El escudo preconstitucional se quedará donde viene estando desde los años 40 pero no será visible. Ha sido la decisión del Ayuntamiento de Sevilla respecto a la cerámica presente en la calle Pastor y Landero, en el edificio del mercado de abastos del Arenal, “mientras se decide un nuevo emplazamiento que ponga en valor la obra en cuestión”. El grupo municipal de Izquierda Unida consideraba que era una “oportunidad” para que el Consistorio hispalense cumpliera la Ley de Memoria Histórica “como tarea prioritaria para todo ayuntamiento democrático” ya que el criterio básico principal del texto legal es “la retirada del vestigio en cuestión”.
La respuesta escrita del Área de Hacienda y Administración Pública, a la que ha tenido acceso eldiario.es/andalucia, viene a reproducir en su mayor parte las consideraciones ya hechas al respecto por el catedrático de Escultura e Historia de las Artes Plásticas Alfonso Pleguezuelo, experto en cerámica. El Ayuntamiento alude a un reciente informe del servicio municipal de Patrimonio, que defiende “no caer en el tan recurrido y olvidado almacenaje” y “proceder a la cubrición u ocultación del escudo preconstitucional”. Así, opta por “proteger toda la cerámica” mediante “la superposición de un elemento neutro”, “o solución similar”, “hasta que se complete la información sobre su autoría e historia”, “dado el indudable valor artístico del escudo”.
El Consistorio indica que la decisión se adopta “con el objeto de dar fiel cumplimiento” a la citada “Ley de Memoria Histórica (Ley 52/2007), de la Orden número CUL/3190/2008, de 6 de noviembre, por la que se dictan instrucciones para la retirada de símbolos franquistas en los bienes de la Administración General del Estado y sus Organismos Públicos dependientes y teniendo en cuenta las indicaciones del 'Informe sobre los criterios generales adoptados en los acuerdos de la Comisión Técnica de Expertos de la Ley de Memoria Histórica' en su VII Reunión Plenaria, celebrada el 28 de junio de 2010”.
Una de las excepciones que se recogen en el artículo 2º de la citada Orden es que “se conservarán aquellos símbolos con alto valor artístico o artístico-religioso y que formen parte del Bien de Interés Cultural y así haya sido reconocido en su declaración”. El informe mencionado dice también que “el criterio mantenido unánimemente por los miembros de la Comisión ha sido el de la no destrucción en ninguno de los casos de los vestigios retirados, por su interés como documentos o testimonios históricos y/o por consideración hacia la calidad material o técnica de algunas de las piezas”.
Moción al pleno municipal
Según ha podido comprobar este periódico, el escudo ya no es visible desde la calle ya que una malla verde cubre toda la fachada mientras 'pican' el edificio. Uno de los trabajadores en la obra comentaba que el escudo se había cubierto ya “con pladur”. El presupuesto de la obra integral, que mejorará la estructura del inmueble, los sistemas de canalización de agua y luz, ascensores, balcones y cubierta, además del arreglo de la fachada, ronda los 1,5 millones de euros.
Por su lado, Participa Sevilla e Izquierda Unida elevarán al Pleno municipal de este viernes una moción con el objetivo de que el equipo de Juan Espadas se implique en la recuperación de la memoria histórica, poniendo en marcha para ello una serie de políticas basadas en los principios de “verdad, justicia y reparación” y que incluyen, entre otras medidas, retirar símbolos fascistas, dignificar las fosas comunes del cementerio y una oficina para localizar desaparecidos.
En rueda de prensa, las ediles Eva Oliva (IU) y Susana Serrano (Participa) han presentado esta iniciativa conjunta en el monolito erigido en las murallas de la Macarena en recuerdo a los republicanos fusilados por las tropas franquistas en ese lugar, donde han estado acompañadas además por los representantes de diversos colectivos y asociaciones del movimiento memorialístico de la ciudad.