El sector cultural andaluz estalla contra la Junta por costear el macroevento cofrade de Sevilla: “Es una chulería más en la cara”
Mientras Sevilla se prepara para el acto de clausura del II Congreso Internacional de Hermandades y Piedad Popular, en el sector de las artes escénicas la procesión ha pasado de ir por dentro a elevarse como un clamor. La noticia de que La Magna –como se conoce a la concentración de pasos que durante 40 horas llenarán las calles de la capital hispalense el próximo domingo, 8 de diciembre– cuenta con un presupuesto de 600.000 euros aportado por el Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía, y que éste procede de un remanente sin ejecutar de la Consejería de Cultura, ha terminado de caldear los ánimos de un sector exhausto tras años de crisis económica, efectos de la pandemia y unos presupuestos cada vez más cortos.
“Es una chulería más en toda la cara del sector”, aseveran los afectados. “Una desfachatez total, empezando por la forma de argumentar la partida de los 600.000 euros, hablando de que se trata de un sobrante y del interés cultural, social y económico del evento, como si lo que hacemos nosotros careciera de él. Es algo que nos solivianta y nos recuerda que estamos en un campo de minas. Esta nos ha estallado a finales de año, cuando las empresas de las artes escénicas llegamos ahogadas, mientras el dinero se va para asociaciones privadas de carácter religioso”.
Hasta 14 asociaciones, entre las que se encuentran la Asociación Andaluza de Profesionales y Compañías de Danza (PAD), la Asociación de Circo de Andalucía (ACA), la Asociación de Directoras de Escena de Andalucía (ADA) o la Unión Internacional de la Marioneta en Andalucía (UNIM) dirigieron el pasado día 28 de noviembre una carta a la consejera de Cultura y Deportes, Patricia del Pozo, expresando su sorpresa ante el hecho de que “para un único evento que ya cuenta con numerosos apoyos privados y públicos la Consejería de Cultura destine 600.000 euros extra cuando, por ejemplo, para la promoción de todo el sector del teatro, la música, la danza y el circo en Andalucía, apenas se destina el doble de esta cantidad durante todo un año”.
Números decrecientes
Según añade la portavoz del colectivo, Nines Carrascal, “no podemos creer que la ayuda a La Magna se trate de un remanente, siendo una cantidad de estas características. Para unas cifras como estas se necesita una partida aprobada desde hace tiempo”, denuncia. “Es cierto que la interlocución con el Instituto de las Artes y de la Música es buena. El problema no está ahí, sino más arriba. Un director general puede trabajar con la mejor intención, pero si no tiene recursos, no puede hacer milagros”.
No son los únicos números llamativos: también aludían a la reducción sistemática, tanto en las subvenciones en régimen de concurrencia competitiva para la promoción del teatro, la música, la danza y el circo, como en los programas Abecedaria y Red Andaluza de Teatros Públicos. “En 2016, el sector escénico andaluz (teatro, danza y circo) solicitó ayudas por un total de 3.200.000 euros (121 proyectos). Se concedió el 28% (900.000 euros). En 2023, nueve años después, el sector escénico y musical solicitó 7.400.000 euros. En la resolución definitiva recientemente publicada, se han concedido ayudas a 50 proyectos (de un total de 185 presentados) y solo un 19% del montante total solicitado, es decir 1.460.000 euros”.
Según apunta Carrascal, la aportación pública de los municipios adheridos a la Red se mueve entre los 8.000 y los 18.000 euros, lo que hace “muy difícil que programen espectáculos de más de 3.000 euros. Eso hace que estos sean cada vez más reducidos en el número de intérpretes, lo que va en detrimento de la creación de empleo”, lamenta. “La situación de Andalucía no resiste la comparación con otras comunidades que sí hacen una apuesta seria, y cuyos presupuestos alcanzan un 2% para Cultura. Andalucía se ha quedado atrás, y los números actuales son una afrenta y una falta de respeto para el sector productivo de nuestra tierra”.
Carácter excepcional
También manifestaban en su carta “nuestra estupefacción porque una cantidad tan importante de dinero se adjudique directamente a una entidad privada, como es el Consejo General de Hermandades y Cofradías, a través de un procedimiento tan poco usual como es una subvención de carácter excepcional, no teniendo en cuenta los principios de publicidad, transparencia, objetividad, igualdad y no discriminación por los que se rigen las ayudas y subvenciones en las que participamos las entidades del sector cultural”.
Asimismo, los firmantes manifiestan su desacuerdo con que “la Consejería de Cultura y Deportes no habilite mecanismos que permitan que los remanentes de la ejecución presupuestaria del departamento sean destinados a reforzar un sector cultural andaluz que vive en una situación de fragilidad endémica por la falta de apoyos institucionales”.
Frente a estas acusaciones, fuentes de la Consejería consultadas por elDiario.es Andalucía subrayan que la comunicación con el sector es “permanente”, y quiere dejar claro que la aportación de la Junta a La Magna “se destina exclusivamente al congreso científico” de la cita, que reunirá a más de 1.800 expertos de todo el mundo, así como al “programa cultural” de la misma, “que comprende una decena de exposiciones, así como los ciclos de conciertos que se vienen desarrollando” con tal motivo.
Apoyo al arte sacro
“Existen razones de interés público que justifican esta aportación”, asegura la entidad autonómica, “desde el refuerzo de la posición de Sevilla como destino cultural, al impacto que tiene en los sectores relacionados con el arte sacro, como la orfebrería, la imaginería, los bordoneros, los pasamaneros, los talleres de bordado, etc”. Las mismas fuentes recuerdan que más de 4.500 familias viven del arte sacro en Andalucía, y que la artesanía en general sostiene a 7.000 empresas, lo que supone más del 18% del sector en toda España. “El Ministerio de Cultura acaba de otorgar la Medalla al Mérito de las Bellas Artes a la Asociación Gremial Sevillana de Arte Sacro de Sevilla, que merece el reconocimiento y el respeto de todos”.
Unas explicaciones insuficientes para el sector, que si bien admiten la buena voluntad sobre el papel de la Junta, que se ha comprometido a incrementar los presupuestos, “las cantidades de incremento, 40.000 en las ayudas y 6.300 en la Red de Teatros públicos y Abecedaria, expresan la poca o ninguna consideración que tienen con el sector escénico y musical. Es una política cultural incongruente entre lo que se dice y lo que se hace. Es una respuesta y una propuesta denigrante y vergonzosa”.
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