Los cinco militares en la reserva que firmaron el manifiesto que exalta a Franco tendrán que declarar ante el instructor de la información reservada abierta por el Ministerio de Defensa. Según ha comunicado este miércoles el departamento de Margarita Robles, ya han designado a una persona para que coordine la investigación, el responsable será el Teniente General Miguel Ángel Villarroya.
El instructor llamará a declarar a estos cinco oficiales castrenses que continúan vinculados a Defensa “para ver si se ratifican o no en el contenido del escrito, tras lo cual se elevará a la ministra” la propuesta de resolución oportuna.
Además, informan de que están estudiando si entre los firmantes hay más personas vinculadas a Defensa, teniendo en cuenta que los promotores de este manifiesto aseguran que han pasado de las 181 firmas iniciales a más de 600. “Para ello se está realizando un análisis pormenorizado y actualizado de la lista de firmantes”, aseguran desde el Ministerio.
Defensa podría actuar contra ellos, ya que el régimen de las Fuerzas Armadas recoge como faltas graves y muy graves la manifestación de “expresiones contrarias” hacia la Constitución, la Corona y demás instituciones del Estado, así como “infringir reiteradamente los deberes de neutralidad política”.
Esta normativa recoge sanciones como una multa económica de ocho a quince días, un arresto de quince a treinta días y la resolución del compromiso, es decir, ser expulsados de las Fuerzas Armadas. El manifiesto titulado Declaración de respeto y desagravio al general Francisco Franco Bahamonde se hizo público con el apoyo de 181 militares, la mayor parte de los que firmaron estaban retirados.
En este escrito denunciaban la “campaña infame” que está llevando a cabo “la izquierda política” para desprestigiar al dictador a través de la “perversa pretensión” de exhumar sus restos del Valle de los Caídos. Todos ellos pidieron respeto por la “figura militar del General Franco” que según apuntan, ha “sido vilipendiada hasta extremos inconcebibles” con el objetivo “de borrar medio siglo de nuestra historia” a través del “empeño visceral de revancha” del Gobierno del Partido Socialista que lidera Pedro Sánchez.
Por su parte, este martes un grupo de profesionales vinculados a las Fuerzas Armadas contestaron a estos militares manifestando su “rechazo total” a ese comunicado e incidieron en que los investigados por Defensa no tienen “derecho alguno a presionar como colectivo al Estado democrático”.