Diez millones de españoles tienen que respirar aire contaminado con ozono troposférico (O) por encima del límite legal permitido, según refleja el análisis realizado por la asociación Ecologistas en Acción sobre los datos oficiales de las estaciones de medición. Este ozono malo, que se acumula por debajo de la atmósfera (en la troposfera), tiene un alto poder oxidante y está detrás de múltiples afecciones de la salud y el deterioro de la vegetación.
El valor legal de protección a la salud está en 120 microgramos de O por metro cúbico de aire medidos en un periodo de ocho horas. Si en ese tiempo la estación registra ese nivel, se ha superado el umbral. Cada estación tiene un límite de 25 superaciones al año.
Con esa fórmula, 41 de las 125 áreas atmosféricas en las que se divide España incumplieron la normativa: la mayor concentración de zonas con alto contenido de ozono troposférico se da en la Comunidad de Madrid, Castilla-La Mancha, Región de Murcia, País Vasco, Aragón, sur de la Comunidad Valenciana, y aglomeraciones interiores de Andalucía, Cataluña, Extremadura e Islas Baleares.
Desde 2011, la población que convive con aire excesivamente cargado –de acuerdo a la ley– de este gas ha pasado de siete a diez millones. Además, se trata de una molécula que no se asocia directamente con la polución. De hecho, se produce por medio de diversas reacciones químicas cuando la radiación solar incide sobre elementos precursores como el dióxido de nitrógeno (NO) o los hidrocarburos.
Sin embargo, Ecologistas en Acción incide en que ese 21% de la población afectada esconde una realidad todavía más dañina. Según sus cálculos, el hecho de que el límite trazado por la ley esté bastante por encima del umbral recomendado por la Organización Mundial de la Salud (120 microgramos frente a los 100 indicados por la OMS como nivel de seguridad) deja fuera de esa alerta a 27 millones de personas.
Así, “más de 37 millones han respirado aire contaminado por ozono durante la primavera y el verano de 2016”, explican. Y concluyen que el 80% de los españoles y el 92% del territorio han estado expuestos a la acción de este contaminante más allá de los permisible, según las indicaciones de la OMS.
Efecto corrosivo
Esta diferencia de criterio entre más protector y más permisivo provoca, por ejemplo, que una estación medidora del interior de la Comunidad Valenciana indique que su zona está dentro de los niveles legales (porque superó los 120 microgramos 19 veces) pero rebasó el dato marcado por la OMS un centenar de días. Y esto se repite en decenas de puntos a lo largo de toda la geografía.
El O con su efecto corrosivo, está directamente relacionado con enfermedades respiratorias, neurológicas y oculares además de unas 1.800 muertes al año en España, según la Agencia Europea de Medio Ambiente. Además, la agencia considera el ozono como el agente “más dañino” para la vegetación. Arruina tanto los cultivos como la flora silvestre.