Una coalición de 41 estados de EEUU, a los que se ha sumado el Distrito de Columbia, han demando a la corporación de redes sociales Meta por diseñar Instagram y Facebook de manera “dañina y adictiva” para los menores de edad. Se trata de la acción legal más significativa de las autoridades estatales para frenar el impacto de las redes sociales en la salud mental de los menores, así como para obligar a Meta a modificar estas plataformas por los riesgos que entrañan para los usuarios más jóvenes.
En una conferencia de prensa virtual conjunta, varios fiscales generales destacaron que la adicción a estas redes sociales es un “problema nacional”. Han recalcado que pese a la división política entre republicanos y demócratas, han sido capaces de trabajar juntos en esta cuestión, que compararon con la lucha contra el tabaco o el opio.
Los fiscales dejaron entrever que están trabajando en una demanda similar contra la red social china TikTok, pero no dieron más datos. El fiscal general de Tennessee, Jonathan Skrmetti, apuntó que Instagram ha dirigido su aplicación a adolescentes y niños, los cuales “son más vulnerables y más susceptibles a este tipo de manipulación”.
La salud mental de los jóvenes
La lluvia de demandas tiene su raíz en una investigación de 2021 sobre las distintas maneras en que el titán tecnológico contribuye a problemas de salud mental entre los jóvenes. En 2021, las revelaciones de Frances Haugen, una extrabajadora de la compañía, expusieron cómo Instagram empeoraba la percepción de los usuarios —sobre todo niñas y adolescentes— sobre sus cuerpos, y señaló que la compañía era consciente de este problema. “(Meta) sabía que existían estos problemas de salud mental y que Instagram los estaba empeorando. Y en lugar de hacer cambios, la empresa buscó cada vez más participación de los niños”, apuntó Skrmetti. Estas acusaciones recogen las que Haugen hizo ante el Senado de EEUU en una comparecencia pública.
Por su parte, Rob Bonta, fiscal general de California, señaló que la investigación conjunta “ha descubierto que Meta ha engañado a sus usuarios y que está poniendo a los niños en peligro”. “Hay una montaña de pruebas que muestran que si los niños pasan más tiempo en las redes sociales eso tiende a correlacionarse con la depresión, la ansiedad y problemas de imagen corporal”, resaltó Bonta, que indicó que cuando Mark Zuckerberg, director ejecutivo de la compañía, testificó ante el Congreso, mintió al decir que Meta no diseñaba sus productos para que sean adictivos.
Por su parte, la portavoz de Meta, Nkechi Nneji, dijo en un comunicado remitido a los medios que el gigante tecnológico quiere dar a los adolescentes una experiencia en línea segura y positiva. “Estamos decepcionados de que los fiscales generales hayan elegido este camino en lugar de trabajar productivamente con empresas de toda la industria para crear estándares claros y apropiados para la edad en las muchas aplicaciones que usan los adolescentes”, dijo Nneji.
Desde que salió a la luz la investigación de 2021, algunos estados como Arkansas y Utah han aprobado leyes que prohíben el acceso de los niños menores de 13 años a las redes sociales y exigen que los adolescentes menores de 18 años obtengan el consentimiento de sus padres para acceder a los sitios. Por su parte, California aprobó leyes que exigen que las tecnológicas examinen sus plataformas en busca de posibles riesgos y problemas.
Meta, “decepcionada” con la demanda
“Desde que comenzó esta investigación, hemos entablado un diálogo significativo con los fiscales generales sobre las formas en que Meta ya trabaja para apoyar a los jóvenes en sus plataformas, y cómo Meta está trabajando continuamente para mejorar las experiencias de los jóvenes”, ha afirmado una portavoz de Meta en un comunicado.
“Estamos decepcionados de que en lugar de trabajar productivamente con las empresas de toda la industria para crear normas claras y apropiadas para la edad de las muchas aplicaciones que utilizan los adolescentes, los fiscales generales hayan elegido este camino”, ha continuado.
En 2021, cuando las revelaciones de Haugen salieron a la luz, Meta (entonces aún denominada Facebook) señaló que estas “dan una imagen falsa de la compañía”. Sobre la extrabajadora, fuentes de la corporación afirmaron que “no tenía a gente a su cargo, nunca asistió a reuniones de toma decisiones con altos ejecutivos y ha contestado hasta seis veces que no trabajó de manera directa en los asuntos por los que le preguntaron los senadores”. “No estamos de acuerdo en su descripción de los hechos”, zanjaban.