No, más de 200 expertos no han firmado un manifiesto contra el decreto para la exhumación de Franco
La Fundación Franco difundió a finales de agosto un manifiesto que algunos medios replicaron como firmado por “más de 200 expertos” contra la exhumación de Franco. Entre los firmantes, el historiador Stanley Payne, los políticos Jaime Mayor Oreja, Alberto Ruiz-Gallardón, o Santiago Abascal, el bisnieto del dictador Luis Alfonso de Borbón, el militar Santiago Milans de Bosch, o los filósofos Antonio Escohotado y Fernando Savater. Algunos medios, a partir de un teletipo de la agencia EFE, lo publicaron como si fuese de este agosto, con el decreto Ley del nuevo Gobierno ya en marcha.
Lo cierto es que el manifiesto no es actual. Se impulsó posteriormente a la propuesta de Pedro Sánchez de diciembre, todavía en la oposición, para reformar la Ley de Memoria Histórica de manera parecida a como ahora va a hacerlo desde el gobierno por decreto. Aquella proposición incluía la “prohibición” de que Franco esté en el Valle de los Caídos. Pero el manifiesto no hace referencia, ni para posicionarse a favor ni para posicionarse en contra, a la exhumación, como destacaban algunos titulares.
La modificación también incluía la Comisión de la Verdad cuya creación Sánchez anunció esta semana, a lo que sí hace mención expresa el comunicado. Con ella, decían, “amenaza con penas de cárcel, inhabilitación para la docencia y elevadas multas a quienes mantengan opiniones divergentes a la 'verdad única', la destrucción y quema de las obras o estudios declarados no 'gratos', y la expropiación, destrucción o transformación de una parte del patrimonio histórico-artístico de la etapa más reciente de España”.
En medios y redes se había publicado, además, que el manifiesto surge de la Fundación Francisco Franco. La Fundación se limitó a publicarlo en su web, pero no lo promovió. El manifiesto se hizo público el 14 de marzo, y entonces las agencias como Europa Press no recogían ninguna relación con la Fundación que presiden los herederos del dictador.
Los firmantes acusaban a la ley de Sánchez de ir contra la Constitución y de ser “de tipo soviético”: “Resultaría dramático para la convivencia de los españoles que ochenta años después del final de la Guerra Civil, y de haber transcurrido más de cuarenta tras la extinción del franquismo, se intente anular la libertad de pensamiento de los españoles, y reinstalar en la sociedad los mismos odios que condujeron a aquellos calamitosos acontecimientos”.
Alguno de los suscritos al texto, como Félix Ovejero, se ha pronunciado acerca de la nueva difusión del mismo. El filósofo recordó en su Facebook que data del pasado marzo “pero que a lo que se ve conviene pasear ahora” y defiende que es “antifranquista”: “Estamos en contra de la idea de una verdad establecida desde el poder político y de la ocurrencia de penalizar a quienes discrepen de la verdad oficial”.