El Franco rebelde saca de quicio al Franco fascista. Porque mientras uno diseña un golpe de Estado, el otro es diputado de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC). No es un ‘fake’, ni va a pasar el próximo 21D. Pero un hermano del dictador español se sumó a las listas electorales del partido independentista catalán en 1931. Era Ramón Franco, conocido como el héroe del Plus Ultra tras batir un record mundial de aviación.
El Franco díscolo era masón, dicen, y republicano. Ilusionado con el naciente régimen, decide dar rienda suelta a su ambición política y comparte cartel con nacionalistas como Josep Tarradellas y Ventura Gasol. O Francesc Macià, que había proclamado la República Catalana.
En la cita con las urnas acaba como diputado a Cortes Constituyentes por ERC. La soltura izquierdista de Ramón encoleriza al Franco conspirador y golpista. Tanto que muchos achacan la muerte accidental del aeronauta a un sabotaje en el avión que ordenó el propio dictador.
Aunque la vasta biografía de Ramón Franco acumula otros muchos episodios. Como una suerte de promiscuidad que sumada a un puñado de sucesos vitales vuelcan la balanza ideológica: en la guerra civil, el Franco masón y republicano cambia de ‘bando’. Desde la aviación franquista, sus misiones de bombardeo sobre Cataluña matan a quienes años antes lo habían convertido en diputado con sus votos.
Conspirador contra la monarquía y la dictadura
Ramón Franco comienza a fraguar su carrera política en la clandestinidad, conspirando contra la monarquía de Alfonso XIII y la dictadura de Miguel Primo de Rivera. Profesa una línea de claros tintes progresistas que le empuja a la arena parlamentaria con la proclamación de la Segunda República.
Ahí aparece, en el ‘Histórico de Diputados’ del Congreso, Ramón Franco Bahamonde. Con los siguientes datos: elegido en las elecciones del 28 de junio del 31 por la circunscripción de Barcelona. Votos obtenidos: 91.731. ‘Fracción política: Izquierda Republicana de Cataluña’.
En la cita también se presenta en Sevilla, por el Partido Republicano Revolucionario junto al denominado Padre de la Patria Andaluza, Blas Infante. Participa incluso en los sucesos del ‘Complot de Tablada’, un episodio revolucionario con epicentro en la capital andaluza que queda como una confusa intentona.
Pero de sujeto rebelde, ¿cómo pasa al lado oscuro? Dos claves inclinan el discurso. Uno, el asesinato de su amigo el también aviador Julio Ruiz de Alda a manos de revolucionarios incontrolados en la matanza de la Cárcel Modelo de Madrid. La propia Fundación Nacional Francisco Franco rinde homenaje al también fundador de Falange Española: “se dice que su vil asesinato fue lo que impulsó a Ramón Franco, que se había destacado como activista republicano, a unirse a los militares sublevados, dirigidos por su hermano Francisco Franco”.
Y dos, la elección de su hermano como Jefe del Estado sublevado en octubre del 36. Porque Ramón sabe del espíritu de Francisco. Una frase suya define el odio de su hermano contra la República y la democracia: “Paco por ambición sería capaz de asesinar a nuestra madre y por presunción mataría a nuestro padre”. Señala así el camino hacia el terror que emprende de la codicia golpista.
Existe un tercer elemento. El golpe de Estado fascista sorprende a Ramón Franco en Washington (EEUU), donde ha sido designado agregado aéreo en la embajada española. Tiene que regresar para defender el Gobierno legítimo, piensa. Pero está enemistado con Manuel Azaña y consulta con el dirigente la decisión. El presidente niega su incorporación a filas.
¿Mató Franco a su hermano Ramón?
El panorama nubla el juicio del Franco rebelde, que zanja su pase a las filas sublevadas. Dice el Ejército del Aire en la biografía del militar: “Aparentemente sus tendencias izquierdistas se habían disipado, pues se presentó en Burgos a los Nacionales (sic)”.
Francisco Franco asciende a su hermano a teniente coronel y jefe de la base aérea de Baleares. El general no consulta a nadie, avivando el rencor acumulado en las filas fascistas contra el republicano Ramón Franco. El aislamiento y los bombardeos contra objetivos civiles de Cataluña, dicen, sumen al aviador en una profunda depresión.
¿Y si el hermano del jefe golpista deserta y regresa a luchar por la República? El escándalo sería mayúsculo, a nivel internacional. No son pocos los expertos que señalan esta posibilidad como causa de la muerte en accidente aéreo el 28 de octubre de 1938.
Como el mítico aviador franquista Rodolfo Bay. “Para mí está muy claro que fue un sabotaje [la muerte de Ramón Franco]. Muy bien preparado pero un sabotaje, sin duda”, declara en una entrevista publicada en la revista Mach.82, del Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (SEPLA).
“Es difícil demostrarlo al cabo de los años”, continua Rudy Bay, que volaba en otro aparato al lado del avión que se precipita al mar sin aparente causa justificada. “Pero no me cabe duda de que el avión estaba preparado para que ocurriera lo que ocurrió”.
Otras voces apuntan a este boicot. Caso del teniente coronel de Aviación José Ignacio Domínguez que describe la enemistad “pública y notoria” en un artículo que titula La muerte de Ramón Franco auspiciada por su hermano Francisco, publicado por el Foro Milicia y Democracia. O Pilar Franco, hermana de ambos, en una añeja entrevista televisiva… donde apunta a “un sabotaje provocado por la masonería internacional”.
El avión pilotado por Ramón Franco iba cargado con mil kilos de bombas. El destino era soltarlas sobre Barcelona o Valencia. Cuando inicia la misión, el CANT Z 506 Airone de fabricación italiana pierde toda velocidad y cae en picado. Muere toda la tripulación. Entre ellos el hermano republicano del dictador Franco que fue diputado por ERC y acabó bombardeando al pueblo catalán.