La calidad de las aguas del río Sena vuelve a ser motivo de preocupación en los Juegos Olímpicos de París. La triatleta belga Claire Michel tiene una infección de E.coli tras haber participado en la prueba femenina la semana pasada, según han informado los medios de este país.
La ministra francesa de Deportes, Amélie Oudéa-Castéra, ha calificado de “información falsa” que estuviese hospitalizada, como publicó la prensa belga, sino que según su versión ha estado “enferma” pero no se ha establecido “necesariamente” una relación con el baño en el Sena. “Sería importante que el CNO belga aclarase todo esto. Desde ese día, la calidad del agua ha sido particularmente buena. La atleta belga ha estado enferma, estuvo en el policlínico”, ha insistido la ministra, que se bañó en el río poco antes de los Juegos Olímpicos para demostrar su buen estado en medio de la polémica.
El Comité Olímpico de Bélgica anunció en un comunicado que en consecuencia de la infección su equipo mixto no puede participar en la prueba de este lunes. “Claire Michel, miembro del relevo, lamentablemente está enferma y debe retirarse de la competición”, expresó el comité, precisando que la decisión se tomó tras consultar a los deportistas y a su entorno.
Este lunes los medios suizos han confirmado que el atleta Adrien Briffod también sufrió una infección gastrointestinal días después de bañarse —no ha participado tampoco en la prueba de relieve mixto, aunque la delegación sí ha podido competir—. En este caso, el médico de la delegación, Hasnpeter Betschart, ha dicho que no se puede relacionar con la calidad del agua del Sena, según recogen los medios.
A todo esto se añade que el domingo se canceló el entrenamiento previsto en el río, aunque este lunes finalmente se ha celebrado la citada prueba de relevo mixto de triatlón después de que las fuertes lluvias del miércoles y el jueves volvieran a provocar un aumento de los niveles de bacterias en el agua.
La prueba masculina ya se cambió del martes al miércoles, el mismo día que la femenina, a principios de la pasada semana, y los deportistas no pudieron nadar en el río hasta el mismo día de la carrera.
¿Por qué se pospusieron esas competiciones?
El estado de contaminación fecal del agua se mide analizando las bacterias E.coli y enterococos. Si esas tasas son elevadas, el río no es apto para actividades recreativas. Los expertos señalan que cuando llueve mucho, el agua de lluvia se junta con la de las cloacas y al subir mucho el nivel sale por los aliviaderos que desembocan en el río.
De esa forma, una parte de las aguas negras, en lugar de ir a las plantas de depuración contaminan el río. Las obras que se han hecho han sido para canalizar los desagües que todavía se vertían directamente al Sena (los de los barcos, pero también viviendas y explotaciones aguas arriba de París) parece que no han sido suficientes antes las intensas lluvias.