El tren luso que cubre la línea entre la ciudad de Guarda (en la región Centro) y Lisboa descarriló hoy a las 20 horas (GMT) a la altura de Fornos de Algodres (Centro), debido a una roca que llegó hasta las vías por un corrimiento de tierras provocado por el temporal.
Según informó a EFE Protección Civil de Portugal, a pesar del descarrilamiento del tren, no hay heridos.
En total, han tenido que ser evacuados los 50 pasajeros del tren, que han sido trasladados hasta la ciudad próxima de Mangualde (Centro), desde donde serán derivados en diferentes medios de transporte a los destinos a los que se dirigían, según aseguró a EFE un portavoz de Protección Civil.
Desde ayer, el temporal ha causado en Portugal dos víctimas mortales.
Son un transportista, impactado por un tronco mientras estaba en la cabina de su camión en Montijo (centro), y otra persona que pereció al derrumbarse su casa en Viseu (norte) por el mal tiempo.
Además, hay una persona que está desaparecida en la zona de Castro Daire, también en el distrito de Viseu.
Protección Civil mantiene movilizados 25.000 efectivos por todo el territorio luso, a causa de la borrasca Elsa, ya que en las últimas 24 horas fueron registradas más de 8.500 incidencia.
También está sobre alerta toda la cuenca del Duero en el norte de Portugal, ya que muchos de los acuíferos están al borde de su capacidad y algunos ya están desbordados.
La situación más preocupante en el Duero está en la zona de Regua y en su desembocadura en Oporto y Gaia, según Protección Civil.
Debido a las intensas lluvias, un total de 118 personas tuvieron que ser desalojados de sus viviendas en las zonas norte y centro de Portugal.