Los gobiernos del PP en Madrid han multiplicado por diez el presupuesto de los colegios que segregan por sexos
El número de colegios que segregan por sexos y que reciben financiación pública se ha disparado durante los últimos gobiernos del Partido Popular en la Comunidad de Madrid. Si en el curso 1999-2000 había cuatro centros, actualmente existen 18. La aportación económica regional ha pasado durante este periodo de 4,1 millones de euros a 39 millones por curso escolar.
El aumento presupuestario destinado a esta partida no ha parado de crecer en estos 19 años. El punto de inflexión llegó con el Gobierno de Esperanza Aguirre. Hasta entonces, durante los últimos años de mandato regional de Alberto Ruiz-Gallardón, el número se mantuvo estable, oscilando entre cuatro y cinco.
Sin embargo, con el desembarco del equipo de la expresidenta del PP de Madrid se potenció este modelo concertando colegios a entidades religiosas que no mezclaban a niños y niñas en las clases. Cuando ella tomó posesión en su cargo, existían cinco centros de este tipo y, tras nueve años de mandato, esa cifra se triplicó hasta los 17.
341 millones en 19 años
A pesar de que durante el Gobierno de Cristina Cifuentes no se ha concertado ningún centro más que segregue por sexos, su Ejecutivo es el que más dinero público ha destinado a este modelo educativo en las últimas dos décadas. El curso pasado se alcanzó un máximo en la financiación de estos colegios, con un desembolso de 39 millones de euros.
“Garantizamos la libertad de elección las familias madrileñas para escoger el tipo de educación que quieren para sus hijos, algo que además recoge la Constitución española”, apuntan desde el Ejecutivo regional. Actualmente 18.900 alumnos acuden a colegios que segregan por sexos, una cifra que representa el 1,6% del total de los estudiantes madrileños.
Financiación colegios que segregan por sexos
El aumento de dinero público para este modelo educativo ha sido progresivo en el periodo estudiado. Por ejemplo, en el curso 2005-2006 estos centros recibieron 8,7 millones; en 2009/20010, 21,9 millones; y en 2014-2015, 33,9 millones.
En total, desde comienzos del siglo hasta junio de este año, financiar la educación segregada ha supuesto 341,8 millones de euros para las arcas públicas de la Comunidad de Madrid. Aunque solo la mitad de los centros tienen una vinculación con el Opus Dei, en este periodo estos colegios han recibido la mayor parte del presupuesto: 239 millones de euros, una cifra que representa el 70% del total.
Estos datos han sido facilitados por la Comunidad de Madrid tras una petición de información de eldiario.es al portal de transparencia regional. Según esta información, durante el curso 1999-2000, todavía bajo el mandato de Alberto Ruiz Gallardón, los cinco colegios que separaban a sus alumnos por sexos en clase estaban vinculados a la prelatura de Escrivá de Balaguer (Tajamar, Senara, Retamar, Besana y EFA Valdemilano). El centro Besana desapareció en el año 2013; es el único que ha cerrado sus puertas durante este periodo.
La mitad de los centros, vinculada al Opus Dei
A lo largo del mandato de Aguirre, su Gobierno adjudicó conciertos a cinco centros más vinculados al Opus Dei, bien por ser “obras corporativas” de la organización (Andel, Fuenllana y Los Tilos) o, en el caso de Las Tablas Valverde y Los Olmos, por pertenecer a Fomento de Centros de Enseñanza, organización educativa que desde sus inicios les solicitó “que le ayudara a mantener viva su identidad cristiana” en las escuelas que gestionan en todo el país.
En esa época también se vio beneficiada la Fundación Arenales, dirigida por Alfonso Aguiló, docente que no era un desconocido en el mundo educativo ya que durante once años fue director del colegio Tajamar. Durante el Gobierno de Aguirre y más tarde el de González esta compañía acaparó cuatro centros de este tipo.
Los cuatro colegios que más dinero público han recibido durante estos 19 años pertenecen al Opus Dei: Tajamar obtuvo 74,5 millones de euros; Fuenllana recibió 35,5 millones; a Las Tablas Valverde le concedieron 29,4 millones de euros y al colegio Senara, 24,5.
La polémica Fundación Educatio Servanda obtuvo en este periodo 16,3 millones. El director del centro que tienen en Alcorcón, uno de los colegios financiados por los gobiernos regionales, fue denunciado ante la Fiscalía por la propia Comunidad de Madrid por comparar la ley contra la LGTBfobia con “el fanatismo terrorista”.
“Esta financiación contradice la ley LGTBI”
“Subvencionar con dinero público colegios que segregan contradice por completo la intención de las leyes contra la violencia LGTBI y trans que hemos aprobado en la Asamblea de Madrid. Esas leyes buscan precisamente proteger la libertad de las personas LGTBI en las escuelas y fomentar la igualdad, pero segregar por sexos es justo lo contrario”, reseña Eduardo Fernández Rubiño, diputado de Podemos en la Cámara regional.
Esta evolución al alza puede verse, por ejemplo, en el colegio Fuenllana, que obtuvo 483.311 euros en su primer concierto (en 2004-2005) y actualmente recibe 3,5 millones. El Edith Stein, por su parte, pasó de gestionar 439.267 euros públicos en 2009 a 2,8 millones en el 2016.
El grupo gestor de este último, según publicó en 2009 El País , fue promovido por dos exaltos cargos del Gobierno regional: “José Javier Fernández Santamaría, exdirector gerente del Canal de Isabel II, y Alejandro Sanz Peinado, exdirector general de Deportes, son presidente y consejero, respectivamente, de la empresa que dirige el centro”. En aquel momento, la Comunidad aseguró que “no incurrían en incompatibilidad” al haber pasado dos años desde que ocuparan cargos públicos.