El Pleno del Ayuntamiento de Sevilla ha aprobado por unanimidad la moción presentada por el Grupo Socialista para instar al nuevo gobierno de la Junta de Andalucía, presidido por el 'popular' Juanma Moreno, a que mantenga los compromisos con el Consistorio para llevar a cabo la exhumación de los restos de las personas que fueron asesinadas entre julio y agosto de 1936 como consecuencia del golpe militar de Francisco Franco y enterradas en la fosa común de Pico Reja en el cementerio de San Fernando de la capital hispalense, en la que podría estar Blas Infante, padre de la patria andaluza.
La moción apunta al acuerdo firmado por el PP con Vox para investir a Moreno y que recoge “de manera implícita la derogación de la Ley de Memoria Histórica y Democrática de Andalucía, al establecer que se va a promover una 'ley de concordia' que sustituya a la Ley de Memoria Histórica”.
En la sesión plenaria, que arrancaba con un minuto de silencio por la mujer asesinada en Dos Hermanas (Sevilla) por su marido, la delegada de Educación, Participación ciudadana y Edificios Municipales, Adela Castaño (PSOE), ha incidido en el “temor” existente por el acuerdo firmado entre PP y Vox y recalca que “el camino no ha sido fácil hasta aquí”, defendiendo el avance en la materia impulsado por el gobierno del socialista Juan Espadas.
“Nos debemos a las víctimas y a sus familias que, por primera, vez han visto un gobierno que los está dignificando y que busca la justicia y la reparación”, afirma, dejando claro que, en estos momentos, el objetivo principal es comenzar las exhumaciones de Pico Reja, algo que está pendiente del acuerdo a firmar entre Ayuntamiento, Diputación y Junta de Andalucía. Por ello, insta a la Junta a seguir participando en los trabajos en el cementerio para exhumar “a esas más de mil personas asesinadas para que sus familias puedan darles un entierro digno y sepan dónde están, como merece cualquier ser humano”.
De su lado, la portavoz de Participa Sevilla, Susana Serrano, ha acusado a los socialistas de “cínicos” y de “uso partidista” de la Oficina de Memoria Histórica. La moción recogía en su punto de acuerdo el término “guerra civil”, algo que Serrano pidió cambiar por “golpe militar franquista contra una república constituida legalmente” y que contó con el apoyo de Castaño, aunque después no pudiera llevarse a cabo por los tiempos de presentación de la enmienda.
Por último, la concejal de IU Eva Oliva ha afirmado que la moción del PSOE pretende “justificar lo que se podía haber hecho pero no se realizó”. “Lo que ha hecho Castaño es vender esperanza a los familiares de esas víctimas del golpe de estado pero, pese a darse muchos golpes de pecho por la Ley de Memoria Democrática, no ha sido un gobierno valiente”, afirma, tras asegurar que aún queda “mucho por hacer” y criticar la falta de ejecución de las partidas en esta materia.