La presidenta de la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales (FELGTB), Uge Sangil, ha reivindicado este viernes “el derecho a ser familia, a vivir con nuestros hijas e hijos en un entorno de respeto a la diversidad”.
Lo ha señalado en declaraciones a Efe antes de inaugurar las IX Jornadas de Familias LGTBI bajo el lema, “Memoria y derechos: Ni un paso atrás en diversidad”, que se desarrollarán durante el fin de semana en la Universidad de Salamanca.
Sangil ha hecho un llamamiento a la sociedad para compartir “los nuevos modelos de familia y el respeto a la diversidad”.
Entre las reivindicaciones de las familias LGTBI ha incluido que se reconozcan sus hijos, que “no sufran acoso escolar en los centros educativos” por ser hijos de personas LGTB y “la reproducción asistida de las mujeres lesbianas solas y bisexuales que sigue sin estar reconocida a nivel estatal”.
Asimismo, ha pedido que dos mamás puedan “registrar a su hijo en el hospital igual que una pareja heterosexual y que no se requiera el certificado de reproducción asistida”.
Por su parte, el rector de la USAL, Ricardo Rivero, ha agradecido que las sesiones de trabajo se celebren en la Universidad de Salamanca porque “los derechos de las personas siempre han sido parte de la seña de identidad” del Estudio salmantino.
Rivero se ha referido a la “actualización” de los derechos humanos y del respeto de las personas y a que quién “no piense así, pues no respeta los derechos humanos. Éste es el discurso contemporáneo de los derechos humanos”.
La profesora de Derecho Internacional Privado de la USAL Antonia Durán, que ha intervenido en las sesiones de trabajo, ha criticado que no se haya dado “ningún paso significativo” desde la aprobación de la ley del matrimonio entre personas del mismo sexo en 2005.
Ha lamentado que tuvieran que pasar dos años para que se regulara la filiación de los niños que nacieran en el seno de esas parejas y que sólo se hiciera para las de las mujeres que estaban casadas entre sí.
Pero “esto no sucede para los hombres”, ha añadido la profesora, dado que sí que “hay una posibilidad de adoptar el hijo de la pareja si la tiene, pero para tener un hijo de forma natural aportando ellos el semen la única manera que habría es recurrir a una mujer que les ayude, que sería la gestación por sustitución”.
En este sentido, ha criticado que el legislador español “por motivos de distintas sensibilidades no se ha decidido a dar el paso”.