Madrid, 21 ago (EFE).- Vencer prejuicios en torno a las personas LGTBI en las aulas, desterrar la violencia y crecer sin miedo a hacerse visibles es el objetivo del último proyecto del escritor y dramaturgo Nando López, una obra dirigida a los docentes y la primera de una gran editorial educativa española sobre diversidad.
El finalista al premio Nadal en 2010, reconocido tanto por sus obras para adultos como juveniles, estrena el próximo 9 de septiembre una versión de “Doña Rosita la soltera” de Lorca en Washington y en septiembre comienza el rodaje de la serie televisiva “La Edad de la Ira” (AtresPlayer), basada en la obra homónima de López, una historia dura que plantea la LGTBfobia tanto en el entorno familiar como escolar y que se ha convertido en referente para el profesorado.
El dramaturgo, que hace siete años abandonó la docencia para dedicarse en exclusiva a la escritura, explica en una entrevista con EFE que su nuevo proyecto llevará por título “Educar en la diversidad. La visibilidad LGTBIQ+ en nuestras aulas” (Santillana).
Nace de la voluntad de que “nadie crezca desde el miedo ni tampoco silenciándose”. “Las personas de nuestra generación, fui adolescente en los 90, no tuvimos este tipo de educación y materiales y nos robaron una parte de nuestra vida porque no la vivimos. Con este libro podemos conseguir que nadie se robe ni un solo día de su vida”.
Además de querer provocar una reflexión positiva, ayudar a la convivencia y ofrecer material práctico, López se centra en cómo avanzar hacia aulas seguras, desmontar tópicos y prejuicios y lograr que los jóvenes “crezcan desde el autorreconocimiento, con herramientas para entenderse”.
“Muchas personas LGTBI la primera vez que escuchamos algo sobre nuestra identidad ha sido a través del insulto” en el colegio sin tener ni siquiera aún clara la orientación, en consecuencia desde la educación hay que lograr que “la primera vez que nos definimos seamos nosotros mismos, desde la autoestima y el cariño”.
Entre los docentes -afirma- hay un movimiento “con mucho interés porque son conscientes del daño que causa el silencio. Las cifras de autolesiones e intentos de suicidio entre los adolescentes LGTBI siguen siendo muy altas y eso tiene que ver con que si no encuentras el lugar donde hacer escuchar tu voz -y muchos viven en entornos familiares opresivos- al final viven un daño psicológico y moral que puede tener consecuencias dramáticas”.
Los profesores, continua, están “muy implicados y hay cada vez más visibles; yo siempre he sido un docente visible y eso ayuda a los alumnos y a las familias, que al final te consideran un vehículo de información”.
“Cuando te sientes en los márgenes, en la exclusión, una de las cosas que podemos ofrecer es la visibilidad”, subraya el dramaturgo, que ha estrenado en países como Chile, Venezuela, EEUU, México, Costa Rica y Panamá.
Aboga asimismo por que la diversidad LGTBi no sea un “mero contenido transversal y se deje al libre albedrío del docente sino que debe ser un contenido central, que esté siempre presente, y que haya un trabajo común desde todo el centro, es decir, que su política sea de tolerancia cero con cualquier agresión homófoba, tránsfoba o bífoba”.
Añade al respecto que en los últimos tiempos se ha caído “en cierta complacencia y hemos creído que estaba todo superado, pero, por desgracia, sabemos que eso no es así e incluso estamos viviendo un repunte”.
“Educar en la diversidad. La visibilidad LGTBiQ+ en nuestras aulas”, que verá la luz en el año 2022, está contado desde “un lado muy vivencial”, ya que López aúna su experiencia como alumno y como profesor.
Marina Segura Ramos