Año nuevo, mismos problemas. Los profesionales de la sanidad pública española anticipan un 2023 marcado por las reivindicaciones que llevan años realizando, pero cuya mecha definitiva encendieron el pasado ejercicio. Este mes de enero marcará el rumbo de un año electoral en el que sanitarios amenazan con huelgas y movilizaciones por las dificultades estructurales, que van desde la Atención Primaria hasta la hospitalaria y que atañen a los capítulos de los recursos humanos, de la calidad asistencial o de las condiciones laborales. En hasta ocho comunidades autónomas, sindicatos y consejerías negocian medidas que eviten paros y permitan coser las heridas del sistema sanitario.
La Comunidad de Madrid ha arrancado esta semana con un paro de tres días de los trabajadores de las urgencias extrahospitalarias, que la presidenta Isabel Díaz Ayuso reorganizó hasta en cinco ocasiones desde junio de 2022, con un recorte efectivo del servicio respecto a marzo de 2020 y cambios sustanciales en las condiciones laborales de los profesionales. Esta huelga, que finaliza el miércoles, se suma a las que ya se realizaron entre noviembre y diciembre por el mismo motivo.
En paralelo, la Consejería de Sanidad madrileña trata de neutralizar a los médicos y pediatras de Atención Primaria, que suspendieron antes de Navidad una huelga indefinida hasta este miércoles, 11 de enero, cuando volverá a reunirse con el comité. El consejero Enrique Ruiz Escudero ha considerado que “no tendría mucho sentido” retomar el paro porque las negociaciones están “bastante avanzadas”. Este miércoles se producirá una nueva reunión a la que la secretaria general del sindicato Amyts, Ángela Hernández, ha afirmado que acudirá con “voluntad de alcanzar una solución a esta difícil situación y a la espera de ver qué propuestas concretas presenta la administración”.
“La última oportunidad para salvar la sanidad”
En Catalunya, el sindicato mayoritario ya había anunciado un paro para los próximos días 25 y 26 de enero. Metges de Catalunya había advertido de una gran movilización si no se producen mejoras urgentes tanto en Atención Primaria como en los hospitales y esperaba la Generalitat se sentase a negociar mejoras salariales y de jornadas y nuevas contrataciones. Por el momento, la huelga se mantiene. “Es la última oportunidad para salvar la sanidad”, advertía el secretario general del sindicato, Xavier Lleonart.
Ese paro se solapará con el que ha convocado para todo el sector sanitario y sociosanitario los días 24 y 25 de enero el sindicato Intersindical, con cierto músculo entre el personal de enfermería y administración. “Los problemas no son exclusivos de un único colectivo ni de un único sindicato”, justificaba su coordinador, Nèstor Sastre.
En la Comunitat Valenciana, la Consellería de Sanidad también trata de desactivar la huelga convocada por el sindicato CESM CV para los días 17 y 18 de este mes por la falta de personal y la presión asistencial. “He intentado dialogar para buscar un acuerdo, estamos en negociaciones con los seis sindicatos”, afirmaba el responsable del ramo Miguel Mínguez en esta entrevista con elDiario.es. Este mismo miércoles se producirá una nueva reunión para tratar de desbloquear el conflicto, que en las últimas semanas ha tenido ecos en otros puntos específicos, como en las urgencias del Hospital de la Fe.
En Extremadura el Sindicato Médico Simex y la consejería llegaron a un acuerdo en 2019 que no se ha cumplido. La organización sindical ha convocado un paro para los días 26 y 27 de enero y una huelga indefinida todos los lunes desde el próximo 30 de enero. No obstante, el comité continúa abierto a un “diálogo constructivo” para buscar un “acuerdo” que redunde en “una mejor calidad asistencial, una mayor satisfacción de los pacientes y un fortalecimiento del sistema sanitario público extremeño”.
Los médicos de Navarra anunciaron en octubre una huelga para los primeros meses de 2023 por la “inacción” del Gobierno foral ante el “deterioro inaceptable” de la sanidad. Finalmente, el Sindicato Médico aplazó su ejecución al 1 de febrero “cuando se terminen de negociar los presupuestos”, para dar a la presidenta María Chivite ese “pequeño margen”. El Servicio Navarro de Salud (SNS) ha respondido con un paquete de medidas que el sindicato ha considerado insuficiente. “Con esa propuesta y sin tener otros elementos encima de la mesa que permitan concretarla nuestra postura es inamovible”, ha adelantado el secretario general Alberto Pérez.
A las puertas de las navidades, los sindicatos médicos de Atención Primaria de Aragón reunieron en Zaragoza a cientos de personas para reivindicar este primer nivel asistencial. CESMAragón y Fasamet han convocado una huelga para los días 23 y 24 de enero si el Gobierno aragonés no garantiza “una Atención Primaria de calidad”.
“Los ánimos crispados”, tras el acuerdo en Cantabria
En Cantabria, los médicos de Atención Primaria llegaron a mediados de noviembre a un acuerdo con la consejería para aplazar la huelga indefinida tras diez días de parón. No obstante, ya advirtieron que “no se desconvocará hasta que existan garantías” de que la administración “cumple”. Esa evaluación se realizará el próximo martes, en una asamblea para analizar la marcha de las medidas pactadas y valorar si son necesarias nuevas movilizaciones, aunque desde el Sindicato Médico señalan que “los ánimos están muy crispados porque no se está cumpliendo el acuerdo”.
Andalucía cerró el año con una protesta masiva contra la gestión sanitaria del Gobierno de Juan Manuel Moreno Bonilla, vertebrada en la denuncia de falta de profesionales, un aumento de las derivaciones a la privada y la falta de recursos en primaria. Ya entonces el Sindicato Médico advirtió que iría a la huelga en 2023 si la Junta no daba soluciones. Este martes han publicado un comunicado en el que convocan una nueva movilización para el jueves en la que “se pondrá en relieve el deterioro que sufre la Atención Primaria”.
“Esta es la tercera de las concentraciones previstas y, si las negociaciones con la Administración no dieran fruto, el próximo paso es la convocatoria de huelga el próximo 27 de enero”, señala la organización sindical.
Y en Galicia, la plataforma SOS Sanidade Pública acaba de convocar una manifestación para el jueves, ante lo que consideran un “desmantelamiento” de la Atención Primaria, que repercute en un aumento de la mortalidad, del colapso de las urgencias hospitalarias y en el aumento de las listas de espera.