Cantabria ha arrancado el tercer mes del año con buenas y malas noticias en lo que respecta a la COVID. Comenzando por las segundas, la comunidad ha registrado un nuevo fallecimiento de una mujer de 92 años, lo que sitúa la cifra de muertos totales por la pandemia en 521.
Además, los casos nuevos tampoco terminan de acusar una bajada significativa, y mientras el domingo se notificaron 39 casos, el lunes fueron 40, unos números que pese a ser bajos, parece que tienden más a la estabilización que a la caída. Y otra cuestión que sigue empeorando es la ocupación en las UCI (Unidades de Cuidados Intensivos), que se sigue situando por encima del 20% y con 24 personas ingresadas (solo una por debajo del día anterior).
Sin embargo, los datos más esperanzadores parece que comienzan a consolidarse. Ocurre con los casos activos, que en las últimas 24 horas se han rebajado en 251 personas, es decir, pasando de 2.172 enfermos a 1.921, y esta bajada viene provocada por el rápido aumento de los curados, que ya son 23.516 de los 25.958 cántabros que han pasado el virus.
Informa Blanca Sáinz.
El Gobierno italiano del primer ministro, Mario Draghi, ha aprobado hoy un nuevo decreto con medidas para contener el coronavirus en el país que prevé, entre otras cosas, la educación a distancia en las regiones con mayor riesgo de contagios.
El decreto entrará en vigor el próximo 6 de marzo y estará vigente hasta el 6 de abril, y la intención es evitar que el virus se propague en las próximas semanas, en vista de la celebración de la Semana Santa.
Preocupa en el país la necesidad de contener los contagios y sobre todo las distintas variantes de la COVID-19 que se están extendiendo por el territorio nacional, una situación que ahora deberá gestionar el nuevo responsable para la emergencia, el general y excomandante de las Fuerzas de la OTAN en Kosovo Paolo Figliuolo, con la misión clave de acelerar la vacunación.
Informa EFE.
La curva de la tercera ola continúa desplomándose desde que alcanzara el pico el 21 de diciembre y la incidencia de contagios alcanza los mejores registros desde el verano. Ahora mismo, solo una de cada cinco grandes ciudades continúa en alerta roja por niveles de transmisión al registrar más 250 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días y menos del 2% de la población vive en municipios con incidencias por encima de los 500 casos. De este modo, el 84% de la población, vive en municipios en los que los casos se están reduciendo.
Se trata de unas cifras alcanzadas tras un veloz descenso de los contagios que todavía se repite en prácticamente todo el territorio aunque empieza a dar señales de ralentizar el ritmo de bajada. Solo una treintena de municipios registra todavía tasas de incidencia superiores a los 250 casos en 14 días por cada 100.000 habitantes, y de ellas solo una supera el umbral extremo de los 500 (Santurzi, Bizkaia).
De las 100 grandes urbes con mayores tasas de incidencia, la subida de contagios se concentra en algunas localidades de Barcelona y de Canarias.
Lo cuentan Raúl Sánchez, Ana Ordaz y Victòria Oliveres.
El director gerente del Hospital Clínico San Carlos, José Soto, ha comparecido este martes en la Comisión de Sanidad en la Asamblea de Madrid para dar cuenta de los más de 600 jubilados que se vacunaron en el centro sanitario madrileño durante la primera fase de vacunación a mediados de enero. Saltándose los protocolos, el centro vacunó a 627 jubilados, que Soto ha enmarcado en “la necesidad de administrar dosis de vacunación con perentoriedad inmediata”.
El gerente del Clínico ha asegurado que se vacunaron hasta a personal de subcontratas “ante la previsión de ocupación real de las agendas y la caducidad de los viales”. “Se inició un llamamiento planta a planta de hospitalización de posibles candidatos para ser vacunados voluntariamente, sin obtenerse un número suficiente como para consumir las dosis pendientes”, ha proseguido.
Ante este escenario, Soto ha asegurado que “se siguió facilitando la posibilidad de vacunarse a otros profesionales presentes en el centro o profesionales interesados que quisieran acudir”.
El gerente del Clínico ha asegurado que se incluyó en ese llamamiento a personal de las empresas adjudicatarias de los servicios externalizados y también a grupos de voluntariado entre los que se incluye la Asociación de Jubilados. Estos últimos, ha justificado, “interpretaron mal el sentido de la posibilidad habilitada exclusivamente para aquellos miembros asociados con tarjeta de presencia autorizada como voluntario, extendiendo el llamamiento a otros compañeros jubilados incluso no asociados”. De ahí que se vacunara a más de 600 personas, ha defendido.
Esta situación provocó “un desbordamiento” de la capacidad de las agendas, ha defendido por lo que “la dirección del hospital dio la instrucción de detener la vacunación de todo aquel que no estuviera en el grupo de profesionales autorizados, reordenando el flujo de vacunación”, ha defendido.
Por Fátima Caballero.
Casa Real se ha desvinculado este martes de la vacunación contra la COVID-19 de las infantas Elena y Cristina durante un viaje a Emiratos Árabes para ver a su padre Juan Carlos I y ha recalcado que los reyes Felipe y Letizia y sus hijas se vacunarán cuando les corresponda, según han indicado fuentes de Zarzuela.
Desde Casa Real han recalcado que Felipe VI “no es responsable de los actos de sus hermanas” por lo que ha defendido que esta actuación por parte de Elena y Cristina no concierne a la institución, han indicado las mismas fuentes, que han equiparado esta situación con la forma de proceder en el caso de cuestiones que afectaban a las infantas Pilar y Margarita cuando Juan Carlos I era rey de España.
Las hijas del rey emérito recibieron durante la segunda semana de febrero la vacuna contra la COVID-19 durante una vista a su padre en Abu Dabi, donde se encuentra Juan Carlos I desde el pasado mes de agosto tras abandonar España. Según ha adelantado 'El Confidencial', también han sido vacunados en Emiratos Árabes el propio rey emérito y el exdirector del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Félix Sanz Roldán.
Informa Europa Press.
La fiscal general del Estado, Dolores Delgado, ha asegurado este martes en el Congreso de los Diputados que las tres investigaciones que tiene abiertas la Fiscalía del Tribunal Supremo en torno al patrimonio de Juan Carlos I han motivado las dos regularizaciones fiscales presentadas por quien fuera jefe del Estado durante casi cuarenta años y han permitido aflorar una cantidad “importante” e “inimaginable” de dinero para las arcas públicas. “Estamos hablando de cinco millones y pico de euros que es de todos los españoles”, ha afirmado refiriéndose a la suma abonada por el rey en las dos regularizaciones presentadas: los 678.393,72 euros que pagó en diciembre para impedir una investigación penal sobre sus tarjetas opacas y los los 4,4 millones de euros depositados la semana pasada con los que pretende regularizar los viajes de placer que durante años le pagó una fundación bajo sospecha.
Con estas afirmaciones, la fiscal general del Estado ha intentado sacudirse las críticas de los portavoces de Unidas Podemos, ERC, JxCat y Bildu que, en sus intervenciones previas, habían cuestionado la inacción de la institución que preside en relación al emérito. La fiscal general ha insistido en que la investigación al rey se está haciendo con un equipo “altamente cualificado”, “respetando las garantías constitucionales del investigado” y “con absoluta reserva” a pesar de que eso pueda generar críticas como las que escuchadas por boca de varios grupos, incluido uno de los socios de la coalición que propuso para ese puesto. Y ha atribuido a la “cooperación internacional” la lentitud de las pesquisas. Por otro lado, ha confirmado que estas regularizaciones “obligarán a realizar nuevas investigaciones y comprobaciones” porque “seguramente” aportarán nuevos “datos”, tal y como informó elDiario.es.
Escribe Elena Herrera.
El Gobierno de Alberto Núñez Feijóo ha acordado dar un paso más en la desescalada gallega a la luz de los datos que señalan que en la mitad de sus ayuntamientos no se han registrado nuevos contagios en los últimos siete días. El Comité Clínico que asesora al Gobierno gallego ha decidido abrir el área sanitaria de Ferrol, que estuvo al borde del colapso en UCI tras la ola de contagios que sucedió al relax navideño. De este modo, todos los ayuntamientos incluidos en esa área sanitaria podrán volver a comunicarse con el resto de la comunidad autónoma.
De las siete áreas sanitarias en las que se divide el sistema sanitario gallego, las de A Coruña y Pontevedra permanecerán cerradas: la hostelería podrá seguir abriendo en sus localidades pero solo en las terrazas con ocupaciones del 50% y hasta las 18.00 horas.
Informa elDiario.es Galicia.
El coronavirus remite pero se resiste a abandonar para siempre las residencias de Álava, las primeras que tuvieron casos ahora hace un año y, si no hay sorpresas, las últimas que dejarán atrás la pandemia después de que Gipuzkoa (el viernes 26 de febrero) y Bizkaia (el lunes 1 de marzo) hayan confirmado ya que la vacunación ha hecho efecto y no quedan brotes de COVID-19. Según el último parte de datos ofrecido por la Diputación, los casos activos han bajado de 9 a 4 desde el viernes hasta el martes. Los dos focos activos son la residencia Roure en Vitoria (un mayor contagiado) y el centro de Yécora, en la Rioja Alavesa (tres positivos de un foco que llegó a afectar a 20 internos).
En principio, ninguno de los casos revestía gravedad y se podrían recuperar todos ellos en las próximas jornadas después de un año en el que han fallecido 209 mayores en Álava. Así ha ocurrido con los brotes de Ajuria o Zabalbide, ya dados por superados en las últimas jornadas. No obstante, 16 trabajadores permanecen de baja, tanto por haber contraído el Sars-Cov-2 como por ser contactos estrechos de algún positivo. También en Bizkaia y Gipuzkoa hay afectados entre el personal.
Lo cuenta Iker Rioja Andueza.
La Comunidad de Madrid ha registrado un descenso en los fallecidos con coronavirus en los hospitales de la región al pasar de 37 el lunes a 30 este martes, mientras que los nuevos contagios se han multiplicado por cinco tras el efecto del fin de semana, con un total de 1.378 frente a los 271 del día previo.
De los 1.378 nuevos contagios incorporados al recuento, 1.062 corresponden a las últimas 24 horas, según el informe epidemiológico diario de la Consejería de Sanidad. Por otra parte, la presión hospitalaria ha disminuido este martes con 1.839 ingresados en planta y 530 en UCI, frente a los 1.940 y 559 del lunes.
La Comunidad de Madrid acumula en la pandemia 15.517 fallecidos con COVID-19 en los hospitales, 5.058 en centros sociosanitarios, 1.303 en domicilios y 30 en otros lugares, lo que eleva la cifra de muertes en la región a 21.908. La cifra total de contagiados asciende a 599.644.
Informa EFE.
Francia registra en el último día 301 muertes en hospitales con coronavirus, a las que se añade el nuevo recuento de 117 decesos en geriátricos desde el viernes, hasta sumar 87.251 fallecidos durante la pandemia.
Actualmente hay 25.263 pacientes ingresados en hospitales, tras registrar 1.705 admisiones en un día, pero con las salidas la diferencia con respecto al lunes es de 167 pacientes menos. Además, 366 personas ingresaron en las últimas 24 horas en unidades de cuidados intensivos, con lo que en total hay 3.586 pacientes en estado de gravedad en todo el país, 42 más que este lunes.
Del lunes al martes se notificaron 22.857 casos positivos en Francia, una media que se mantiene estable en las últimas semanas, en torno a 21.000 casos diarios. “Las semanas que vienen van a ser difíciles”, ha dicho hoy el primer ministro, Jean Castex, en una reunión del grupo parlamentario de La República en Marcha, el partido del presidente, Emmanuel Macron.
El portavoz del Ejecutivo francés, Gabriel Attal, explicó este martes que quedan aún entre “cuatro y seis semanas” difíciles, confiando en que el efecto de las vacunas en personas frágiles empiece a notarse en abril. “Esperamos aligerar la presión en los hospitales esta primavera y poder suprimir ciertas restricciones”, ha deseado Attal.
Informa EFE.
Lanzarote comienza el mes de marzo con un escenario algo más alentador que el de febrero. El presidente del Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres, informó tras el consejo de Gobierno extraordinario celebrado este lunes que, después de someter a revisión los informes epidemiológicos elaborados por la Consejería de Sanidad, Lanzarote baja de nivel 4, el máximo en la escala, a 3, mientras que el resto de islas se mantienen en las mismas fases. Este descenso de la isla oriental responde a los buenos datos epidemiológicos registrados en los últimos días, ya que después de más de un mes de restricciones severas, ha conseguido reducir su incidencia en un 85%.
El 23 de enero, como consecuencia de la subida preocupante de los contagios y de los malos datos epidemiológicos registrados, Lanzarote estrenó el nivel de alerta 4. Pasar las Navidades en la fase más baja le pasó factura a la isla, haciendo que, junto a Gran Canaria, subiera del 1 al 2. Sus datos favorables empezaron a caer en contraposición a la incidencia acumulada y a los contagios, que ascendieron estrepitosamente e hicieron encender las alarmas. El 14 de enero, día en el que el Ejecutivo canario anunció la nueva subida de nivel de Lanzarote (del 2 al 3), la incidencia acumulada (IA) a 14 días de la isla era de 448,5 por cada 100.000 habitantes. 11 días después, este dato llegaría a su pico más alto con 798,9 casos, un aumento del 1.047% de la IA desde el último día de 2020.