La Policía multa con la Ley Mordaza a una activista de Femen por irrumpir en un acto franquista de Falange en 2018
La Policía ha multado con 300 euros a una de las activistas de Femen que protestaron en el acto organizado en noviembre de 2018 por Falange para exaltar la figura de Franco y del que salieron pateadas e insultadas por miembros de la concentración. La mujer ha recibido este jueves la notificación de la Delegación del Gobierno en la Comunidad de Madrid, a la que ha tenido acceso eldiario.es, en la que se especifica el inicio del procedimiento sancionador en base a la Ley Orgánica 4/2015, de 30 de marzo, de protección de la seguridad ciudadana, conocida como Ley Mordaza.
La multa tiene su origen en una denuncia interpuesta por la Policía el 22 de enero de 2019, dos meses después de la protesta, y en ella se cita que los hechos podrían ser constitutivos de una infracción grave. En concreto, por “perturbación de la seguridad ciudadana en actos públicos, espectáculos deportivos o culturales, solemnidades y oficios religiosos u otras reuniones a las que asistan numerosas personas, cuando no sean constitutivas de infracción penal”, tal y como establece el artículo 36.1 de la norma.
La notificación, fechada el 18 de septiembre, relata que el día 18 de noviembre de 2018, día en el que “la organización política Falange había convocado un acto autorizado por la Delegación del Gobierno”, los agentes policiales “se encontraron a tres personas” que posteriormente “irrumpen de forma sorpresiva en dicho acto autorizado, realizando proclamas y consignas contrarias al acto convocado”. “Todo ello –prosigue el escrito– con el torso totalmente descubierto perturbando la seguridad del mismo”.
La Delegación del Gobierno le impone una multa de 300,50 euros, la mitad del mínimo que contempla la ley para las infracciones graves (de 601 a 30.000 euros). La activista puede hacer frente al pago en 15 días, un plazo en el que puede también presentar alegaciones. Si no responde, deberá ingresar los 601 euros, especifica la notificación. Aunque, de momento solo le ha llegado a una de las activistas, fueron tres las que protagonizaron la protesta, por lo que desde Femen concluyen que también les llegaran a las otras dos miembros de la organización feminista.
Aquel día, Falange Española había convocado un acto en la madrileña Plaza de Oriente con motivo del aniversario de la muerte de Franco y el objetivo de pedir la derogación de la Ley de Memoria Histórica. Pocos minutos antes de que empezara, las tres 'Femen' comenzaron a protestar y a lanzar varios lemas contrarios al franquismo. En sus torsos se podía leer “fascismo legal, vergüenza nacional” y en la espalda mostraban el escudo preconstitucional tachado con una cruz roja y la frase “Stop 20N”.
Las activistas fueron increpadas por los manifestantes, que portaban banderas de Falange con consignas como “Viva la unidad de España” o “Sánchez desokupa y deja a Franco en paz”, en alusión a la exhumación del dictador del Valle de los Caídos. Las integrantes del colectivo feminista fueron placadas y pateadas, escupidas e insultadas por varios asistentes a la concentración y las imágenes tuvieron repercusión incluso a nivel internacional.
“Nos gritaban 'puta' y 'a la hoguera' mientras nos agredían”, aseguró a eldiario.es una de las activistas pocos días después. De hecho, aunque la protesta duró apenas unos minutos, fue la Policía la que acabó interviniendo para sacar a las activistas del lugar entre empujones de los manifestantes, según se pudo ver en las imágenes.
Querella de Falange
Las 'Femen' se enfrentan además a otro procedimiento, en este caso penal, por lo ocurrido aquel 18 de noviembre. Y es que el Juzgado de Instrucción nº 41 de Madrid admitió a trámite una querella de Falange Española en la que acusa a las activistas de delitos de coacciones, desórdenes públicos y contra el ejercicio de los derechos fundamentales. Por ello, las tres fueron citadas a declarar ante el juez el pasado mes de mayo, sin tener conocimiento de ningún paso más en este procedimiento, indican fuentes de la organización.
En todo momento, el colectivo y su abogado en el caso, Endika Zulueta, han defendido que se trató de una acción “pacífica y simbólica” que “no es constitutiva de delito alguno”. El objetivo de las 'Femen', por el contrario, era “visibilizar” que en España “se siguen permitiendo manifestaciones en las que se enaltece el franquismo”.
La multa es la última de una larga ristra de procedimientos a los que las activistas han tenido que enfrentarse por sus acciones, entre ellas, la condena por la Audiencia Provincial de Madrid a dos activistas que se encadenaron a La Almudena (Madrid) gritando proclamas a favor del aborto.
El tribunal revocó la absolución que en un primer momento había dictado un juzgado y estimó parcialmente los recursos de la Fiscalía y de la acusación particular, la Asociación Abogados Cristianos –que también ejerce este papel en el juicio por el 'Coño Insumiso', celebrado este mismo jueves–. Así, la Audiencia consideró que los hechos “no pueden enmarcarse en la libertad de expresión” y son constitutivos de un delito de profanación. Las 'Femen', sin embargo, no tiraron la toalla y decidieron pedir amparo al Tribunal Constitucional.