Benedicto XVI cumplió 95 años el pasado 16 de abril. Sin embargo, será los días 26 y 27 de octubre cuando el salón de actos del CEU de Madrid acoja un curioso acto en celebración de la onomástica del Papa emérito, que según su secretario personal, Georg Gänswein, se va “apagando lentamente” y cuyo falso fallecimiento llegó a anunciarse la pasada semana.
Hasta aquí, poca noticia, salvo la curiosidad de celebrar un congreso universitario por los 95 años (y medio) del Papa alemán, que en los últimos meses ha vuelto a ser acusado de encubrimiento en varios casos de abusos durante su etapa como arzobispo de Múnich. La novedad estriba en los organizadores (el CEU, obra de la ultraconservadora Asociación Católica de Propagandistas, la alemana Fundatio Christiana Virtus y la Asociación de Teología Eclesiástica) y, sobre todo, en los invitados al mismo, que forman parte del círculo de opositores al actual Papa Francisco. Un Bergoglio que, por cierto, cumple 86 años el 17 de diciembre, pero para el que no parece organizarse evento alguno en España.
¿Y quiénes son los protagonistas de lo que parece un akelarre anti-Francisco y pro-Benedicto en Madrid? La estrella no es otra que el ex prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, el cardenal alemán Gerhard Müller, desplazado de su puesto en la curia por Bergoglio tras constatar que se trataba de uno de sus principales opositores en el interior del Vaticano.
Desde entonces, Müller aprovecha cualquier ocasión para arremeter contra Francisco, ya sea con su proyecto de reforma de la Curia (que acaba de entrar en vigor), que calificó de “error fatídico”, ya sea con las “herejías” del Sínodo (como el mayor papel de las mujeres o el sacerdocio de los casados), los divorciados vueltos a casar o el fin de las misas en latín.
Munilla y Reig, siempre presentes
Junto a Müller, dos de los representantes del conservadurismo más rancio del episcopado español. De un lado, el todavía obispo de Alcalá (acaba de presentar su renuncia, con lo que en octubre tal vez ya sea prelado emérito), Juan Antonio Reig, uno de los protagonistas en las denunciadas terapias de conversión homófobas, defensor confeso de los benedictinos del Valle de los Caídos y autor de frases tan comentadas como la de que los homosexuales “encuentran el infierno” en plena misa de Semana Santa transmitida por la televisión pública; del otro, el obispo de Orihuela-Alicante, José Ignacio Munilla, también implicado en las falsas terapias de conversión y que en numerosas ocasiones ha manifestado opiniones polémicas respecto al aborto, las relaciones homosexuales o “la ideología de género”.
El evento será presentado por el presidente de los propagandistas –y uno de los impulsores del movimiento NEOS, dirigido por Mayor Oreja, y de las últimas manifestaciones contra el aborto y la eutanasia–, Alfonso Bullón de Mendoza, y contará con la asistencia, entre otros, de uno de los historiadores que con mayor fervor han defendido las bondades del Valle de los Caídos (y atacado la Ley de Memoria Democrática), Alberto Bárcenas, o el biógrafo de Benedicto XVI, Peter Seewald.
Oficialmente, el congreso se convoca “para honrar los 95 años del papa emérito Benedicto XVI”, pero a nadie se le escapa que el programa busca incidir en las diferencias doctrinales entre el pontífice emérito y su sucesor. De hecho, la ponencia de Müller, quien ha advertido en numerosas ocasiones del riesgo de cisma, lleva por título La Iglesia y la unidad en la fe, mientras que otras harán referencia al relativismo y el cuidado que Ratzinger puso a la defensa de la vida, la familia y la liturgia, algunos de los temas que sirven como arietes de ataque a los enemigos de Francisco.
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