En enero pasado, el Gobierno tuvo que paralizar el proceso de autorización para la planta transformadora de uranio proyectada por la empresa Berkeley en su mina de Retortillo (Salamanca). Precisa un informe de Seguridad Nuclear. A pesar de esta dilación –que puede llegar a dos años–, la minera ha seguido operando: cientos de encinas han sido taladas en este tiempo para preparar el terreno. Cada punto marrón al lado de la balsa excavada por Berkeley que aparece en el vuelo de dron del vídeo –tomado por Salamanca Antinuclear– es un árbol arrancado cuyo hueco se ha aplanado. La toma es de 5 de abril pasado.
Tanto la balsa como la tala de encinas han supuesto sendas investigaciones por parte de las fiscalías provincial de Salamanca y de Medio Ambiente. La Junta de Castilla y León ha suspendido, de momento, el cambio de uso del suelo implicado en el proyecto.