Barcelona, 21 ene (EFE).- El Servicio Catalán de la Salud (CatSalut) prevé un escenario “muy duro” para las próximas semanas en los hospitales, con unas 900 personas ingresadas en camas de UCI, si la pandemia por COVID-19 continúa la actual evolución.
Así lo ha expresado este jueves el director del CatSalut, Adrià Comella, en rueda de prensa telemática junto con la consellera de Salud, Alba Vergés; el conseller de Interior, Miquel Sàmper, y el comisario de los Mossos d'Esquadra, Joan Carles Molinero.
“La tercera ola de la epidemia no tendrá nada que ver con la segunda y se parecerá más a la primera”, que se vivió entre marzo y mayo del pasado año, ha considerado Adrià Comella, que ha indicado que si se cumplen sus previsiones Cataluña tendrá su capacidad asistencial “al límite”.
A los 900 enfermos críticos de COVID, Comella ha indicado que se deben sumar unos 300 pacientes más de otras patologías, con lo que “podemos ir a un escenario de 1.200-1.300 personas en camas de UCI”.
El sistema de salud de Cataluña “tiene capacidad de respuesta” para esta situación pero “obligará a reprogramar determinadas actuaciones”, como operaciones no urgentes o visitas a especialistas, ha reconocido.
Según sus datos, esta desprogramación llega a entre el 10 y el 15 por ciento de lo previsto, en función de los territorios más afectados o menos por la pandemia y la presión asistencial que soportan los centros de atención primaria y hospitales.
En cuanto al proceso de vacunación, la consellera de Salud ha avisado este jueves que “nadie se quiera pasar de listo” y ser vacunado antes que los colectivos a los que se ha dado prioridad en este primer trimestre.
Vergés ha asegurado que “no hay excepciones” y que la prioridad es que se vacunen las personas mayores que viven en residencias, los trabajadores de las mismas que los cuidan, y el personal sanitario, empezando por los que están en primera línea.
Los técnicos del transporte de ambulancias han denunciado en un comunicado que directivos de al menos tres empresas privadas concesionarias de este servicio en Cataluña, “se han saltado el programa de vacunación” y ya han sido vacunados mientras no lo ha sido el personal sanitario de primera línea que atiende diariamente a enfermos.
Por otra parte, la consellera ha lamentado que “el ministro-candidato (en referencia a Salvador Illa) se llene la boca de cogobernanza y no facilite todas las herramientas para gestionar bien la epidemia”, en referencia a la petición “muy mayoritaria” de varias autonomías a que se delante el toque de queda a las 20.00 horas, que no ha pedido Cataluña.
Vergés ha reclamado de nuevo más ayudas económicas al Gobierno, especialmente dirigidas a los sectores económicos más afectados por las medidas restrictivas, “claves para frenar la epidemia”.