La Fundación Avina ha editado una guía de buenas prácticas que recoge algunas pautas para dar continuidad a los sistemas de reciclaje de los residuos domésticos en condiciones de higiene y seguridad, durante la alarma sanitaria generada por la COVID-19.
El documento, elaborado por el programa de reciclaje inclusivo de esta organización, reúne una serie de recomendaciones básicas dirigidas “no sólo a los equipos que trabajan en la recolección de materiales en la calle”, sino también “a quienes operan las plantas de clasificación de materiales”.
Consejos generales de higiene personal
El coronavirus está envuelto por una cobertura de grasa poco resistente a la acción del jabón, por lo que “la higiene de manos de manera frecuente” es la medida principal de prevención y control de la infección, según el texto.
“Es fundamental lavarse las manos” al menos durante 30 segundos, “antes y después de manipular residuos, tocar superficies comunes de uso frecuente y tras utilizar instalaciones sanitarias”, precisa.
Superficies limpias contra el coronavirus
En condiciones climáticas normales, la durabilidad máxima del patógeno varía según el tipo de material sobre el que se pose: entre las 4 horas que perdura sobre el cobre o las 24 horas sobre el cartón y papel hasta las 96 que resiste sobre el vidrio o la madera.
Por ello, la guía indica que es “de suma importancia” higienizar las superficies presentes en entornos de uso diario.
La Fundación Avina recomienda el uso de “una solución compuesta por 1 parte de lejía disuelta en 50 partes de agua”, o de un compuesto de alcohol al 70 % -3 partes de agua por 7 de alcohol- para limpiar dispositivos electrónicos como teléfonos móviles y ordenadores.
Manejo de residuos en hogares con personas enfermas
Si en el hogar hay alguna persona contagiada o con sospechas de estarlo, sus moradores “no deben participar en la separación de residuos”, sino depositar “la totalidad de los materiales” en los contenedores de residuos “no reciclables”.
Además, aconseja asegurar todos los residuos generados en el domicilio del infectado mediante el sistema de “triple bolsa”, y esperar al menos 72 horas antes de sacarla a la calle o depositarla en el contenedor correspondiente.
Elementos de protección personal para cuadrillas de reciclaje
Para que los trabajadores de los sistemas de reciclaje desarrollen su trabajo en condiciones higiénicas y seguras en la vía pública, la fundación indica que “todos los integrantes de las cuadrillas deben tener acceso a utensilios de higiene personal”.
Estos elementos de protección, como mascarillas y guantes, son una “importante barrera física” entre la piel del trabajador y cualquier superficie de contacto, por lo que deben ser “preferiblemente desechables” y “resistentes a la penetración de microorganismos, a las roturas y el desgaste”.
Consejos de operación en plantas de clasificación de residuos
La plantilla encargada de la operación de las plantas de clasificación mientras esté vigente la alerta por la pandemia de COVID-19 deberá ser la “mínima imprescindible para cubrir las operaciones necesarias” sin que produzca una acumulación de materiales.
Así, después de la recepción de los materiales reciclables provenientes del exterior del complejo, la guía recomienda “mantenerlos en cuarentena durante 72 horas en un lugar limpio y seguro” antes de proceder a manipularlos.
Una vez procesados los residuos, se recomienda almacenarlos durante al menos otras 72 horas más antes de su posterior comercialización.
Para la elaboración de esta guía, la Fundación Avina, una institución creada en 1994 para promover el desarrollo sostenible en Iberoamérica, ha recurrido a las recomendaciones emitidas por la Organización Mundial de la Salud y otras entidades sanitarias y ambientales.