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Amazon va a la guerra contra Netflix y todo el que se le ponga por delante

Corría el 2005 cuando Jeff Bezos, consejero delegado de Amazon, anunciaba la creación de Amazon Prime. El servicio, que hace las veces de suscripción premium, promete enviar los objetos en un plazo inferior a los diez días -vengan de donde vengan- y sin gastos de envío. Cuesta 99 dólares al año y no es negociable. Mejor dicho, no era negociable hasta hoy. La empresa de comercio en línea ha anunciado dos nuevos servicios de suscripción. Prime podrá ser mensual por 10,99 dólares y Prime Video -aquí viene lo bueno- mejora la oferta de Netflix y pone el servicio de streaming de Amazon a unos suculentos 8,99 dólares.

Algunos estudios sostienen que los usuarios de Prime gastan el doble en Amazon que los no registrados. Porque todo parte de ahí. Primero, fidelización. Después, un extenso catálogo de películas, música, documentales y vídeo en streaming. Prime Instant Video desembarcó en 2011 en EEUU, Reino Unido, Japón, Austria y Alemania. Claro está que ni Reed Hastings ni Marc Randolph, creadores de Netflix allá por los 2000 vieron con buenos ojos la llegada de un nuevo jugador a la partida. Y no por nada, sino porque eso significó la apertura de un mercado que, hasta entonces, dominaban.

Apple TV, HBO Now y Hulu son solo tres de las compañías de VoD (Video on demand) que operan en EEUU. Pero Jeff Bezos es ambicioso: su plan va más allá de los EEUU, así que no hay que descartar su incursión en España. El director de comunicación de Amazon en España ya contó a este diario que “no comentamos nuestros planes de futuro. Stay Tuned”. Sin embargo, Bezos ya se ha blindado ante posibles competidores y en octubre anunció que no vendería más Chromecast ni Apple TV en sus estanterías virtuales. También cifra en algo más de 54 millones a los usuarios de Prime solo en EEUU. Y qué mejor escaparate para promocionar el servicio que Cannes: Woody Allen abrirá el festival con Café Studio, producida en los estudios de la compañía de comercio electrónico. Netflix mientras tanto mira cómo un gigante se levanta.

Amazon produce películas, ofrece series, documentales y vídeo en streaming. Vende casi cualquier cosa. Pone música en línea; abre librerías, tanto físicas como en Internet y hasta proporciona un servicio de almacenamiento de fotos en la nube. Se ha convertido en la tienda del todo y espoleada precisamente por eso son capaces de mejorar las condiciones del ayo Netflix. Su servicio básico cuesta 7,99 dólares, pero no cuenta con multiplataforma ni calidad HD.

Para disfrutar en unas condiciones mínimamente aceptables de su catálogo hay que pagar 9,99 dólares. En Amazon lo saben y por eso han mejorado la oferta. Quizá quieran robar suscriptores a Netflix o tal vez que los que ya están con Hastings añadan Prime Video a su salón. Bezos ya probó las suscripciones mensuales a Prime con algunos usuarios en 2012. Reportaron buenos números. La tienda del todo se hace con todos. Y en el centro, como punto neurálgico de este plan maestro, la Fire Tablet a 50 dólares. Stay tuned.