Estas son las 75 enfermedades que pueden causar una incapacidad permanente

A pesar de que no existe un listado de enfermedades que otorgan incapacidad permanente, sí que existen una serie de patologías comunes que están reconocidas como enfermedades que dan origen a una incapacidad permanente laboral en cualquiera de sus grados. 

Eso sí, es importante tener en cuenta que no es la propia enfermedad la que se reconoce para validar una incapacidad permanente. Serán las limitaciones del trabajador a raíz de esa enfermedad las que dicten qué grado de incapacidad permanente tiene. Una misma enfermedad puede resultar limitadora para una persona, pero para otra no.

El Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) es el organismo encargado de reconocer el derecho de un trabajador de recibir una pensión de incapacidad permanente en cualquiera de sus grados. No obstante, la Justicia también tiene la potestad para conceder este derecho de incapacidad.

Enfermedades que pueden dar una incapacidad permanente

La Seguridad Social no cuenta con ningún listado de enfermedades o lesiones que den lugar a una incapacidad permanente. Será el Tribunal Médico del INSS el que estudiará cada caso concreto. 

No obstante, vamos a conocer las enfermedades que pueden dar lugar a una incapacidad permanente y a una percepción de una pensión por dicha incapacidad.

  1. Alcoholismo.
  2. Agorafobia.
  3. Alzheimer.
  4. Ansiedad.
  5. Aneurisma.
  6. Apnea del sueño.
  7. Arterosclerosis.
  8. Artritis.
  9. Artrosis reumatoide.
  10. ASMA.
  11. Enfermedad de caderas.
  12. Cáncer.
  13. Cardiopatías.
  14. Enfermedad en los codos.
  15. Colitis ulcerosa.
  16. Charcot-Marie-Tooth.
  17. Demencia.
  18. Depresión.
  19. Dermatitis.
  20. Desprendimiento de retina.
  21. Enfermedad de Behcet.
  22. Enfermedad de Crohn.
  23. Epilepsia.
  24. Efisema Pulmonar.
  25. Enfermedad de Perthes.
  26. Esclerosis Múltiple.
  27. Esquizofrenia.
  28. EPOC.
  29. Espondilitis Anquilosante.
  30. Fibromialgia.
  31. Fatiga Crónica.
  32. Glaucoma.
  33. Gonartrosis.
  34. Hernia Cervical.
  35. Hipoacusia.
  36. Hipertensión pulmonar.
  37. Enfermedad del hombre.
  38. Ictus.
  39. infarto agudo de miocardio.
  40. Insuficiencia mitral.
  41. Insuficiencia renal crónica.
  42. Ludopatía.
  43. Lumbalgia.
  44. Lupus.
  45. Miastenia Gravis.
  46. Migraña.
  47. Neuropatía.
  48. Neuropatía óptica.
  49. Obesidad mórbida.
  50. Pancreatitis.
  51. Parkinson.
  52. Enfermedad de pies.
  53. Enfermedad de manos.
  54. Pérdida de visión.
  55. Síndrome de Arnold Chiari.
  56. Síndrome de Burnout.
  57. Sarcoidosis.
  58. Síndrome de cola de caballo.
  59. Síndrome de Lambert-Eaton.
  60. Taquicardias.
  61. Síndrome de Ménière.
  62. Síndrome de Wolf-Parkinson-White.
  63. Tetralogía de Fallot.
  64. Trasplante de riñón.
  65. Trastorno bipolar.
  66. Uveítis.
  67. Sensibilidad química.
  68. Traumatismo craneoencefálico.
  69. Trastorno obsesivo compulsivo (TOC).
  70. Trastorno de estrés postraumático.

Este listado de enfermedades puede dar lugar a una pensión por incapacidad permanente, pero no siempre ocurre así. Los médicos de la Seguridad Social serán quienes determinen si esa enfermedad realmente incapacita al trabajador de forma completa o si, por el contrario, puede seguir trabajando en ese gremio.

Es importante destacar que, en definitiva, cualquier enfermedad o lesión puede dar como resultado una incapacidad permanente. Será el Instituto Nacional de la Seguridad Social quien decida.