La gran coalición de la canciller alemana, Angela Merkel, se ha marcado como objetivo lograr para 2025 la plena equiparación de las jubilaciones del oeste y del este del país para dar por superado el desnivel aún persistente desde la reunificación.
Las tres formaciones gubernamentales -la Unión Cristianodemócrata (CDU) de Merkel, más su hermanada Unión Socialcristiana de Baviera (CSU) y el Partido Socialdemócrata (SPD)- alcanzaron este acuerdo, que fue presentado hoy por la ministra del Trabajo y Asuntos Sociales, Andrea Nahles.
Con ello se pretende cerrar las diferencias persistentes en el nivel de las rentas de lo que fue el territorio comunista, que más de 25 años después de la reunificación se sitúa alrededor del 90 % respecto a la mitad occidental del país.
La plena equiparación no se logrará hasta 2025, lo que Nahles admitió como “algo más tarde” de lo deseable o prometido por anteriores Ejecutivos, pero según la ministra es un plazo asumible.
El coste de esta progresiva equiparación se estima, según cálculos del grupo parlamentario conservador, en unos 3.700 millones de euros.
La titular de Trabajo y Asuntos Sociales explicó, asimismo, que el pacto alcanzado la noche anterior entre los líderes de la gran coalición -Merkel, el bávaro Horst Seehofer y el socialdemócrata Sigmar Gabriel- contempla además una serie de medidas para evitar lo que calificó de “jubilaciones de pobreza”.
Entre otros factores, se prevén una serie de mejoras para quienes deban dejar la vida laboral activa antes de lo previsto, por razones de salud, y que actualmente sufren recortes en su jubilación.
“Nuestro objetivo es evitar la pobreza en la vejez y, a la vez, lograr una justicia generacional para el contribuyente actual y el jubilado del futuro”, apuntó la ministra, según la cual la cuota al seguro obligatorio no superará en ningún caso el 25 %.