad. Ahora, la compañía ha encontrado un filón en WeChat, ya que controla a través de una misma aplicación todas las aristas de la identidad digital de cada usuario. La empresa se ha beneficiado de las prohibiciones chinas a empresas extranjeras, acogiéndose al proteccionismo de las autoridades.
Noticias falsas, propaganda y control social
Una de las utilidades de WeChat es la posibilidad que ofrece de acceder a información online dentro de la plataforma. La gran mayoría de las noticias que se publican provienen de usuarios chinos que pasan necesariamente por el filtro del discurso oficial del Gobierno. No dependen de los algoritmos, como en las redes sociales occidentales más populares, sino que pertenecen al ecosistema cerrado de la Internet y la censura del país asiático.
A medida que la plataforma ha ido creciendo, WeChat se ha convertido en una poderosa herramienta de control social. Según el informe de The Citizen Lab, las cuentas de usuarios internacionales de WeChat estarían ayudando al sistema de censura chino entrenando sus algoritmos con imágenes y archivos enviados desde fuera de las fronteras del país.
Igualmente, a lo largo de la pandemia los Gobiernos locales chinos han utilizado la aplicación para informar sobre la incidencia de COVID-19 a los residentes en el extranjero, aunque con el peso de la censura y vigilancia que conlleva el uso la plataforma.