Pedro Duque (Madrid, 1963) ha cambiado los cohetes espaciales por los despachos políticos. Fue elegido por el presidente Pedro Sánchez para dirigir el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades. Tiene el encargo de recuperar un área, la investigación, especialmente golpeada en los últimos años: denuncias de asfixia en los centros públicos, precarización de los científicos, bocados al presupuesto... que han situado a España a la cola en esta materia en toda la Unión Europea. Solo la “actitud heroica” de los investigadores ha mantenido a flote la ciencia española.
Duque recibe a eldiario.es a las pocas horas de haberse visto criticado por la difusión viral de un vídeo en Twitter. “Me sorprendió mucho porque es una de esas cosas que yo creía haber dejado claro hace mucho años: siempre he propugnado que la escuela pública tiene que ser lo más importante y la máxima prioridad”. Con todo, responde a esta primera cuestión con tranquilidad y hasta con una sonrisa: “Pasan estas cosas en la redes sociales y tenemos que acostumbrarnos. El mundo es así ahora”. Un mundo que ha podido observar dos veces desde fuera: voló al espacio en el transbordador Discovery en 1998 y en la nave Soyuz en 2003.
La Agencia Estatal de Investigación reconoció en abril que no había abonado el 40% de los fondos para investigación de las universidades: 396 millones. ¿Librarán el dinero?
Ha habido muchos retrasos en muchas cosas que tenían que haber salido mucho antes. Ha habido recortes de presupuestos y este año que parecía que era uno de los que empezaba a repuntar... pero sí que ha habido complicaciones administrativas que hacían que las cosas se retrasaran. En cuanto tengamos los presupuestos metidos en la informática del Gobierno, en ese momento, vamos a empezar a sacar las convocatorias que tocaban este año. Hace escasísimo tiempo hemos sacado las que tocaban a principio de este año y ahora hemos resuelto las de enero y vamos a ponernos en marcha para que el año que viene sea mucho mejor.
Decía Julia del Amo, del Centro Nacional de Epidemiología, que las trabas burocráticas como la intervención previa de Hacienda, le comían el tiempo de la investigación. ¿Puede usted agilizar esos trámites? Julia del Amo, del Centro Nacional de Epidemiología
Eso es verdad. Es una traba que tienen una pequeña minoría, porque los de las universidades no están sujetos, y en las agencias también eso se liberó, pero los hay que sí están sujetos. Había un trabajo previo y en estos presupuestos está eliminada para los fondos que vienen de Europa, que son una gran mayoría. Y se ha elevado la cuantía para que los contratos se hagan por una modalidad administrativa más sencilla. Y para el resto estamos hablando con Hacienda. Creemos que hay muy buena sensibilidad.
El Plan Estatal de I+D+i afirma que la inversión en ciencia será un 2% del PIB en 2020. También lo dijo Pedro Sánchez antes de ser presidente. Sin embargo, el nivel en 2018 es 1,2% y los investigadores han dicho que llegar a ese nivel es irreal. ¿Hasta dónde va llegar, sin falsas expectativas?
Si estamos hablando del 1,2%, del objetivo que le hemos dado a Europa que es el 2% o del objetivo que sería realmente bueno –el 3%– hablamos siempre de la suma de los fondos públicos y los de las empresas. De hecho una de las carencias de nuestro sistema de conocimiento e innovación es que el porcentaje de inversión de las empresas en I+D+i es menor que otros países; la mitad.
Hay que incidir tanto en lo público como en lo privado. Y conseguir que en los presupuestos haya un incremento, cuanto mayor, mejor. Nosotros vamos a proponer un incremento grande, pero todavía no sabemos cuánto podemos conseguir. También en cuestión de regulación o normas que pudieran dar incentivo a las empresas para utilizar más dinero en I+D+i y llegar a 2,5% de la Proposición No de Ley del Congreso para 2020. Ahí lo pone. Existe el consenso en el país y tiene que ser posible.
Asistimos a mensajes contradictorios. Por un lado, que la investigación está infrafinanciada. Por otro, que vivimos un momento vibrante de la ciencia con muy buenos resultados ¿Cómo casa esto?
Las dos cosas son verdad a la vez. Y la única manera de casarlo es con una actitud heroica de los investigadores, de la gente que hace innovación en las empresas y de las universidades, que son la mayor parte de los investigadores españoles.
Lo que hay que hacer es estabilizar el sistema de manera que esos resultados, que sí que son muy buenos, que sí que han ido aumentando y de los que podemos estar orgullosos, no se tengan que hacer en condiciones heroicas. Por ejemplo, dedicarle enorme cantidad de trabajo a la administración, tener contratos de corta duración que hay que encadenar o nunca saber si van a tener fondos o no. Con los nuevos fondos hay que dar estabilidad.
¿Le parece admisible que el crédito por una misma carrera universitaria sea tres veces más en una comunidad autónoma que en otra? ¿Puede meter mano al decreto que originó esto al permitir la subida de tasas universitarias hasta un 25%? tres veces más en una comunidad autónoma que en otra
Me va a dar tiempo a buscar soluciones, pero por ahora no puedo hablar de nada muy concreto. Primero hay que hablar en la conferencia sectorial, con las comunidades autónomas. Hay que respetar los tiempos y las competencias. Todos estos cambios que la gente está esperando se harán siempre con un espíritu de consenso y acuerdo. No impuestas.
Hablando de sus competencias, planea modificar el sistema de becas universitarias que en su parte variable se rige por una intrincada fórmula matemática?
Yo creo que a los de matemáticas no les parece tan intrincada la fórmula [risas]. El sistema actual responde a una idea de tratar de limitar la cuantía a un cierto máximo y si hay muchas becas, la parte variable sería menos cantidad para cada uno. Esto tuvo mucha contestación en el Parlamento en la anterior parte de la legislatura y, por lo tanto, tendremos que ver si lo podemos revertir. De todas maneras, este año vamos a darle mucha prioridad a que las becas salgan y que se puedan cumplir los plazos y la gente tenga su beca. No hay en absoluto tiempo de cambiar el sistema. Estamos haciéndolo con Educación, que es quien debe llevar la voz cantante en esto.
¿Eso significa que va cambiar el decreto de becas para el año que viene?
Este año no se van a hacer cambios que supongan retrasos en la tramitación porque la prioridad es que la gente tenga su beca, y desde luego se va a mirar si se puede cambiar para el año que viene. Para cuando hagamos los presupuestos haremos lo posible para que tengan disposiciones por las cuales se permita cambiar el sistema de becas a algo como lo que había hace dos o tres años.
¿Va a revisar el ecosistema universitario que permitió casos como el máster de la expresidenta de Madrid Cristina Cifuentes?
Fue preocupante verlo como ciudadano y ahora pues habrá que ver si desde el Gobierno se puede hacer algo para impedir la situación en la cual esto resulta posible. No lo sé. Lo que sí parece claro es que era un situación puntual en la que no están inmersas otras gentes de esa misma universidad ni de otras universidades. No estamos hablando de una norma sino de unas personas que habían hecho una interpretación sui generis de la norma.
Lleva algo más de un mes en el cargo y es de las figuras del Gobierno más ajenas a la política ¿Cómo valora este tiempo?
Es un balance muy positivo. Hay mucha esperanza de que, solo por existir este Ministerio, podemos desenmarañar muchas cosas que quizá hubiesen necesitado más atención desde el Consejo de Ministros. También mucha esperanza porque hemos llegado una serie de gente que no tenemos ninguna ambición personal; solo tratamos de ayudar y de sacar las cosas adelante.
La lógica dice que hay que incrementar los recursos, estabilizar los sistemas, apostar por la innovación y darle el espacio a la universidades para que se desarrollen y evolucionen hacia algo mejor. Creemos que existe consenso y que, por lo tanto, tendremos mucha ayuda. Esperemos que sea verdad. Nosotros trabajaremos para que el resto del Gobierno responda.
¿Qué ha ocurrido para que el presidente cambie su idea de convocar elecciones rápidamente a querer agotar la legislatura?
Ahí no sé decir. Cuando se produjo lo anterior ni siquiera yo sabía que iba a estar dentro. No sé cuál era la situación anterior ni que palabras se dijeron. Ahora mismo lo que nos ha dicho el presidente es “vamos intentar gobernar, intentar arreglar toda una serie de cosas que se podrían arreglar: el tema de la inversión en innovación, desarrollo y universidades…etc y vamos a gobernar desde el consenso”. A nosotros nos ha dicho que vamos a intentar gobernar durante todo el tiempo que nos den.
¿Podrán gobernar durante dos años si tienen que ir prorrogando los presupuestos?
Espero que no lleguemos ahí, la verdad. La voluntad está en llegar a contar con suficientes consensos como para sacar presupuestos, pero es algo más técnico de quien entiende de parlamentos.
La renovación de RTVE demuestra que va a estar complicando conseguir apoyos...
Lo que espero es que haya cuentas nuevas. Y que haya los consensos adecuados. Espero que sea así. Si todo el Parlamento está en contra de lo que debemos hacer pues no habrá manera de hacerlo. Pero es una cosa que está por construir. Vamos a dar la esperanza de que lo consigamos, primero.
¿Cree que se ha erosionado el Gobierno en la elección del presidente de RTVE?
No sé. Espero que no. Tampoco es mi área, pero, por lo que yo he visto, era una manera de pasar un interim entre un momento en que se había acabado un mandato y hasta que se pueda producir el método real y legal de hacer la elección definitiva que era el concurso.
¿Tiene usted un socio prioritario para sacar adelante todos esos acuerdos que harán falta?
Esta semana voy hablar con los portavoces de la comisión que está recién creada, de ciencia, innovación y universidades y ahí vamos a ver qué ambiente se respira. Hay una resolución muy reciente creada, proposición no de ley, que dice que tiene que hacerse un aumento en la inversión. Y hay un objetivo: el 2,5% del PIB. Socio prioritario no veo. Todos pueden ser socios si, moderadamente, llegamos a una redacción correcta.
¿Puede decirnos ya qué le impulsó a decir sí a Pedro Sánchez? ¿Se arrepiente?
Ciertamente, si te llama el presidente y te dice que está pensando en ti para llevar unas áreas en las que siempre has dicho que había que cambiar cosas, que había que mejorar cosas, pues piensas debería yo, responsablemente, hacer esas cosas que había dicho que había que hacer. Eso ha pesado mucho.
Además, desde el primer momento la idea era hacer una acción de gobierno basada en el consenso y el acuerdo, y ahí por supuesto yo estaré siempre a favor. Sobre todo en esta área que los acuerdos deben ser duraderos en el tiempo. No vale hacer unos cambios que luego revierta el siguiente. Los acuerdos son importantísimos en este campo.
Le dije “yo me tiro a esta piscina. Ya que me lo has ofrecido, lo voy a intentar y voy a dar lo más”. ¿Acertada? Todavía creo que sí. Hay muchas cosas que tienen que hacerse. Ves la cara de la gente con la esperanza de que lo vas a conseguir y sigo con la idea de la responsabilidad. Creo que tengo que seguir y lo vamos a hacer.
¿Qué le diría a un joven investigador español que se ha tenido que ir al extranjero?
Mucha gente pregunta sobre ello. Hay que recuperar a los que quieran volver, porque habrá alguno que no quiera. Es cierto que se cobra más de investigador cuando están en Alemania o EEUU y que los medios son muy buenos. Habrá gente que esté mejor allí, eso está claro.
Pero muchos de ellos han salido aunque hubieran querido investigar en España y no han podido. Les tengo que decir que vamos a intentar incrementar el volumen del sistema científico y de investigación de España y, entonces, tendréis la posibilidad de engrosar el sistema y entrar en una estabilidad. Lo que sería irresponsable sería hacer algún programa puntual para que volviera alguna gente, echarse cuatro fotos con ellos y luego que no tuviesen un laboratorio donde trabajar. Eso es lo que, seguro, no vamos hacer.
¿Sigue usted pasando la acreditación como astronauta? ¿Y si le llaman para una misión espacial?
Ahora que no me llamen que no voy porque tengo un trabajo que me ocupa todo el tiempo. Lo que sí que voy a hacer son las pruebas médicas. Todos los años. Pero eso te ocupa un día de trabajo, nada más. Y es bueno saber si todavía pudieras en algún futuro estar dentro. Pero ahora mismo que no me llamen, que no tengo tiempo.
El 40% de los universitarios estudian carreras de ingeniería o ciencias de la salud. Pero solo un 10% de los diputados tienen formación científica. ¿Cambiaría la política si estuviera más nivelado?
No tengo ningún interés en que cambien los diputados que están allí. Son los representantes del pueblo y están por encima de mí en muchos aspectos.
Pero sí que tenemos que darles apoyo a programas como Ciencia en el Parlamento. Dar más información, porque la política debería basarse en las ideas de cada uno y, si me apuras, en las ideologías, porque siempre hay que darle un sesgo a las cosas hacia lo que uno piensa que es más importante. Pero la base de eso siempre tendría que ser el conocimiento real y científico, nunca ir en contra de eso. Es absurdo. No puede haber nadie que tenga una ideología en contra de la ley de la gravedad porque es tontería. No puede haber debate ideológico sobre si algo es cierto o no cuando hay algunas cosas que ya están demostradas.