El Gobierno ha aprobado la creación de la Agencia Estatal de Salud Pública (AESAP), más de una década después. En 2011 entró en vigor la ley que contemplaba su puesta en marcha, y este 2022 el proyecto se tramitará por la vía de urgencia en el Parlamento tras recibir el visto bueno del Consejo de Ministros. Se trata de un organismo con autonomía funcional para coordinar futuras emergencias sanitarias, cuya necesidad se hizo evidente al estallar la pandemia de coronavirus.
“La pandemia nos ha dejado muchas lecciones. Entre ellas, tenemos clara la necesidad de contar con este centro y de ampliar y fortalecer las capacidades del sistema de salud de manera coordinada, para estar mejor parados ante esas posibles emergencias de salud pública”, ha explicado la ministra de Sanidad, Carolina Darias en la rueda de prensa tras el Consejo.
La futura institución, que nace con naturaleza de agencia estatal, como reclamaba buena parte de los expertos, es una de las entidades incluidas en el procedimiento iniciado por el Gobierno para descentralizar las sedes de organismos del sector público de nueva creación que aprobó por decreto el pasado mes de marzo, por lo que se desconoce aún quién lo dirigirá y dónde se ubicará. Para decidirlo se realizarán unos trabajos previos, aunque el Gobierno evita hablar de “candidaturas” porque argumenta que no se ha llegado a ese punto, aunque ya se ha hablado de postulaciones informales de Aragón, Asturias, Extremadura, la Comunidad Valenciana y Andalucía. Madrid ha manifestado públicamente que sería “un error estratégico” no situarlo en la Comunidad “donde se realiza la máxima actividad, donde están el Ministerio y donde se puede dar la máxima rentabilidad”, según el consejero Enrique Ruiz Escudero.
Lo que sí se sabe del futuro organismo, cuya creación ya contemplaba la Ley General de Salud Pública de 2011, es que está dotado con 9,4 millones de euros en los presupuestos generales del Estado de este año.
Las funciones del serán de “análisis y estudio, evaluación de políticas e intervenciones públicas, asesoramiento técnico, propuesta de medidas a las autoridades sanitarias y preparación y coordinación de respuesta ante situaciones de emergencia sanitaria”, según argumentó Sanidad cuando anunció su creación en septiembre de 2021. Para ello, dispondrá de personal “de la más alta capacitación científico-técnica en las distintas áreas y materias”.
“Será un centro de excelencia” que aglutinará las competencias hasta ahora dispersas en esta materia, como son la vigilancia en salud pública y evaluaciones de riesgos y análisis de la situación en salud de la población española. “La Agencia Estatal abordará las enfermedades transmisibles y también no transmisibles, como el cáncer”, ha explicado la ministra.
También la preparación del sistema sanitario ante amenazas para la salud pública, principalmente de carácter epidemiológico, y la coordinación de las respuestas“, además del seguimiento y la evaluación de la Estrategia de Salud Pública.
El gran cometido de la Agencia será la coordinación tanto dentro de España, entre las comunidades autónomas que tienen las competencias sanidad –uno de los principales obstáculos durante estos años de pandemia para gestionar decisiones e implementar campañas– y también la coordinación con los diferentes centros internacionales de Salud Pública.