La portada de mañana
Acceder
Sánchez rearma la mayoría de Gobierno el día que Feijóo pide una moción de censura
Miguel esprinta para reabrir su inmobiliaria en Catarroja, Nacho cierra su panadería
Opinión - Cada día un Vietnam. Por Esther Palomera

“Tengo la horrorosa sospecha de que el rector Carrillo ha pactado con Podemos”

Cree Rafael Calduch (Pedralba, Valencia, 1952) que estas elecciones a rector de la Universidad Complutense de Madrid están más abiertas que nunca. También más politizadas. No oculta que él es miembro de UPyD, pero asegura que dejará de serlo si gana. Este catedrático de Relaciones Institucionales denuncia que el actual rector, José Carrillo, manda de manera sectaria, y promete descentralización, dar voz a las Facultades y buscar financiación para bajar las tasas. En ciertos temas más comprometidos como el 3+2 se muestra ambiguo con su opinión personal. La primera ronda de las elecciones es el 5 de mayo.

¿Por qué elegirle a usted como rector?

Porque soy el único candidato sin hipotecas históricas en el sentido de haber tenido cargos ya sea en el Ministerio de Educación o en el Rectorado de esta universidad y no haber cumplido los compromisos que ahora se lanzan. Y segundo porque soy el único que propone un nuevo modelo de organización, del poder y las competencias, que están centralizadas en el rectorado, en favor de los centros de la Complutense, sean facultades, institutos, etc. No es creíble que quien desde el Rectorado contribuyó a crear la deuda que tiene esta universidad ahora se postule como candidato diciendo que lo va a resolver. Es el caso de Andradas [otro de los candidatos]. Otro ejemplo es cómo va a sentirse la gente de esta comunidad si cuando llega el momento de aplicar la ley uno observa que como profesor de a pie te aplican la norma, que no me parece mal, pero que el profesor del despacho de al lado, por llamarse Juan Carlos Monedero, no se la apliquen.

Habla del caso Monedero. ¿Cómo debería haberse resuelto? El rector, José Carrillo, afirma que los plazos con su expediente son los habituales.caso Monedero

Eso lo dice Carrillo. Pero yo he sido juez instructor en esta universidad y sé lo que puede durar un proceso por razón de lo que en términos de derecho penal se llama “alarma social”. Aquí se genera alarma en la comunidad universitaria. Y si se trata de casos en los que el procedimiento de prueba es muy limitado. Aquí hay que pedir el documento de solicitud de compatibilidad y los contratos que demuestren si se ajusta o no a la ley de incompatibilidades. No tiene que desfilar un montón de testigos, es solo una prueba documental. Algún periódico ya ha publicado el modelo de contrato con un órgano de esta universidad por un monto de 95.000 euros. ¿Cómo puede conseguirlo esto un periódico y tardar meses y meses el juez instructor?

¿Cree que Carrillo defiende a Monedero y al sector Podemos porque tiene un pacto?

Tengo una horrorosa sospecha de que sí.

¿Basada en algo más que este proceso?

Basada en la evidencia de que este proceso está durando demasiado y en que depende de los resultados de las elecciones tendrá un resultado u otro. Esperemos. Por eso es una sospecha, no una evidencia fehaciente. Pero esa sospecha no la tengo yo, la tienen centenares si no miles de profesores de la universidad a los que se controla que cumplan la ley de incompatibilidades. Y repito que no me quejo de ello.

¿Están demasiado politizadas estas elecciones?

Es evidente. Pero no sólo en sentido partidista, sino en el de defender los intereses de determinadas minorías de la universidad en perjuicio de el interés general. Lo que se está dilucidando son los intereses de determinados colectivos, estén vinculados al actual equipo rectoral, a otros o a partidos ajenos a la universidad.

¿Cómo analiza el mandato de Carrillo a nivel de gestión?

Ha sido nefasto porque lejos de facilitar o promover la participación en el gobierno de la universidad lo que ha hecho ha sido aplicar un gobierno muy sectario, en el que si estás vinculado a determinados grupos estudiantiles o sindicatos gozas del favor de las decisiones que toma una minoría del gobierno de la universidad o en el que si no eres acorde a estos planteamientos —hablo de académicos, etc.— eres discriminado. Yo no he sido el que ha generado una polémica en los medios respecto a determinados investigadores de Física. Lo mismo con el caso de los cadáveres. Son temas que han saltado porque nadie se preocupó de resolverlos en origen porque nadie consideró que eran de importancia a pesar de que había denuncias internas.

¿Qué otras medidas propone, además de la descentralización?

Lo primero, antes de la descentralización incluso, es que el 3+2 no lo debe decidir el equipo rectoral sino la comunidad universitaria, y el rector hacer lo que esta quiera. Que no sea la decisión impuesta de un rector al resto de la comunidad universitaria, porque de este modelo de titulaciones depende la carga docente de las facultades, las necesidades de profesorado, de personal y servicios, los recursos financieros, etc. Todo está vinculado al modelo de titulaciones que se va a seguir. Si se impone un modelo por el rector el resto de la comunidad va a tener que seguirlo, y si no le gusta a parte va a crear tensiones. Y lo que menos necesita esta universidad son tensiones y conflictos internos porque hay que negociar la deuda con la Comunidad, y si hay división los políticos no te toman en serio y azuzan la división.

¿Y su visión personal de este asunto cuál es? ¿3+2 sí o no?

La diré cuando pase el periodo electoral, ahora estoy como candidato.

Pero a la comunidad complutense le interesará conocerla antes de votar.

A la gente le interesará saber lo que quiere el candidato Calduch, lo que piensa el profesor cuando apague la grabadora se lo diré.

¿Qué más les ofrece a los profesores?

Lo primero es consolidar a los que están en precariedad porque se han aplicado fórmulas como mínimo de dudosa legalidad. A los ayudantes doctores con contratos que se les acaban en cinco años se les está pasando a una figura que es contratado doctor interino. Los contratos de interino se corresponden con plazas de funcionarios vacantes temporalmente que se cubren. Esto significa que el interino, cuando llega el funcionario de oposición, va a la calle sin indemnización. Pero es que los contratados doctores no son funcionarios de carrera. Incluso admitiendo que fueran asimilados a los funcionarios de carrera deberían darse vacantes de contratados de doctores. Si los ayudantes doctores están acreditados, ¿por qué no se convocan las plazas que van a cubrir interinamente? Lo mismo con el profesorado que está acreditado, que ya es funcionario.

Por ejemplo, los titulares de universidad que ya están acreditados como catedráticos. Y que llevan años esperando a que se saque el concurso. Sé que la plaza de reposición limitaba eso. Pero una de las alternativas que sí está en la mano de la universidad era ir año tras año a través de un complemento poniéndole el sueldo que le correspondería como catedrático. Hacerlo paulatinamente para que cuando el gobierno aumentara la tasa de reposición no se produzca de repente un impacto inasumible sobre el presupuesto.

¿Qué proyectos tiene para mejorar la financiación?

Hay que poner en marcha un plan de financiación complementaria, aunque ya existe. La financiación de la universidad tiene tres patas. La aportación de la Comunidad, que este año serán unos 290 millones de euros. Los ingresos por matrículas, 156 millones. Y 46 millones de financiación complementaria por contratos de investigación, patrocinios, alquiler de espacios, etc. Podemos aumentar esto si tomamos iniciativas y no somos meros burócratas gestionando lo que da la Comunidad y lo que se ingresa por matrículas. Esta universidad tiene potencial, capital humano. Hay una serie de clínicas (veterinaria, odontología, etc.), que dan servicio a los ciudadanos. ¿por qué no potenciarlas dándoles las competencias para que ese servicio lo lleven hasta donde lleguen los recursos? Pero unos deciden qué es bueno para el resto. ¿Cómo les vas a decir a esos señores, 'oiga, muévase un poco más, dedique más esfuerzo, dé más servicio a la sociedad, recabe ingresos, pero eso no le va a beneficiar, va a beneficiar al rector de turno'?

¿Hasta dónde se puede llegar con esta financiación complementaria?

Esos 46-47 millones podrían crecer un 50-60% en un mandato. Son 20-25 millones más. Se pueden dar muchas becas de la universidad, estabilizar a mucho profesorado... La primera condición es que se sientan partícipes. La segunda, romper el principio del igualitarismo, porque si pagas lo mismo, dentro de lo que permite la ley, al que simplemente hace el mínimo trabajo exigible que al que le dedica un esfuerzo adicional, obviamente este deja de hacerlo. La lógica de todos por igual porque va a una caja común y yo decido cómo se distribuye perjudica siempre a los más capaces y que tienen más iniciativa y beneficia al que va al rendimiento mínimo, que es lo que ha ocurrido y ocurre en esta universidad.

¿Casi todos los problemas de la universidad se resuelven con financiación?

No. Es una condición necesaria, pero no suficiente. Es muy importante otra parte que a veces se subestima del profesorado o el PAS que es la vocación. Cuando trabajas en lo que realmente te gusta tienes una compensación en lo que llaman bienes intangibles, que muchas veces son decisivos. Por ejemplo la confianza en la economía. El reconocimiento y la valoración de tu dedicación es muy importante, luego no todo se reduce al recurso financiero. Por eso hablaba antes del agravio comparado de la universidad, es muy destructivo porque mina el otro componente fundamental por el que se mantiene el capital humano de la universidad, que es la vocación.

¿Los precios de las tasas son altos?

En esta comunidad son los segundos más altos de España por detrás de Cataluña. ¿Deben seguir siendo altos? En absoluto. ¿Se tiene margen para cambiarlos? Desde el punto de vista de esta universidad solo, no. Y menos si no recabamos financiación complementaria. ¿Se puede llevar a cabo una negociación con la Comunidad? Sí, siempre que el rector tenga el respaldo de la mayoría de la comunidad universitaria. ¿Cómo es posible que comunidades autónomas con una renta per cápita más baja que esta, como Andalucía o Galicia (gobernadas por PSOE y PP) tengan tasas infinitamente más bajas que la nuestra? Porque los dirigentes de esas comunidades han creído que lo que aporta la universidad pública no es gasto sino inversión.