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El gobierno de Esperanza Aguirre controlaba la universidad privada donde Pablo Casado aprobó media carrera en 4 meses

  • “Jamás he llamado para presionar en favor de Pablo Casado”, ha dicho Aguirre, que ha obviado que esa Universidad pertenece a una fundación que estaba entonces bajo su control

El vicesecretario de Comunicación del Partido Popular, Pablo Casado, ha negado haber recibido ningún trato de favor al sacarse su carrera de Derecho en el centro privado Cardenal Cisneros del barrio de Salamanca de Madrid. En cuatro meses y recién elegido diputado autonómico en Madrid aprobó, entre junio y septiembre de 2007, 12 asignaturas de las 25 de las que constaba la carrera de Derecho, según ha adelantado este miércoles el diario El Mundo.

Casado se cambió a ese centro adscrito a la Universidad Complutense porque le pillaba más cerca del trabajo, según ha dicho en varias entrevistas. Pero hay otra 'cercanía' en la titularidad del centro de estudios que el político no ha mencionado: aunque es un centro privado, estaba (y está) bajo la tutela del gobierno regional, que entonces dirigía Esperanza Aguirre.

Esto es así porque el Cardenal Cisneros es una fundación universitaria privada pero de titularidad pública, creada en 1998 por un decreto autonómico bajo el gobierno del presidente del PP Alberto Ruiz-Gallardón.

El patronato, según sus propios estatutos, es el órgano competente en “todo lo que concierne al gobierno y administración” del centro. Y el presidente del patronato es siempre el consejero de Educación de turno. En el año en el que Casado acabó la carrera (2007) fueron titulares de esa cartera Luis Peral y Lucía Figar, que sustituyó a Peral el 20 de junio de 2007 hasta su dimisión en 2015 por su imputación en la trama Púnica.

Además, el consejero de Educación también nombra a 6 de los 11 miembros del patronato, incluido el vicepresidente, de modo que a efectos reales la gestión de esta universidad privada está tutelada por la Comunidad de Madrid, la misma autonomía en la que Casado acababa de ser elegido diputado regional cuando aprobó media carrera en cuatro meses. El poder del patronato es máximo y entre sus competencias está desde “ejercer la inspección” (art.17) a nombrar cargos directivos, aprobar las contrataciones o la legislación universitaria. Aunque la gestión es de la Comunidad, fuentes de la Consejería de Educación puntualizan a eldiario.es que las cuestiones académicas las lleva el propio centro y los estándares de calidad, la universidad a la que está adscrita.

“Jamás he llamado ni para interesarme ni para presionar en favor de Pablo Casado”, ha dicho Esperanza Aguirre este miércoles sobre el expediente académico del vicesecretario del Partido Popular. Lo que no ha dicho es que esa Universidad pertenece a una fundación pública que entonces estaba bajo su mandato. “Acababa de conocer a Pablo”, ha insistido. Sin embargo, él fue presidente de Nuevas Generaciones de la Comunidad de Madrid con Aguirre de presidenta del partido y la Comunidad, prácticamente en el mismo periodo político. Son colaboradores cercanos durante casi una década y en 2007, cuando aprueba Casado, llevan al menos dos años coincidiendo en estos cargos.

La fundación pública era y es la titular de este centro universitario creado en 1971, cuatro años antes de la muerte de Franco. Tras la llegada de la democracia, el gobierno central le traspasó la titularidad a la Comunidad de Madrid por Real Decreto en 1985 ,y así funcionó hasta que en 1998 se aprobó la creación de la fundación universitaria, “sin ánimo de lucro, constituida por la Comunidad de Madrid”, como recoge el decreto publicado por el gobierno autonómico. Un año antes, el patronato, controlado por la Consejería de Educación, había solicitado crear una fundación a la que traspasar la titularidad.

El control, de Educación

Por encima del patronato del Centro Cardenal Cisneros hay un “protectorado”, que es el que debe controlar las cuentas y la gestión de la fundación. En este caso, el sujeto coincide y es precisamente Educación, ahora dirigida por Rafael Van Grieken, el organismo encargado de la inspección, además de ejercer la presidencia del patronato.

eldiario.es ha preguntado tanto a Educación como al centro por las cuentas y las memorias de esta fundación de titularidad pública, que deberían estar colgadas públicamente en virtud de la Ley de Transparencia (artículo 2.1.h sobre fundaciones), tal y como confirman expertos en derecho administrativo a este medio. La Consejería no ha respondido aún a este aspecto aunque especifica que las cuentas son fiscalizadas por el Tribunal de Cuentas. Desde el centro privado señalan que han encargado un informe para ver si están o no sometidos a Transparencia, sobre la que aseguran estar muy concienciados, ya que, según su explicación, existen dudas legales al respecto. De momento, esas cuentas no están publicadas. Ambos organismos coinciden en que el centro Cardenal Cisneros no recibe subvenciones.

De momento, la Universidad Complutense de Madrid ha solicitado el expediente, actas y calificaciones al centro adscrito privado donde cursó su último año de Derecho el vicesecretario. El centro Cardenal Cisneros niega cualquier trato de favor, mientras Casado denuncia que las acusaciones son “absolutamente falsas”. El nuevo escándalo en torno al expediente de Cifuentes ha estallado 24 horas después de que eldiario.es adelantara que la jueza que investiga el máster de Cifuentes ha iniciado una investigación específica sobre el máster que Casado cursó en la Universidad Rey Juan Carlos.