La justicia española ratifica que el apellido del militar golpista Juan Yagüe, el Carnicero de Badajoz, siga figurando como topónimo nacional. El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha ratificado la sentencia de un Juzgado de Soria que permitió al pueblo San Leonardo de Yagüe conservar en su nombre el homenaje al general franquista.
Los defensores del actual nombre del municipio, la Fundación Nacional Francisco Franco, la Fundación Yagüe y el ayuntamiento local, siguen ganando el litigio abierto por el abogado especializado en Memoria Histórica Eduardo Ranz. La querella había sido rechazada por el Juzgado de lo Contencioso Administrativo soriano porque el nombre, dice, no exalta la guerra civil o la represión franquista y sí es un “estricto recuerdo privado” que ensalza los méritos del general fascista. Argumentación que las víctimas del franquismo consideran “una vergüenza y una humillación”.
Una decisión que respalda la Sala de lo Contencioso del TSJ al desestimar la apelación contestando con los mismos argumentos: el demandante no puede “considerarse legitimado para la interposición del recurso” por no ser vecino del pueblo afectado, en teoría, por la aplicación de la Ley de Memoria Histórica. Carece así de “legitimación activa”, por lo que el Ayuntamiento de San Leonardo de Yagüe no está obligado a cambiar el topónimo.
Yagüe: “Por supuesto que los matamos”
El militar rebelde Juan Yagüe participó activamente en el golpe de Estado que desembocó en la guerra civil española y la posterior dictadura de Franco, siendo uno de los más encarnizados represores. Como muestra, la respuesta que el propio Yagüe ofrece a un periodista del New York Herald Tribune justo tras la ocupación y matanza golpista de Badajoz.
“Por supuesto que los matamos. ¿Qué esperaba usted? ¿Que iba a llevar 4.000 prisioneros rojos conmigo, teniendo mi columna que avanzar a contrarreloj?”, contestaba Juan Yagüe sobre el avance de la columna de la Muerte desde Andalucía hasta Madrid. “¿O que iba a soltarlos en la retaguardia y dejar que Badajoz fuera roja otra vez?”, justificaba.
Las asociaciones de víctimas del franquismo ya criticaron el desagravio del tribunal soriano al tachar el fallo judicial como “una humillación”. La Fundación Yagüe, en cambio, celebraba el triunfo que significa una sentencia que determina que la denominación no incumple la legislación memorialista.
Ganan “los fanáticos de Yagüe”
“Los fanáticos del general Yagüe han ganado parcialmente, de momento”, declara Ranz en un comunicado. Deja la puerta abierta a un nuevo recurso que decidirá, asegura, tras recibir la sentencia. “He tenido conocimiento por la prensa”, subraya.
El querellante incide en el “tono” del fallo del TSJ de Burgos, “mucho más correcto y respetuoso sobre mi trabajo que las manifestaciones del juez único de Soria”, manifiesta. Y señala que el auto “me absuelve de la condena en costas que, según la propia sentencia, no debía de haberse producido”.
Desde la asociación 'Recuerdo y Dignidad', sin embargo, critican la acción del letrado especializado en Memoria Histórica. A la “vergüenza y humillación para las víctimas del franquismo” que supone mantener el apellido de Yagüe suman que Eduardo Ranz haya actuado “con una denuncia individual sin contar con los vecinos del pueblo contrarios a este nombre”.
El colectivo “lleva trabajando en Soria diez años” y ahora, estiman, “hay que volver a empezar de cero” tras el correctivo judicial, según el presidente de 'Recuerdo y Dignidad', Iván Aparicio. “Es una pena que no se coordinen trabajos”, subraya, “porque llevamos una década argumentando por qué no debe continuar” el topónimo y por qué el nombre de Yagüe es “absolutamente incompatible con la democracia y los derechos humanos”.