Montarte en un coche para realizar un viaje de larga distancia con un desconocido. Esa situación, hace unos años conocida como autostop y hoy como plataformas de economía colaborativa, puede ser especialmente tensa si eres mujer. Por ese motivo, algunas usuarias prefieren que su conductora o que sus pasajeras sean también mujeres: Blablacar cuenta desde hace tiempo con un filtro que permite seleccionarlo así.
La opción, según fuentes de la compañía, existe prácticamente desde el inicio de la plataforma (la más exitosa en su campo), y no solo a nivel español sino europeo. En la web explican que “tal y como nos indica nuestra experiencia”, algunas mujeres efectivamente prefieren no viajar con hombres por motivos de seguridad. Especialmente durante su primer trayecto, cuando desconocen de qué se trata exactamente eso de compartir vehículo.
El sistema consiste simplemente en un filtrador que se puede ejecutar si se inicia sesión en la aplicación como mujer y que te muestra a otras mujeres que indican que también quieren que en su coche vayan solo pasajeras (ellas son en España el 47% de las conductoras y el 46% de las usuarias). No es una opción mayoritaria: un informe publicado por el 8 de marzo de 2017 señalaba que solo el 2% de las que utilizan la app optan por escogerlo así explícitamente (ya que también se puede elegir que tu chófer sea mujer sin usar el filtro). Sin embargo, fuentes de Blablacar explican que fueron precisamente las peticiones de usuarias las que generaron que se implementase este sistema.
La polémica ha surgido años después de que la opción estuviese disponible, cuando un tuitero la ha compartido. @elsacodelcoco ha acumulado miles de retuits preguntándose si se trataría de un caso de “discriminación” si se pudiese elegir no ir con inmigrantes, sugiriendo que esta opción discrimina a los hombres. Fuentes de la compañía afirman que no hay ningún afán de ese tipo: “Esta es una red social para compartir gastos y experiencias”.
El tuit ha propiciado que muchas mujeres respondan relatando por qué han elegido, elegirían o comprenden que se elija la pestaña “solo mujeres”. Todas han contado malas experiencias en Blablacar o similares relacionadas con el acoso.
La tuitera @IngridTumTum le recordaba que las estadísticas justifican medidas especiales como esta y que muchas se sientan inseguras al estar encerradas en un coche con un desconcido: una mujer es violada por un hombre cada 8 horas en España, y estudios del Ministerio del Interior resaltan que de 2009 a 2015, 9.040 mujeres denunciaron a hombres por violación.
Casos de acoso y otros transportes
El tema no es nuevo. Desde que surgieron plataformas colaborativas que ponen a usuario y beneficiario en contacto directo, en España se han producido varias denuncias de casos de varios tipos de acoso mientras se utilizan. El Confidencial recopiló en marzo de 2017 varios testimonios de mujeres que habían sufrido meses de acoso, sobre todo vía Whatsapp, tras emplear tanto Blablacar como Airbnb o Wallapop. Otra plataforma de servicios de transporte, Uber, fue protagonista de un escándalo cuando en 2016 Buzzfeed reveló la existencia de hasta 170 denuncias de violaciones por parte de conductores.
Desde Cabify, plataforma de movilidad similar a Uber que opera dentro del marco de la llamada economía digital, confirman que no cuentan con un sistema para que las mujeres elijan a mujeres. Afirman que sí con mecanismos para gestionar todo tipo de avisos (desde dudas hasta incidencias) mediante su atención al cliente 24 horas, con un equipo humano y tecnología que puede intermediar “a tiempo real” en los contactos que se producen durante los trayectos. Blablacar es de hecho la única empresa de transporte masivamente utilizada en España (las otras serían las dos anteriores y Amovens) que cuenta con una opción explícita para viajar solo con pasajeras o conductoras mujeres.
En el caso de que se produzca un caso de acoso en Blablacar, no hay protocolos especificados en la web. El recurso más inmediato es el sistema de puntuación y comentarios, por el que se sostiene y retroalimenta la aplicación y que indica a otros usuarios la fiabilidad del conductor o pasajero. Mediante él, la empresa puede bloquear a un usuario, y esta sería una razón por la que pueden hacerlo. También serviría en el caso de que se esperase una anfitriona mujer y, al llegar al vehículo, fuese otra persona la que condujera. No es un método infalible: en 2016, otra chica de 22 años tuvo que llevar su caso ante la policía tras recibir insultos y vídeos de contenido sexual por parte de un hombre precisamente por haberle dejado una mala valoración. Por otro lado, fuentes de la compañía apelan a la denuncia formal si la situación lo requiere.
Tampoco es ninguna novedad el sistema “solo mujeres” en distintos tipos de transporte, en los más y en los menos tradicionales. México D.F. o Tokio, así como ciudades de India, Malasia, Tailandia o Egipto, cuentan con vagones de metro exclusivos para ellas por la alta criminalidad sexual. En D.F., además, se ha creado una red similar a Uber y Cabify solo por y para mujeres debido a la alta inseguridad que sentían yendo con hombres.