De Laurence a Martinho: así se eligen los nombres de las borrascas que azotan España

Klaus y Xynthia tal vez sean nombres que ya no nos suenen a nada. Pero son los nombres de dos de aquellas grandes borrascas que, en 2009 y 2010, provocaron destrozos y víctimas mortales en España y otros países europeos. Fueron episodios “bautizados” por la Universidad de Berlín, entidad que lo hizo desde 1954 hasta 2017.

Desde entonces y por medio de un acuerdo entre los servicios meteorológicos de España, Francia, Portugal, Bélgica y Luxemburgo, los nombres de las grandes borrascas lo deciden, respectivamente, AEMET, Méteo-France, IPMA, RMI y MeteoLux. Pero no es la única novedad respecto a lo que hacía, hasta ahora, la Universidad de Berlín. Aunque el fin sea el mismo.

Hasta ahora, se “bautizaban” todo tipo de borrascas o, mejor dicho, se les ponía nombre independientemente de su gravedad o intensidad. Sin embargo y a raíz del acuerdo entre las entidades mencionadas, ahora en Europa solo se pone nombre a las borrascas que potencialmente puedan producir un gran impacto en bienes y personas.

Facilitar la prevención

La intención de este acuerdo es provocar la mejor cooperación posible entre los Servicios Meteorológicos e Hidrológicos Nacionales de Europa para, lógicamente, tratar de reducir el posible impacto del mal tiempo sobre los bienes materiales y, sobre todo, sobre las personas de las poblaciones que sufren las borrascas.

Ponerle un nombre, aseguran los expertos en meteorología, facilita la prevención. Cuando a toda una población le repiten el nombre de una borrasca que está por llegar, es más fácil prevenir y tomar las medidas pertinentes, tanto a nivel de los propios ciudadanos como a nivel de instituciones, entidades y centros escolares, por ejemplo. De ahí que se intente que el nombre de cada borrasca llegue al mayor número de medios de comunicación, que pueden hacer de altavoz de aquellos técnicos que más autoridad tienen a la hora de hablar del tiempo.

Los próximos nombres

Los servicios meteorológicos de España, Francia, Portugal Bélgica y Luxemburgo (Suroeste) no actúan por libre respecto a sus vecinos europeos, sino que se coordinan con los otros grupos zonales, es decir: con el grupo del Oeste (Reino Unido, Irlanda y Países Bajos), Norte (Noruega, Suecia y Dinamarca), Central (Alemania, Austria, Suiza, Polonia, República Checa, Eslovaquia y Hungría), Mediterráneo central (Italia, Eslovenia, Croacia, Macedonia del norte, Montenegro y Malta) y Mediterráneo oriental (Grecia, Chipre e Israel).

La actual borrasca, Laurence, parece que tiene las horas contadas porque está a punto de ser “destituida” por Martinho, que podría llegar el jueves. Los nombres de las siguientes borrascas ya están decididos y, cuando lleguen nuevos y fuertes episodios de lluvia, viento, frío o nieve, estos serán sus nombres: Nuria, Olivier, Pauline, Rudiger, Salma, Timothee, Vanda y Wolfgang.