Algo insólito, sacerdotes católicos deseando que un ser humano muera “cuanto antes” y que ese ser humano sea, además, el Papa. Los participantes en un debate a través de YouTube acogen con sonrisas la afirmación de uno de sus miembros, el sacerdote Gabriel Calvo Zarraute: “Rezo mucho para que el Papa Francisco pueda ir al cielo cuanto antes”.
Este deseo de que el pontífice Jorge Mario Bergoglio muera es secundado por el sacerdote estadounidense Charles Murr, con un “yo también me sumo a las oraciones”. El moderador del encuentro, el también cura Francisco J. Delgado, se adhiere a ese deseo: “Pues a ver si rezamos más fuerte”. El resto de los sacerdotes presentes (Rodrigo Menéndez Pinar, Juan Manuel Góngora y Roylán Recio) sonríen. “Somos muchos con esa intención”, añade Calvo Zarraute.
La conversación, tal y como recoge Toledodiario.es, se produjo el pasado 22 de febrero y el vídeo en YouTube acumula más cerca de 44.000 visualizaciones. El canal en el que se difunde, titulado ‘La Sacristía de la Vendée’, cuenta con más de 67.000 seguidores.
Tanto Calvo Zarraute como Delgado pertenecen a la archidiócesis de Toledo. En una nota remitida a los medios en torno a las 23:00 horas, esa archidiócesis ha mostrado su “profundo rechazo” por esas manifestaciones. Afirma haber comunicado a los sacerdotes “la necesidad de pedir perdón por tales declaraciones que lesionan la comunión de la Iglesia y escandalizan al Pueblo de Dios”, y deja abierta la puerta a “otras medidas de corrección”, aludiendo así a posibles acciones disciplinarias.
En un hilo de la red social X, los participantes en esa tertulia no han pedido perdón, califican de “desliz” el suceso y admiten el “mal gusto” de las opiniones vertidas: “Sentimos pesar por el desafortunado comentario, dicho en tono de humor, sobre 'rezar por que el Papa se vaya al Cielo cuanto antes'. Es un comentario de mal gusto y, aunque no expresa deseos de la muerte del Papa, como algunos medios maliciosamente han difundido, comprendemos que se pueda entender de esa forma”.
No es la primera vez que sectores del clero católico alineados con posiciones de extrema derecha arremeten contra el Papa Francisco. En noviembre pasado, el cardenal Gerhard Müller llegó a llamarlo “hereje” por permitir que las personas trans sean bautizadas. Otras medidas de Bergoglio, como aceptar que las uniones homosexuales reciban la bendición de la Iglesia, le están granjeando una fuerte oposición entre las filas más reaccionarias del catolicismo.