Internet y los amigos y amigas son las fuentes de las que más jóvenes españoles consideran que han recibido información adecuada sobre sexualidad. Es así para el 47,8% y el 45,5%, respectivamente, de los chicos y chicas entre 16 y 25 años que han participado en la Encuesta Sobre Salud Sexual y Anticoncepción 2019. Y es, en opinión de sus responsables, la Fundación Española de Contracepción (FEC) y la Sociedad Española de Contracepción (SEC), la conclusión “más preocupante” de todas las del documento y en lo que “más se debería incidir” institucionalmente. Ha sido presentado este viernes en Madrid por el Día Internacional en Defensa de los Derechos Sexuales y Reproductivos, que se celebra este sábado.
Solo el 28% contestan “profesores y profesoras” a la pregunta sobre su fuente de información principal –era de respuesta múltiple–. Le sigue “la madre”, para el 23% (el padre lo es para el 12,4%). El 12,1% dice “no haber recibido”. Explicaba esta carencia la presidenta de la SEC, Paloma Lobo: “En las entrevistas con ellos nos damos cuenta de que les han dado alguna charla en los centros escolares en algún momento, con profesionales de centros de salud, de planificación familiar... Pero no es suficiente”. Es “muy biologicista” y “se olvida muy pronto”, lamenta.
En este sentido, Lobo ha abogado por incorporar la educación sexual y afectiva en las aulas “desde etapas precoces” y “de forma longitudinal”. Ha denunciado que en muchos centros no se esté llevando a cabo por quejas de familias o por miedo a que hagan según qué prácticas, “cuando ellos van a tener sexo igual: es consustancial a las personas. Y ha de ser con buena información”. Así se contempla, ha recordado, en la Ley de Salud Sexual y Reproductiva y de Interrupción Voluntaria del Embarazo de 2010, “de la que han pasado 9 años y queda mucho por hacer y muchas desigualdades”. En el borrador de Ley de Educación del PSOE de la anterior legislatura estaba incluida la educación sexual “en todas las etapas”, pero sin especificar si se haría como una materia concreta.
La encuesta de la SEC y FEC 2019 tiene una novedad: tienen en cuenta no solo a chicas sino también a chicos (se ha elaborado a través de Sigmados, con 1200 chavales). El desglose permite comprobar que son más los chicos que se han informado sobre sexualidad a través de internet que las chicas, el 50,7% respecto al 44,9%. No se especifica a qué contenidos se refieren, pero José Ramón Serrano, presidente de la FEC y también en la presentación, aclaraba que la pornografía puede tener un papel fundamental “en que luego lo contrastan todo entre amigos, que pueden tener buenas intenciones, pero no buena información”. Lo ven luego en las entrevistas personales: la presión sobre los chicos en las primeras relaciones sexuales se refleja en que creen que deben “ser unos máquinas”, describen.
Los 17 años, la edad de inicio de relaciones sexuales
La encuesta arroja muchos más datos relacionados con el uso de anticonceptivos: el 76,4% de los encuestados afirma que los emplean siempre –el 23,6% los usa pero “no siempre”–. Gana el preservativo, el que emplean el 52% seguido de la píldora (22,8%), a mucha distancia ambos de otros como el diafragma, el parche o el anillo, todos menos este último por debajo del 1%. El 4,2% dicen usar como método el coitus interruptus, y el 6,2% reconoce no usar nunca nada. El arco se completa con que el 22,2% dicen no precisar por no mantener relaciones sexuales. Para Serrano, esto rompe prejuicios y muestra que “la mayoría de adolescentes son conscientes de las medidas que deben tomar. Pero tienen poca información”.
Entre esos otros datos también hay otros más subjetivos, como que la edad media de la primera relación sexual con penetración son los 17,04 años –la encuesta pregunta por orientaciones sexuales pero tiene en cuenta las coitales a la hora de hablar sobre relaciones sexuales “completas”–. También habla del grado de satisfacción en esa primera vez: el 30,1% de las chicas recuerda que fue “muy insatisfactoria”, percepción que se reduce a la mitad en los chicos, el 15%. Serrano recuerda que eso “también se mejora con educación sexual”, incide. Lobo lo relaciona también con la educación afectiva, ya que “debe ser una parte integral en la educación sexual: que elimine roles relacionados con la violencia, machistas.. que enseñe a respetar en la igualdad y la empatía, y eso se puede hacer desde etapas muy tempranas”.
La presentación de la encuesta de la SEC y la FEC ha incluido también la 'Declaración de Madrid', manifiesto de la Sociedad Europea de Contracepción y Salud Reproductiva, que pide también “más esfuerzo en medidas preventivas y tratamiento” de las infecciones de transmisión sexual en todo el continente, y “una educación integral, adecuada a la edad, para que los jóvenes puedan garantizar su salud y bienestar como adultos”.