Kim Dotcom, fundador de Mega, el servicio heredero de Megaupload, ha anunciado en Twitter que su plataforma se extenderá a otros campos, más allá del almacenamiento online. Correo electrónico, chat y llamadas están entre los objetivos mecionados.
La prestación de servicios de vídeo también es otra de las áreas en las que Mega entrará “en los próximos años”, atendiendo a las palabras de su fundador. La idea que se desprende de lo publicado por Kim Dotcom es que lo que ahora es una plataforma de almacenamiento online, en el futuro podría estar presente en aplicaciones clave para los usuarios, como es el correo electrónico o la mensajería instantánea.
Todo lo propuesto por Dotcom son servicios que se proporcionan a través de la nube, un ámbito en el que la empresa no empezaría de cero. Lo que sí puede representar un reto mayor para Mega es su introducción en el panorama móvil, algo que también aparece mencionado en el tuit. Se trata de un movimiento lógico, más aún si se tiene en cuenta que negocios como la mensajería instantánea no tienen sentido hoy si no nacen pegados a los smartphones.
En el tuit, Dotcom hace hincapié en que se tratará de servicios seguros. Sus mensajes publicados en el site de microblogging, justo antes del anuncio, criticaron duramente a las compañías estadounidenses de Internet y a la legislación sobre privacidad en este país.
El fundador de Mega desaconsejaba utilizar correo electrónico y cualquier forma de alojamiento online ofrecida por un proveedor de Estados Unidos. Asimismo, citaba a Gmail, iCloud y Skype, diciendo que estas plataformas tienen la obligación legal de proporcionar datos de los usuarios a las autoridades, siempre que éstas los pidan.
La oportunidad está en la Nueva Zelanda
Las críticas a Estados Unidos son recurrentes en Kim Dotcom desde que fue tumbado Megaupload. Repetidas veces ha acusado al país por su legislación y por la presión que ejerce en ella la industria del entretenimiento. En este caso, el empresario ha orientado la polémica hacia la privacidad.
Según sugiere Dotcom, la ley en Estados Unidos da poder a las autoridades para obtener información sobre los usuarios de las compañías de Internet. El Patriot Act, una ley que fue firmada tras los atentados del 11S y cuya finalidad es perseguir delitos de terrorismo, puede servir de amparo a las agencias gubernamentales del país para conseguir datos personales. De hecho, esta situación respecto a la privacidad podría minar el negocio de las compañías estadounidenses en el extranjero.
Precisamente en esto se basa Dotcom para decir que sus futuras plataformas serán “seguras”. Según lo que se deduce de sus tuits, la marca Mega no se quedará en un simple sistema de almacenamiento en la nube. Irá más allá, proporcionando servicios que han despertado mucho interés por parte de los usuarios, pero cuyos principales proveedores son de Estados Unidos.
En cambio, Mega está emplazado en Nueva Zelanda, que posee unas leyes más protectoras con la privacidad, según el fundador del servicio. Este reclamo es el que ha utilizado Dotcom para promocionar la fiabilidad de sus futuros servicios. De la misma forma, el argumento le vale para criticar a plataformas como Gmail o Skype.