Cuenta Juan José Calderón, psicólogo que trabaja en la asociación malagueña Mujer emancipada, que cuando acude a los institutos a dar talleres sobre igualdad, lo más frecuente es que, entre los adolescentes, se encuentre con actitudes muy permisivas con la prostitución. “Para muchos de ellos lo normal es ir con prostitutas el fin de semana. Y si a alguno se le ocurriera decir que no lo hace, toda la clase se reiría de él”, señala Calderón. Esta actitud de las nuevas generaciones con la explotación sexual se refleja también en el estudio que ha presentado hoy el Ayuntamiento de Madrid y que indica que el 60,4 % de los jóvenes madrileños ve en la prostitución una forma de ejercer la libertad sexual, frente a un 39% que lo considera algo “profundamente repulsivo”. En el informe, titulado Actitudes de los estudiantes madrileños ante la prostitución han sido entrevistados 1.120 jóvenes (62% mujeres y 38% hombres), estudiantes de Bachillerato, FP grado y postgrado y se ha presentado hoy con motivo de la celebración del Día Internacional contra la Explotación Sexual.
Esta percepción de que las nuevas generaciones no han avanzado en el hecho de valorar que la mayoría de las mujeres prostituidas son víctimas de trata también lo comparte Rocío Nieto, portavoz de la Asociación para la Reinserción de la Mujer Prostituida (Apramp). “Hace cuatro años hicimos en la asociación un estudio de campo al respecto y nos llevamos la gran sorpresa de que si hace décadas la mayoría de los clientes eran mayores de 40, 50 años, ahora hay chicos ya desde los 17 que pagan por tener sexo”, afirma Nieto. Esta experta en ayuda a las víctimas de trata es muy dura con lo poco que se ha avanzado en educación sexual: “Para los más jóvenes, la prostitución es la forma más económica de satisfacer su apetito sexual, de pagar por algo rápido que convierte a la mujer en un objeto de consumo como si fuese pedirse una copa en un bar”. Para Nieto, es imprescindible la educación en los institutos y en las universidades para hacer ver a las nuevas generaciones que “la mujer prostituta está esclavizada, y no hay que aprovecharse de su situación para tener sexo a bajo precio”.
Jóvenes con educación sexual
Sin embargo, el 70% de los entrevistados (hasta Secundaria) sí que ha tenido acceso a la educación sexual, pero en los contenidos no se trata el intercambio sexual por dinero. “Esta visión abstracta de la prostitución entra en colisión con los contenidos de la educación sobre sexualidad (y la igualdad) que no sólo está muy bien implantada en esta generación sino muy bien valorada por la propia población escolar. La educación sobre sexualidad recibida orienta las actitudes y los comportamientos sexuales de las personas entrevistadas, pero deja fuera los temas relacionados con la prostitución”, advierte el estudio.
Desde su experiencia dando talleres en institutos, el malagueño Juan José Calderón cree que el acudir a la prostitución está “muy integrado dentro del sistema tradicional de masculinidad”. “Entre muchos jóvenes está extendida la idea de que cuanto antes tengas una experiencia sexual mejor, y si es una persona que entiende de esto pues genial”, señala Calderón. “No hay mucha diferencia entre la época en que el padre se llevaba al hijo de putas para que se hiciese mayor y ciertas actitudes de ahora”, advierte. Su trabajo pasa por hacer entender a los estudiantes que la mayoría de las mujeres prostituidas son víctimas de trata.
El informe del Ayuntamiento de Madrid también señala que un 81% aboga por legalizar la prostitución frente al 19% que defiende su abolición. Respecto a situaciones que se dan en la capital, como las mujeres que buscan clientes en zonas públicas como la Casa de Campo, el 45,9% de los jóvenes madrileños siente indiferencia y perciben la visibilidad de la prostitución casi como si fuera “parte del paisaje”. Domingo Comas, portavoz de la Fundación Atenea, encargada de elaborar el estudio, afirma que la mayoría de jóvenes que se han encontrado con mujeres prostituidas “prefiere no mirarlas, lo que es una negación de la mirada, pero también del compromiso en la lucha contra la prostitución”.
Además, la mayoría de los encuestados habla “de oídas” sobre el tema basándose en lo que ven por televisión e internet. Su primer contacto con la prostitución además suele ser con los anuncios de prostitución en prensa. Tanto Nieto como Calderón denuncian que estos medios inciden en ofrecer una imagen de una mujer que se prostituye de manera consentida y por placer.
Lucha contra la trata
Con el objetivo de luchar contra la trata y la explotación sexual, la Policía Nacional puso en marcha a principios de año un nuevo Plan Integral para combatir este tipo de delitos. Durante los seis primeros meses de vigencia han sido detenidas 400 personas y 500 víctimas han sido liberadas, según el director general de la Policía, Ignacio Cosidó. Desde el cuerpo recuerdan la importancia de la colaboración ciudadana a la hora de denunciar estos casos y del trabajo realizado por las ONG.
Aunque desde la Policía admiten que el balance de los resultados del Plan habrá que hacerlo a largo plazo, reconocen que “está dando buenos resultados” y ha destacado el aumento del número de llamadas al teléfono habilitado para denuncias de este tipo de casos. Según Cosidó, la población española está “cada vez más concienciada” y que incluso los propios clientes están denunciando casos de explotación cuando comienzan a sospechar.