El curso escolar que arranca este lunes en gran parte de España traerá la prohibición y limitación de móviles en las aulas que ya se venía aplicando en varias comunidades. El Consejo Escolar del Estado aprobó el pasado mes de enero la medida que veta el uso de dispositivos móviles en primaria, así como su limitación en los cursos de secundaria.
La mayoría de los 8,8 millones de estudiantes que hay en España comienzan esta semana el curso, pues abren las aulas en Cantabria, Catalunya, la Comunitat Valenciana, Aragón, Balears, Extremadura o Madrid, aunque los más pequeños ya iniciaron las clases antes.
Prohibición de móviles o relojes inteligentes
Después de que el Consejo Escolar del Estado aprobara por unanimidad el veto de los móviles en primaria y su limitación en secundaria, la comunidad educativa ha seguido debatiendo sobre los problemas del uso de los dispositivos móviles y este curso será el primero en el que se aplican las restricciones desde el inicio del año académico.
La Comunidad de Madrid, Galicia, Castilla-La Mancha, Andalucía y Extremadura ya contaban con prohibiciones o restricciones y, tras la aprobación del texto del Consejo Escolar, el resto comenzaron a implementar medidas, dando libertad a los centros para su aplicación y otorgando mayor libertad para los más mayores.
Mientras que Cantabria ha establecido una prohibición total tanto para colegios e institutos, apostando por que sean los centros los que arbitren las medidas de control, comunidades como Madrid o Castilla-La Mancha flexibilizan el uso del móvil en Secundaria, Bachillerato y Formación Profesional.
En Catalunya, por ejemplo se considera un buen recurso de aprendizaje en Secundaria, pero no se permiten en Primaria. Asimismo, en Aragón, Andalucía, Comunidad Valenciana, Baleares o Navarra los docentes tienen la potestad de requisar y apagar los teléfonos a los alumnos hasta el fin de la jornada escolar.
Una medida que ya habían aprobado varias comunidades
La propuesta inicial por parte del Ministerio de Educación que lidera Pilar Alegría fue recibida positivamente por las comunidades autónomas y varias de ellas ya se habían adelantado con sus propias restricciones.
Castilla y León fue la primera en hacerlo hace más de una década, en 2007, mientras queCastilla-La Mancha, Galicia y Madrid cuentan con varios años de recorrido en estas limitaciones. Andalucía, Murcia y Aragón se han unido recientemente a una medida que cuenta con sus propios detractores.
El año pasado, al conocerse la propuesta restrictiva por parte del Gobierno, casi 150 profesores y académicos firmaron un manifiesto defendiendo el uso de tecnologías digitales con fines educativos y en contra del veto total a los móviles en las aulas.