Aumesquet, candidato de Ciudadanos en Sevilla: “Si estuviéramos muertos no recibiríamos balazos todos los días”
Huye de asumir en la capital hispalense el papel de capitán del 'Titanic', calcula que está como mucho a 5.000 votos de mantener su grupo municipal y llegado el caso pactaría tanto con el PSOE como con el PP (“el que asuma nuestro decálogo”), pero entrando en el gobierno y con él como vicealcalde
Profesional de la publicidad y emprendedor en el terreno turístico (es propietario de un complejo rural y de un alojamiento familiar de playa), Miguel Ángel Aumesquet (Sevilla, 1962) asume con naturalidad que lo tiene muy complicado en las elecciones municipales del próximo 28 de mayo, aunque insiste que a día de hoy sólo necesita un puñado de votos más para conseguir dos concejales. Renunció al coche oficial y se desplaza en bicicleta o patinete eléctrico, y la hora de enumerar los principales problemas de Sevilla apunta a la movilidad, la limpieza, la carga burocrática y la necesidad de vivienda a precio asequible. “Yo no hablo de política, hablo de gestión, y el de Sevilla es un ayuntamiento muy mal gestionado”, repite, y se guarda una puya para muchos de los que han sido sus compañeros de filas: “Los que se están pasando al PP son los que profesionalmente lo iban a tener peor en la vida civil”.
A Ciudadanos se le da directamente por amortizado, ¿el día de las elecciones van a ser el muerto en el entierro?
En absoluto, en principio porque si estuviéramos muertos no recibiríamos balazos todos los días. Entendemos que nadie desperdicia balas disparando contra nada ni contra nadie que esté muerto, y a nosotros se nos sigue disparando todavía a diario. Por otro lado, es cierto (y sería tonto no admitirlo) que posiblemente ahora estemos fuera del 5% de los votos necesario para entrar en el ayuntamiento, pero también es indudable que desde octubre hasta ahora el grupo municipal de Ciudadanos en Sevilla, distinguiendo mucho de Ciudadanos nacional, ha avanzado y está muy cerca de ese 5%.
En este contexto, ¿ser candidato de Ciudadanos es un marrón?
No es el mejor momento para ser candidato, pero yo soy de Ciudadanos, un partido en el que creo. Es un orgullo presentarme aunque sea con tantas dificultades, pero los retos son incluso más apasionantes que la comodidad.
Usted ahora es como el capitán del Titanic, ¿se ve con opciones de salvarlo?
Hombre, no me gustaría que fuera el Titanic, hay que buscar el ejemplo de algún barco que al final se salve, que quede a flote. Yo admito que Ciudadanos ha hecho algunas cosas mal, nada que ver con lo que han hecho otros grupos políticos, pero a nosotros se nos castiga en exceso. Por supuesto, el pueblo es soberano y las urnas mandan. Y creo que el castigo es tan excesivo porque creamos tanta ilusión en la ciudadanía que algunos errores puntuales que han hecho que no se cumplan esas expectativas nos han hecho demasiado daño.
¿Entonces es un partido que ha decepcionado?
Es un partido que hemos decepcionado en la estrategia, no en la gestión. Yo estoy muy orgulloso de la gestión que hemos hecho donde hemos gobernado, como en Salamanca, Cuenca o Zaragoza. Y de la Junta de Andalucía, ¿qué voy a decir? El verdadero cambio de Andalucía lo ha hecho Ciudadanos: en educación, en transformación económica, en servicios sociales, en deporte, en turismo... Pero luego, nuestra estrategia nacional… La línea roja que trazó Albert Rivera de no entrar en el Gobierno con Pedro Sánchez nos hizo mucho daño porque la gente nos votó para que fuéramos el Pepito Grillo, el condicionador de Sánchez, y no cumplimos esa expectativa.
Ahora somos como el Ciudadanos de 2011 y 2015, un Ciudadanos de centro liberal progresista, con un importante foco en la economía, la individualidad y la libertad del individuo, pero también con un marcado acento en la protección social
Tras la refundación del partido, ¿el Ciudadanos de Sevilla es más de izquierdas o de derechas?
Ciudadanos de Sevilla es más cercano al Ciudadanos de 2011 y 2015, un Ciudadanos de centro liberal progresista, con un importante foco en la economía, la individualidad y la libertad del individuo, pero también con un marcado acento en la protección social que aún en nuestro país, sobre todo en nuestra ciudad, necesitan las clases más oprimidas.
Si la aspiración de Ciudadanos es ser un partido bisagra, ¿le da igual que gobierne PSOE o PP?
Yo voy a emular en esta contestación a un político andaluz histórico: nosotros para la gestión (porque hablamos de municipalismo, entonces hablamos más de gestión que de política para un municipio), únicamente creemos en Ciudadanos. Por lo tanto, tendrá que ser el PSOE o el PP el que acepte nuestras políticas liberales y, sobre todo, nuestra forma de gestión. ¿Cómo se va a gestionar el Ayuntamiento? Eso es lo que nos interesa.
¿Y cómo convence usted a un sevillano para que le dé su voto?
Lo primero que tiene que concienciarse el votante es que el 28M no va de un Sevilla-Betis ni de un Barça-Madrid, donde queremos que gane nuestro equipo, aunque sea en fuera de juego en el último minuto y con la mano. Esto va de gestionar nuestra ciudad, del futuro de nuestros hijos. Esto va de tener las calles más limpias, más seguras, mejor iluminadas, de que nuestros hijos puedan quedarse a trabajar y no tengan que emigrar. Es importante que dejemos lo visceral y seamos más racionales. Sánchez y Feijóo no se presentan a las elecciones del Ayuntamiento de Sevilla, se presentan PP, PSOE y Ciudadanos, y lo que hay que elegir es quién va a gestionar mejor los tributos y los recursos económicos.
Pero imagino que intentará seducir con alguna propuesta estrella, ¿no?
Llevamos un decálogo de diez medidas, con profundos cambios en movilidad o crear una delegación de transformación económica y autónomos calco de la que dirigió Rogelio Velasco en la Junta de Andalucía, que fue el motor del cambio andaluz. Otro de los pilares es hacer de Sevilla una ciudad de los jóvenes, ofreciendo vivienda pública de alquiler justo, empleo y facilidades para el emprendimiento, y también ocio y cultura, porque esta ciudad presume mucho de grandes eventos culturales y se olvida de los jóvenes. Queremos también hacer de verdad una ciudad verde, con sombras, en la que los edificios municipales tengan energía alternativa de autoconsumo. Queremos una ciudad mucho más habitable, y también no bajar impuestos como prometen todos cada vez que hay unas elecciones. La idea es congelar las tasas, porque con los recursos que ya obtiene el ayuntamiento de los sevillanos hay más que de sobra para gestionar la ciudad.
¿No le interesa entonces una campaña en clave nacional, como parece que buscan otros partidos?
Queremos salir de la clave nacional porque después de las elecciones Sánchez no va a limpiar mejor la calle, ni Feijóo tampoco, por supuesto. Sánchez no se va a preocupar de Tussam, o de traer empresas a Sevilla. Eso lo vamos a hacer desde el Ayuntamiento de Sevilla, y una forma de atraer a la gente es demostrarles que vamos a gestionar mejor los recursos. Por eso, en los diez primeros de mi lista no va ni un solo político: van profesionales de reconocido prestigio con sus trabajos y que saben hacer equipo, ejecutar, gestionar… El único político, y lo digo medio en broma medio en serio, soy yo, que soy político desde hace tres años después de 33 de carrera civil.
Su grupo municipal ahora tiene cuatro concejales, ¿cómo se siente cuando el PSOE y sobre todo el PP dan por hecho que van a ser para ellos?
Bueno, lo que piensen me da un poco igual, porque estoy convencido de que vamos a estar en el ayuntamiento. Mi meta es mantener los cuatro, pero soy consciente del momento por el que pasa el partido, y con dos seríamos decisivos. ¿Cómo me siento? Bueno, es un menosprecio, pero estamos acostumbrados. Sabemos que las encuestas no son proclives a nosotros, pero también las encuestas están muchas veces condicionadas por los medios, que no son proclives a Ciudadanos.
¿Cuántos votos necesitan para conseguir estos dos concejales?
Calculamos que entre 18.000 y 21.000 votos, y hay que recordar que sacamos casi 15.000 votos en unas autonómicas que no nos acompañaron en nada. Es decir, que hablamos de sumar entre 3.000 y 5.000 votos más para conseguirlo. Y estoy convencido de que en el último mes de campaña lo vamos a lograr.
¿Cómo van a intentar conseguirlo, taponando la sangría de votantes actuales o intentando atraer alguno nuevo?
La sangría creo que ahora ya está frenada. Estamos aprovechando este tiempo de precampaña para explicarle a los sevillanos las cosas que ha hecho Ciudadanos en el Ayuntamiento de Sevilla en este mandato y en el anterior, cómo hemos ejercido de verdadera oposición ante la desaparición del PP. No recuerdo ni una sola propuesta que haya salido adelante del PP que hoy estén disfrutando los sevillanos. Nosotros hemos conseguido la gratuidad del bonobús, el descuento en el IBI para las nuevas empresas, dos nuevos centros cívicos, un nuevo parking en El Zodíaco, una subvención nominativa para el sector del flamenco que quedará arraigada ya para siempre en Sevilla, para las peñas flamencas que estaban olvidadas... El PP sólo ha reaparecido ahora, unos meses antes de las elecciones.
Tenemos margen en un votante del PP moderado que no quiere a Vox, y también en muchos votantes muy desilusionados con las políticas del PSOE a nivel nacional y local y que tampoco quieren que IU vuelva a entrar en el Ayuntamiento de Sevilla
Aunque considera que la sangría se ha parado, necesita pescar votos para tener grupo. ¿Ese caladero puede estar en el PP o en el PSOE?
Creemos que hay un margen en un votante del PP moderado que no quiere a Vox, y también en los muchos votantes muy desilusionados con las políticas del PSOE a nivel nacional y local, defraudados con la gestión de Antonio Muñoz, y que tampoco quieren que IU vuelva a entrar en el Ayuntamiento de Sevilla. Es un amplio caladero al que queremos transmitir nuestros logros y también esa pretensión de sacar la política del ayuntamiento y meter a gestores, meter a profesionales que lo que harán será mejorar la vida de los ciudadanos. Me da igual que esos tintes con lo que se mejoren parezcan de izquierda o de derecha, serán tintes que mejorarán la vida de los ciudadanos. Porque la ciudad está cada día más sucia, la movilidad no avanza nada... No es la política, es la gestión la que hace que Sevilla funcione mal.
Con esos dos concejales a los que aspira, ¿se ve en el gobierno municipal tras un pacto?
Muy probablemente con dos concejales se condicione el gobierno y nosotros sin duda, pero sin la menor duda, estaremos en el gobierno. ¿Con quién? Con quien acepte las líneas de gestión de Ciudadanos, el decálogo sobre el que vamos a asentar nuestro gobierno. Con dos concejales entramos en el gobierno y yo sería el vicealcalde de Sevilla, o el primer teniente de alcalde. ¿Con PSOE o con PP, con Antonio Muñoz o con José Luis Sanz? Estaremos con quien asuma nuestro decálogo de mejor gestión para la ciudad y de menos privilegios para los políticos, que suponen millones de euros en un mandato. Por ejemplo, con la eliminación de la mitad de los coches oficiales para los concejales ya se pagaría nuestra propuesta de autobús gratuito a partir de los 67 años y de 0 a 23.
Pese a la salida del que fue candidato a la Alcaldía, Álvaro Pimentel, su grupo municipal ha conseguido mantenerse estable. ¿De qué se siente más orgulloso en este tiempo?
De estar al servicio de los ciudadanos, porque entendemos que aquí estamos para prestar un servicio a los sevillanos, somos servidores públicos y les servimos a ellos. Desde luego no a nuestro partido, porque no tenemos intereses ni partidistas ni particulares. No hemos ido a crear polémica, no hemos ido a echar a la Junta o a echar al Gobierno, no hemos ido a dañar, ni a meter palos en la rueda.
Pimentel le llamó para entrar en su lista, ¿le decepcionó cómo se resolvió su salida?
Claro, Álvaro merecía una salida de otra forma, y creo que eso ha sido parte por culpa de él y parte por culpa del partido, porque hubo una falta de entendimiento en los últimos minutos.
¿Ve a Pimentel presentándose en las elecciones con otro partido?
No, porque él ha dicho por activa y por pasiva que no, que no se presentaba con otro partido y que él volvía a la vida civil. No lo veo porque él lo ha dicho y creo en su palabra.
Su grupo municipal no se ha roto, pero sí en muchos otros sitios, ¿están abandonando el barco antes de que se hunda del todo?
Me duele ver que muchos que estaban en Ciudadanos no eran de Ciudadanos. Es difícil entender que yo me acueste por la noche creyendo en la igualdad y los derechos de las personas Lgtbi y por la mañana me levante creyendo que es bueno tener recurrido en el Constitucional el matrimonio entre iguales. O acostarme creyendo en la gestación subrogada con tutela judicial y levantarme por la mañana en desacuerdo con eso, cambiar de principios de la noche a la mañana.
Y la mayoría se está marchando al PP...
El PP está haciendo una labor de captación de cargos de Ciudadanos que calificaría cuasi de transfuguismo. Pero fíjese que los que se están pasando al PP son los que profesionalmente lo iban a tener peor en la vida civil, los demás han vuelto a su profesión.
Y si al final las encuestas aciertan, ¿qué va a ser usted después del 28 de mayo?
Pues me tomaré unos días, pero volveré a dirigir mi empresa desde el minuto uno.
Comprometidos con una información cercana
Por eso ahora los lectores y lectoras de elDiario.es, si deciden convertirse en socios/as desde este enlace, aportan un 25% de su apoyo a la edición andaluza. Y si ya eres socio de elDiario, también puedes añadir a tu cuota una cantidad extra destinada íntegramente a nuestra redacción de Andalucía.