Los hospitales españoles se preparan para dar respuesta a la crisis humanitaria de Ucrania por los ataques rusos. El Gobierno de España ha movilizado a las comunidades para tantear cuántas camas podrían poner a disposición ante una eventual llegada de refugiados enfermos o heridos que precisen de atención sanitaria. La ministra de Sanidad, Carolina Darias, anunció el miércoles que los diferentes territorios habían ofrecido unas 5.000 camas hospitalarias “por si fuese necesario traer a pacientes de Ucrania a nuestro país”. Las ofertas varían en función de la comunidad: desde las 2.000 camas de la Comunitat Valenciana a las 60 de Extremadura.
El Ministerio de Sanidad asegura que el despliegue forma parte de un programa en coordinación con la Unión Europea, que será la encargada de organizar a dónde se deriva a los pacientes, dice una portavoz del Ministerio. “Habrá que ver cada caso. Si tenemos un niño con una cardiopatía congénita se valorará cuál es el recurso más adecuado”, agrega. El Ministerio de Defensa también ha ofrecido a Sanidad un centenar de camas en los hospitales militares de Madrid (Gómez Ulla) y Zaragoza para heridos en el marco del conflicto y ha enviado 20.000 kilos de material sanitario y de protección.
En solo una semana, más de un millón de personas han huido de Ucrania y Europa se prepara para intentar dar respuesta a un éxodo forzado masivo. La cifra, según estima el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), es solo el principio del que ya es el mayor flujo de refugiados de los últimos 75 años. La Agencia de la ONU teme que más de diez millones de personas pueden huir de sus hogares en Ucrania por la invasión rusa, incluyendo las cifras de quienes se ven forzados a desplazarse en el interior del país en su huida de los bombardeos. De momento, las autoridades polacas solo permiten la salida del país de menores, mujeres y hombres mayores de 60 años.
Algunas comunidades han anunciado públicamente cuántas camas tendrían disponibles en caso de necesidad. El Gobierno de Murcia, por ejemplo, ha detallado a la ministra de Sanidad por carta que la región cuenta con 503 camas en planta y 44 en cuidados intensivos que se podrían ofrecer. La Xunta de Galicia pone a disposición, llegado el caso, 432 camas. 319 son para adultos y de ellas, 25 específicas para pacientes oncológicos; las 113 restantes están dirigidas a niños y niñas, con 15 para menores enfermos de cáncer, según los datos aportados por la Consellería de Sanidade.
La Comunitat Valenciana ha comunicado que tiene 2.094 camas disponibles para atender, si resulta, a víctimas de la guerra. 1.900 para adultos y 194 para pacientes pediátricos. 185 están en Alicante, 285 en Castellón y 985 en Valencia. En Castilla-La Mancha se van a poner a disposición del operativo 258 camas en el sistema público de salud de las que 199 son para pacientes en edad adulta, además de 38 UCI, 40 camas quirúrgicas, 95 generales y 26 camas oncológicas. El resto se destinarán a pacientes de Pediatría, con 4 UCI, 4 camas quirúrgicas y diez para neonatos. “Son sistemas de emergencia para la población que tiene la condición de refugiada y que accede al sistema público de salud”, explicó la consejera portavoz, Blanca Fernández. Castilla y León puede contribuir con 110 camas para pacientes adultos y 26 para menores afectados por el conflicto ucraniano.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ofreció el hospital Isabel Zendal, creado para hacer frente a la crisis del coronavirus, para atender a los refugiados que requieran cuidados hospitalarios. El centro ha tenido un máximo de 550 camas operativas en el pico de la tercera ola, pero Ayuso asegura que podría llegar a albergar hasta 700 en 48 horas y 1.000 en una semana. En la misma semana del ofrecimiento, la Consejería de Sanidad ha confirmado que despedirá a 6.000 sanitarios contratados como refuerzo por la emergencia de la COVID-19.
A 130 personas podría atender los hospitales de Asturias, según la cifra aportada por el Gobierno regional a elDiario.es. De estos puestos, 18 son para cuidados intensivos. El Servicio Extremeño de Salud (SES) ofrece 60 camas en hospitales de la región para víctimas de la guerra en Ucrania que lleguen a España con necesidades médicas urgentes y la comunidad foral de Navarra, otras 20. Aragón se ha comprometido con unas 1.000 camas en el caso de necesidad. En Andalucía, el apoyo se haría con 100 camas de hospitalización, además de ocho de UCI, ubicadas en el hospital universitario Clínico San Cecilio y Virgen de las Nieves, según la Consejería de Salud y Familias.
Desde Catalunya no han dado una cifra concreta sobre las camas que ofrecen, pero aseguran que tienen “total disponibilidad según las necesidades”. La Generalitat asegura que, tal y como se ha demostrado durante la pandemia, el número de plazas de UCI se puede aumentar o disminuir dependiendo de las exigencias del momento. Actualmente las camas de UCI ocupadas por COVID son 174, una cifra que dista mucho de las 1.528 que estuvieron disponibles en el pico de la pandemia.
Los archipiélagos de Canarias y Baleares también han puesto a disposición sus centros públicos. El Gobierno canario ofrece 250 camas y el balear entre 50 y 150, según fuentes del Govern.
Elaborado con información de Arturo Puente, Fátima Caballero, Angy Galvín, Francisca Bravo, Alba Camazón, Dácil Jiménez, Adolf Beltrán, Beatriz Muñoz y Santiago Manchado.