La exhumación de los hermanos Lapeña del Valle de los Caídos se está retrasando más de lo esperado por la familia dado que el informe que mantiene el proceso paralizado ha tardado casi un año en elaborarse y próximamente será revisado por Patrimonio Nacional.
En mayo de 2016, un juez de San Lorenzo de El Escorial autorizó la exhumación de los restos mortales de dos hermanos fusilados y enterrados en una fosa común en Calatayud (Zaragoza). Posteriormente fueron trasladados al Valle de los Caídos.
Las obras para acceder a la cripta arrancaron en julio de 2018, pero están paralizadas. Hace casi un año, familiares de los hermanos se reunieron en Moncloa para conocer los avances y entonces se les comunicó que la exhumación se retrasaría cuatro meses. Debían esperar con motivo del nuevo informe que tienen que realizar los técnicos del Instituto Torroja sobre posibles problemas estructurales de los osarios donde se encuentran los restos.
Una de las medidas acordadas en esa reunión fue también permitir el pasado marzo a seis familias de víctimas del franquismo acceder por primera vez a la cripta tras la toma de ADN.
A la espera de conocer el informe
Miguel Ángel Capapé, portavoz de la familia Lapeña y de la Asociación por la Recuperación e Investigación contra el Olvido, ha comentado a Europa Press que desde entonces están esperando al informe necesario para exhumar a sus seres queridos.
El informe, que ya estaría redactado, debe determinar si los restos de los hermanos Lapeña están o no en el tercer nivel de la cripta adyacente a la Capilla del Santo Sepulcro del Valle de los Caídos.
Hace tres meses, la familia se trasladó a Madrid para que se les informaran de que el informe estaba ya listo, pero finalmente no tuvieron acceso a el mismo, según ha comentado Capapé. En los próximos días, será revisado por Patrimonio Nacional y previsiblemente se informará a los familiares.