La Fiscalía de Sevilla ha comenzado a investigar si un equipo médico del hospital universitario Virgen Macarena emprendió un estudio con pacientes diabéticos sin su consentimiento informado ni el aval del comité ético. Así lo confirman fuentes del Ministerio Público consultadas por SevillaelDiario.es, después de que el médico que alertó de “irregularidades y malas prácticas” por parte de sus compañeros del servicio de Medicina Interna decidiera el pasado mes de julio llevar ante los tribunales el caso del que ha venido informando este periódico.
En su denuncia, presentada después de que el hospital decidiera dar carpetazo a su propia investigación interna sin tomarle declaración, el facultativo solicitaba al Ministerio Público que tratara de aclarar si cuatro médicos del hospital sevillano extrajeron muestras sanguíneas con fines investigativos en pacientes ingresados por pie diabético sin informarles previamente, ni a ellos ni a él como responsable.
Hechos que, a juicio del médico denunciante, “revisten indiciariamente los caracteres de un delito” contra la intimidad recogido en el Código Penal, así como de una “infracción contra la Ley Orgánica de Protección de Datos Personales y garantías de derechos digitales, Ley de Investigación Biomédica y la Ley General de Sanidad”, según consta en el escrito al que ha tenido acceso este periódico.
Ahora, a la vuelta del verano, la Fiscalía ha iniciado los trámites con los que arranca la investigación, que se suma a la que ya inició en febrero el Consejo de Transparencia y Protección de Datos de Andalucía. Esta entidad independiente admitió a trámite la reclamación que el mismo médico del Macarena registró en noviembre “como una posible infracción de la normativa de protección de datos”. El periodo de “actuaciones previas de investigación” continúa en marcha y puede prolongarse hasta 18 meses con objeto de recabar información, tal y como indican fuentes de Protección de Datos a este diario.
Cronología del caso
Los hechos denunciados se remontan al mes de abril de 2023, cuando un paciente hospitalizado por “descompensación y complicaciones por pie diabético” preguntó a su médico por los resultados de una analítica que le habían realizado. Desconcertado, puesto que él como responsable no había prescrito ninguna prueba ni nadie del servicio le había comunicado nada al respecto, consultó el registro y detectó que, al menos desde marzo, se habían realizado otras tantas solicitudes de análisis en pacientes con el mismo cuadro clínico ingresados bajo su responsabilidad.
La doctora que figuraba como peticionaria de todos ellos resultó ser una de las autoras del estudio identificado con las siglas BIOEAP, que, según la denuncia, se puso en marcha sin esperar la autorización preceptiva del Comité Ético de Investigación de los hospitales Virgen Macarena y Virgen del Rocío, órgano responsable de dar luz verde a las propuestas de ensayos científicos en Sevilla. El denunciante basa esta afirmación en que el dictamen sobre el mismo se emitió tres meses después, el 26 de junio, y fue “desfavorable”, por lo que rechazaba su realización.
“Ello demuestra las irregularidades que se estaban cometiendo en el proyecto de investigación Ilevado a cabo”, sostiene el especialista de Medicina Interna en su denuncia, remarcando que “el estudio ya estaba en marcha desde marzo de 2023, tal como se evidencia al menos con la primera de las solicitudes de análisis clínicos detectados sobre mis pacientes”. En este punto del escrito recuerda que la Ley de Investigación Biomédica establece que “toda investigación en seres humanos debe estar sujeta al cumplimiento de las normas éticas para preservar la dignidad, los derechos y la seguridad de las personas, y a la autorización expresa del Comité de Ética de Investigación Clínica”.
Todo ello se puso en conocimiento de la dirección médica del hospital Macarena por escrito en octubre de 2023. El centro inició entonces “de forma inmediata” una investigación interna que se da por concluida desde marzo “al no acreditarse los hechos denunciados”, según informan fuentes del Macarena consultadas por este periódico.
El médico, al no conformarse con el archivo –insiste en que ningún directivo o funcionario de la institución hospitalaria se ha puesto en contacto con él para contrastar las pruebas de las que daba cuenta en su notificación– decidió recurrir a la justicia, registrando una denuncia ante la Fiscalía de Sevilla el pasado 19 de julio. Ahora el Ministerio Público tendrá que dirimir si, como teme el denunciante, esas muestras biológicas extraídas sin informar a los pacientes ni al médico responsable se hicieron saltándose los procedimientos que marcan los códigos éticos de investigación médica y la legislación vigente.