Un tribunal tailandés inició hoy el proceso legal para determinar la custodia de un bebé, nacido a través de subrogación, entre el padre biológico y su marido y la madre gestante, quien no comparte consanguinidad con la criatura.
Ambas partes se reunieron hoy durante hora y media en el Tribunal Central Juvenil y de Familia, ubicado en el norte de Bangkok, sin que llegaran a un acuerdo.
“Reclamamos lo mismo”, quedarnos con la custodia del bebé, comentó el estadounidense Gordon Lake, padre biológico de la menor, a la salida del proceso de mediación.
El tribunal, quien solicitó ver a la pequeña, pospuso hasta marzo del 2016 las nuevas vistas después de que la tailandesa Patidta Kusolsang, la mujer que dio a luz a la niña, presentará hace pocos días su alegato.
Los jueces requieren que la Agencia de Protección de Menores tailandesa entreviste a Patidta antes de proseguir.
“Hemos permanecido en Tailandia diez meses con un gran apoyo de gente. Tenemos energía para continuar hasta que las vistas comiencen de nuevo. Somos optimistas (...) seguimos confiando en la justicia”, expresó a los medios Lake, quien contrajo matrimonio hace tres años con el español Manuel Santos.
El matrimonio Lake-Santos, quienes tienen otro hijo subrogado concebido hace dos años en la India y que se encuentra en la actualidad con su familia española, han tratado de llegar a un acuerdo amistoso con Patidta, pero ante la falta de avances reclamaron la custodia en los tribunales.
Tras un proceso de subrogación que discurrió con absoluta normalidad, el 17 de enero nació Carmen Lake, concebida con el esperma de Gordon y el óvulo de una donante y gestada por la tailandesa.
Los problemas surgieron cuando Patidta, quien en el hospital firmó los papeles que le otorgan la paternidad a Lake, no acudió a la Embajada de Estados Unidos en Bangkok para firmar los papeles necesarios a fin de que la bebé pudiera salir de Tailandia.
Patidta expresó entonces sus reservas debido a que los padres “no son normales”, en referencia a su orientación sexual, y una representante de la tailandesa llegó a insinuar que Lake y Santos eran traficantes de personas.
“Consideramos presentar cargos criminales por difamación contra la gestante y su representante porque durante diez meses han dicho cosas que son mentira para dañar nuestra imagen”, sentenció Lake.
A finales de julio, una plataforma ciudadana entregó 130.000 firmas al Ministerio de Asuntos Sociales de Tailandia en apoyo del matrimonio homosexual bajo la campaña Bring Carmen Home (“Traigan a Carmen a Casa”, en inglés).
Lake también entrego, el pasado 8 de octubre, 160.000 firmas logradas en favor de su causa a los representes de la embajada norteamericana, quienes este viernes acudieron al tribunal en calidad de observadores, aunque no se les permitió entrar en la sala donde tenía lugar la vista.
La junta militar que rige Tailandia promulgó hace unos meses nuevas leyes para restringir los casos de subrogación en el país tras dos controvertidos incidentes acaecidos a mediados de 2014.