El Congreso de los Diputados ha dado luz verde de forma definitiva a la reforma que refuerza la formación de los jueces en violencia machista. El pleno ha aprobado por 337 votos a favor y dos abstenciones la iniciativa del PSOE que se transformará en la primera reforma legislativa en aplicación del Pacto de Estado contra la Violencia de Género y que convierte en especialidad jurídica la violencia de género, como ya ocurre con otras materias como menores o mercantil.
De esta forma, la formación de los magistrados que ejercen en estos juzgados se reforzará, puesto que el acceso a ello pasará de la obligación de hacer un cursillo online “de pocas horas”, según explican fuentes judiciales, a tener que pasar por un examen selectivo para el que deben prepararse los jueces “que garantice la adquisición de conocimientos multidisciplinares para el abordaje de la compleja temática y la realidad social en la que se encuadra la violencia contra la mujer en sus distintas formas”, explica la proposición.
El Consejo General del Poder Judicial deberá diseñar las pruebas, tal y como hace con el resto de materias, a las que podrán presentarse los magistrados interesados una vez que aprueben la oposición y tras dos años de ejercicio.
“Esta iniciativa responde a una clara necesidad manifestada durante el proceso de elaboración del Pacto de Estado contra la Violencia de Género. Estamos viviendo demasiados casos en los que el sistema judicial victimiza a las mujeres, no las cree y las cuestiona. Es urgente que los operadores jurídicos incorporen la perspectiva de género y los juzgados sean fuente de protección para las mujeres y no un infierno, como muchas nos manifiestan”, ha explicado la diputada socialista Carmen Rocío Cuello Perez después de recordar a Laura Luelmo, la profesora de 26 años asesinada en El Campillo (Huelva).
El caso ha marcado el debate sobre esta propuesta y prácticamente todos los grupos se han referido a ello. En este sentido, la diputada de Ciudadanos Patricia Reyes ha recordado “el espectáculo” de la sesión plenaria de este miércoles, en la que el asesinato de la joven se utilizó como arma política. “Primero Casado utilizando la prisión permanente revisable para atacar al PSOE y planteándola como si fuera la solución mágica a todo”, ha esgrimido Reyes antes de criticar también a Unidos Podemos y su portavoz Ione Belarra, que calificó el debate de “absolutamente lamentable”: “Debo decir que lamentablemente continuó con ese espectáculo infame porque poco menos que responsabilizó al PP de los asesinatos de las mujeres en nuestro país, utilizando eslóganes que simplifican esta terrible realidad”.
Varias de las intervenciones han seguido la línea de calificar la iniciativa de reforma del Poder Judicial de necesaria, pero también de insuficiente. Así, Unidos Podemos, y en palabras de la diputada de En Marea Ángela Rodríguez, ha acusado a PP y PSOE de no reconocer que este tipo de casos son también violencia machista, puesto que ambos grupos han rechazado las enmiendas del grupo confederal de incluir en el texto las violencias que se producen fuera de la pareja o expareja. Según la autopsia realizada a Laura Luelmo y en contra de lo que declaró el acusado de su muerte en un primer momento, la mujer fue agredida sexualmente antes de ser asesinada.
A pesar de que Gobierno y Unidos Podemos se comprometieron en su acuerdo presupuestario a aprobar la ley contra la violencia sexual de la formación morada, Rodríguez ha lamentado que “para las víctimas de Alcàsser, Marta del Castillo, Diana Quer o Laura Luelmo estamos diciendo sobre la ley que no es machismo”.
Además de convertir la violencia de género en una especialidad jurídica, la reforma de la Ley del Poder Judicial aprobada este jueves pretende reforzar la formación de los magistrados en otras vías. Por un lado, se amplía el temario que deben estudiar los aspirantes para las oposiciones y se refuerzan los contenidos durante el año en que los jueces se forman en la Escuela Judicial.