La Policía evaluará cada caso para decidir si avisa a las mujeres de que su agresor es reincidente en violencia machista

Marta Borraz

9 de enero de 2023 22:23 h

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Cuatro mujeres asesinadas por violencia machista en 24 horas. Tres en Cádiz, Ciudad Real y Tenerife a manos de sus parejas o exparejas y una cuarta estrangulada en Almería por un hombre después de mantener relaciones sexuales. Así ha arrancado 2023 tras un diciembre especialmente cruento con 11 víctimas mortales confirmadas. La acumulación de casos ha hecho saltar las alarmas y el Ministerio del Interior ha anunciado este lunes la puesta en marcha de una nueva herramienta para intentar mejorar la protección de las mujeres cuyos agresores son reincidentes en violencia machista.

Que los asesinos figuren en el sistema de Seguimiento Integral en los casos de Violencia de Género (VioGén) por denuncias de anteriores parejas es una circunstancia relativamente frecuente. Ocurrió en algunos de los casos registrados en el último mes del año y también en uno de los de este domingo. El detenido por el asesinato de su pareja en El Puerto de Santa María (Cádiz) tenía antecedentes por otra pareja anterior, un caso que permanece como inactivo en VioGén. El hombre confesó que había matado a la mujer, de 46 años, tras ser detenido por tráfico de drogas.

Ver que la víctima no estaba en el sistema pero sí el agresor respecto a otras parejas es “una de las preocupaciones máximas”, ha dicho Fernando Grande-Marlaska, que prevé tener activa la nueva herramienta “en las próximas semanas” para avisar a estas mujeres de que su pareja o expareja ha maltratado a otras con anterioridad. Sin embargo, no será aplicada en todos los casos. Según informan fuentes de Interior, deberá mediar una intervención policial con la mujer. Tiene que ser un caso del que, o bien por denuncia de la propia víctima o aviso de vecinos o familiares, tengan constancia las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Es decir, cuando se produzca una situación de violencia de género que sea informada a la policía, que entonces hará una evaluación.

Si la víctima, su vida o su integridad física “corren un riesgo inminente” y “el suministro de esa información puede prevenirlo” se avisará a la mujer, prosiguen las mismas fuentes. El ministerio está actualmente ultimando los criterios que formarán parte de la valoración policial. Esta evaluación se sumará así a la general que ya hace la Policía ante cualquier denuncia, que es la que queda registrada en el sistema VioGén y utilizan los jueces para tomar decisiones sobre la protección de las víctimas. En ocasiones, esta valoración falla y se adjudican niveles de riesgo bajos a mujeres que acaban siendo asesinadas, por lo que las expertas reclaman una mejora.

“Colisión” de derechos

Interior pondrá en marcha la herramienta cuando se recaben “todos los informes”, ha asegurado el ministro. El que ya ha recibido es el de la Fiscalía de Sala de Violencia sobre la Mujer, a la que consultó el encaje legal de la propuesta ante “la colisión” de derechos fundamentales que puede suscitar. Por eso “tiene que haber una ponderación” por parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado porque “está el derecho a la propia vida y la integridad de las mujeres y también el derecho a la privacidad y protección de datos” de los agresores, añaden desde el ministerio, que ha convocado este martes y miércoles a todos los cuerpos policiales para analizar los casos de 2022.

“Fue un informe técnico jurídico sobre el equilibrio de derechos”, asegura la fiscal de Sala de Violencia sobre la Mujer, Teresa Peramato. “Sabemos que los reincidentes, cuando tienen nuevas relaciones, pueden reproducir los comportamientos violentos en menos tiempo y con mayor intensidad y violencia, así que es un factor de riesgo que debemos tener en cuenta”, añade la experta, que detalla que la consulta de Interior versaba sobre si hay posibilidad legal de informar a estas nuevas víctimas.

Peramato asegura que tras consultar con Delegado de Protección de Datos del Ministerio Fiscal remitió a Interior un informe “sobre las circunstancias que se deben tener en cuenta en base a la normativa vigente”, pero a partir de ahí es el ministerio “el que tiene que estudiar el criterio jurídico y valorar las posibilidades que da” la legislación.

El diciembre con más casos, uno de los años con menos

Al caso ocurrido en Cádiz, se sumó en este segundo domingo del año el de la localidad de Piedrabuena, en Ciudad Real, donde un hombre asesinó a su mujer de 24 años, con quien tenía una hija de tres años. Este lunes se conocía además la detención de otro hombre como presunto autor de la muerte a puñaladas de su exmujer en Adeje (Tenerife) y por causar heridas a uno de los hijos de la víctima, que intentó defenderla. El hombre había sido detenido el pasado 28 de diciembre por amenazar a la víctima, pero el juzgado no impuso ninguna medida de protección, aunque la Policía continuó haciendo seguimiento en VioGén. La mujer no quiso declarar.

Además, otro hombre fue detenido en la localidad almeriense de Roquetas de Mar acusado de matar a una mujer con la que había mantenido relaciones sexuales. Todo apunta a que entre ellos no había ninguna relación sentimental, pero el caso se encuadraría en el llamado feminicidio sexual, según la nueva estadística impulsada por el Ministerio de Igualdad.

Con estas cifras arranca 2023 aún con la vista puesta en el registro de diciembre, convertido en el segundo con más casos desde que comenzaran a contabilizarse oficialmente hace 20 años. Es algo que sucede de vez en cuando, especialmente en periodos vacacionales como en verano, que en periodos cortos de tiempo se concentra un elevado número de asesinatos machistas, pero ningún mes desde 2003 ha superado las 11 víctimas mortales de diciembre de 2008 y 2022, los dos únicos con este registro. Aún así, el año cerró en total con 49 asesinatos por violencia de género, el segundo con menos víctimas tras 2021 (48) y las mismas que en 2016 y 2020.

La fiscal de Sala de Violencia sobre la Mujer asegura que no puede “entrar a valorar” los casos porque está actualmente evaluándolos, pero apunta a la “complejidad” del tema y lanza preguntas que cree que “requieren de un estudio profundo”. “¿Por qué se produjo esta avalancha de casos? ¿Qué circunstancias concurren? En un porcentaje muy alto habían denunciado. Creo que necesitamos de verdad que de todos los datos estadísticos que tenemos se haga un estudio cualitativo, con sociólogos, criminólogos y los profesionales que hagan falta para poder adoptar medidas más efectivas”, concluye Peramato.

Gráficos elaborados por Ana Ordaz.