La investigación abierta contra el primer militar en activo que firmó el manifiesto antifranquista sigue adelante. El Ejército de Tierra ha abierto un expediente disciplinario a Marco Antonio Santos por cometer presuntas faltas graves. Este cabo suscribió el comunicado que rechazó la declaración que ensalzó al dictador firmada por varios centenares de oficiales.
En el expediente disciplinario emitido el pasado 7 de septiembre, al que ha accedido esta redacción, informan de que el general jefe de la fuerza logística operativa acordó esta investigación por violar el artículo séptimo del Régimen Disciplinario de la Fuerzas Armadas, que consiste en “emitir públicamente expresiones contrarias” hacia la Constitución, corona y demás órganos del Estado.
Defensa ya anunció que el militar se enfrentaba a un posible expediente por serle aplicable dicho régimen de conducta, que recoge como falta grave “infringir reiteradamente los deberes de neutralidad política”. La notificación señala que es presunto autor de faltas graves por “hacer peticiones, reclamaciones, quejas o manifestaciones contrarias a la disciplina, así como formularlas con carácter colectivo”.
El régimen disciplinario de las Fuerzas Armadas recoge como sanciones por faltas grave una multa económica de ocho a quince días, arresto de quince a treinta días, la pérdida de destino y la baja en el Centro Docente Militar de Formación. Este periódico se ha dirigido al Ministerio de Defensa para preguntar sobre los motivos detrás de la apertura del expediente del cabo, y por el momento, no ha recibido respuesta alguna.
“Realizar actos irrespetuosos”
En este escrito, también señalan que está siendo expedientado por presuntamente “realizar actos irrespetuosos o adoptar actitud de menosprecio” hacia el Estado y sus instituciones al firmar el manifiesto. De acuerdo con la notificación, Santos deberá declarar ante el instructor militar cuando sea citado, para lo cual le dan 48 horas para prepararse y acudir ante un abogado o un cargo militar de su confianza para que le asesore ante un tribunal militar.
En total, cuenta con un año de plazo para que se tramite su expediente, y aunque puede recusarlo, no tiene opción a recurso. Fuentes de Defensa ya confirmaron al eldiario.es la decisión de investigar al cabo porque “un militar en activo no puede hacer ninguna declaración política”.
Como respuesta a la polémica Declaración de respeto y desagravio al general Francisco Franco Bahamonde suscrita por 181 oficiales, en el que se hacía una férrea defensa del rol del dictador como figura histórica y militar, se puso en marcha otro manifiesto contrario apoyado por una veintena de profesionales castrenses, entre ellos Marco Antonio Santos. El cabo acompañó a su firma una pequeña justificación en la que afirmaba que “los que apoyan el escrito a favor del dictador genocida son los que han hecho de las Fuerzas Armadas su jardín particular desde el 36”. Posteriormente, tres militares en activo se unieron también al manifiesto.
“El general Franco no merece respeto ni desagravio alguno, sino nuestra repulsa más absoluta por haber encabezado un golpe de estado sangriento y genocida contra la legal y legítima II República Española, la feroz guerra civil posterior, y una dictadura opresiva e inclemente durante casi cuarenta años”, apuntaba el manifiesto. Entre los apoyos recabados se encuentra el del exJEMAD, diputado de Podemos y general de Aire Julio Rodríguez.
Santos también concedió una entrevista a esta redacción tras suscribir el documento En ella, preguntado sobre el franquismo en las Fuerza Armadas aseguró que “está bastante generalizado, sobre todo entre los altos cargos”. “Aprovechan para reprimir a los demás, a los que no pensamos como ellos, a los que nos llaman rojos de mierda. A mí me lo han llamado muchas veces”, aseguró.