La Comisión Europea (CE) ha impuesto este jueves a Google una multa de 2.420 millones de euros, la mayor dictada hasta la fecha por las autoridades de la Competencia de la UE contra una sola compañía, por abusar de su posición dominante como motor de búsquedas en internet al dar ventajas “ilegales” a su servicio de comparación de compras.
La multa, que Bruselas impone al gigante tecnológico por favorecer de forma sistemática a su servicio de comparación de precios, Google Shopping, frente a sus rivales en los resultados de su buscador, llega tras un contencioso de siete años entre Bruselas y la empresa estadounidense.
La comisaria de Competencia, Margrethe Vestager, ha afirmado que si bien la compañía de Mountain View (California) ha desarrollado “numerosos productos y servicios innovadores que han supuesto un gran cambio en nuestras vidas y eso es algo positivo”, su servicio de compras comparativas “no se limita a atraer clientes ofreciendo un producto que sea mejor que los de sus rivales, sino que Google ha abusado de su posición dominante como motor de búsqueda situando en mejor lugar su propio servicio de compras comparativas dentro de sus resultados de búsqueda y colocando en peor situación los de sus competidores”.
“Lo que Google ha hecho es ilegal según la legislación antitrust de la UE, pues ha denegado a otras empresas la posibilidad de innovar y de competir según sus méritos. Y lo que es más importante, ha denegado a los consumidores europeos una auténtica oferta de servicios y todas las ventajas de la innovación”, ha señalado Vestager.
Google ha expresado su “desacuerdo” con las conclusiones de la Comisión Europea y ha indicado que “considerará apelar” la decisión.
“Estamos en desacuerdo con las conclusiones anunciadas hoy”, ha declarado Kent Walker, vicepresidente senior y general counsel de Google. “Vamos a revisar con la Comisión la decisión en detalle y consideraremos apelar y continuar exponiendo nuestros argumentos”, añadió.
“Cuando compras online quieres encontrar los productos que estás buscando de manera fácil y rápida y los anunciantes promocionarlos. Por esta razón Google muestra shopping Ads, con el objetivo de conectar al usuario con miles de anunciantes, pequeños y grandes, de una manera que sea útil para ambos”, subrayó el ejecutivo.
La sanción, según Bruselas, “se ha calculado en función del valor de los ingresos de Google derivados de su servicio de compras comparativas en los trece países del EEE [Espacio Económico Europeo] afectados”. La multa está muy lejos del tope máximo al que podía ascender, del 10% de la facturación de Google, cuya matriz, Alphabet, tuvo unas ventas de más de 80.200 millones de euros.
Con todo, esos 2.420 millones, que equivalen al 3% de las ventas de Alphabet, superan con creces las mayores multas impuestas hasta ahora por la Comisión: los 1.100 millones que ordenó pagar a Intel en 2009 al considerar que había incurrido en prácticas anticompetitivas al tratar de expulsar a sus rivales del mercado de microprocesadores, y los 497 millones para Microsoft en 2004.
Bruselas envió un primer pliego de cargos a Google en abril de 2015 en el que denunció que la empresa reserva sistemáticamente un trato favorable a su comparador de precios en sus páginas de resultados de búsquedas generales.
En su decisión de este martes, la Comisión Europea ha concluido que Google ha adjudicado a su servicio de comparación de precios una ventaja “ilegal” al otorgarle una posición “prominente” en los resultados de búsqueda, al mismo tiempo que “degradaba” la visibilidad de los resultados sobre sus rivales.