En 2014 se recogieron en las protectoras y refugios de toda España casi 140.000 animales, entre perros y gatos, según el último estudio de la Fundación Affinity -obra social pro animales de la empresa privada de alimentación- hecho a partir de datos de las propias asociaciones. Estas son 5 de las claves para entender este drama estructural.
La crisis afecta
Aunque el número total de abandonos se ha mantenido estable a lo largo de los últimos 6 años, la crisis se ha introducido entre las razones por las que prescindimos de nuestros animales, según datos analizados de los distintos estudios de abandono animal de la Fundación Affinity. Los abandonos motivados por factores económicos, que en 2009 eran el sexto motivo para desentenderse de la mascota, se han duplicado para situarse como la primera causa de abandono en 2014, con el 16% de los casos.
Además, la pérdida de empleo se instaura entre las razones esgrimidas para abandonar a un animal, con 5% de los casos en 2014. A pesar “del posible impacto de la crisis”, muchos de estos abandonos podrían evitarse con una “correcta planificación” por parte de los propietarios, según la fundación.
El mito del verano
El pasado 30 de junio, el cuenta oficial de Twitter de la Guardia Civil llamaba a sus seguidores a no abandonar a sus animales en vacaciones. Una opinión muy extendida de que se abandonan más animales en verano y antes del periodo estival. Los datos muestran que el abandono es un fenómeno estable a lo largo del año y que no se abandonan más animales durante el verano.
En la distribución por cuatrimestres, vemos que los abandonos de perros durante el segundo cuatrimestre (mayo-agosto) representan un 33% de los casos en 2014, el mismo porcentaje que en el primer y tercer cuatrimestre. Además, solamente el 1% de los abandonos en ese año tuvieron su causa en las vacaciones.
Olvidando el microchip
Apenas un 30% de los perros y un 3% de los gatos que llegaron a los distintos refugios y protectoras estaban identificados correctamente, aunque la situación ha mejorado levemente en los últimos 6 años. En 2008, solo el 24% de los perros llevaba el microchip pese a que es una medida obligatoria para los propietarios de las mascotas. Por ejemplo, en la ciudad de Madrid hay que inscribir a los animales en el Registro de Animales de Compañía. En 2015, los animales censados en la ciudad madrileña sumaban más de 300.000 entre perros y gatos, según datos proporcionados por el Colegio Oficial de Veterinarios de la capital. María, voluntaria de la sociedad protectora ANAA, pide a los veterinarios que le exijan los microchips a los dueños. “Aquí hay alguien que no está haciendo bien su trabajo porque es obligatorio por ley”, critica.
Esterilización
Las camadas indeseadas están entre las únicas razones que siguen igual por las que se realiza un abandono. El 13% de los casos, tanto en 2009 como en 2014, estuvieron causados por el nacimiento de crías no deseadas. La fundación autora del estudio apuesta por la esterilización como método para prevenir la superpoblación y el abandono consecuente. Una medida en la que coincide con PACMA. Laura Duarte, portavoz de la formación animalista, reclama que la esterilización sea obligatoria para evitar la reproducción incontrolada de animales.
Crece la adopción
En 2009, el principal destino al que se resignaban los animales era permanecer en el refugio donde fueron recogidos. Cinco años después, en 2014, la situación ha cambiado. Ahora, el principal destino que les espera a casi la mitad de las mascotas recogidas es la adopción. Una decisión que, para 6 de cada 10 adoptantes, está motivada con la sensibilización “con el problema del abandono” o por querer colaborar con la protectora, según los datos de la Fundación Affinity. “Es algo positivo, empieza a reflejar esa conciencia que está mejorando”, opina Duarte.