Doce meses han bastado desde el pasado CES 2013, para que la tecnología 4K, la resolución que se postula como el nuevo estándar para la imagen de televisión en los próximos años, pase de ser el objeto de deseo de una minoría pudiente a ponerse al alcance de la mano de muchos más. Esta expansión no ha llegado todavía al mercado, pero lo hará próximamente según lo que se está anunciando en el CES 2014.
La pasada edición del Consumer Electronic Show, que anticipa cada año las novedades de la industria electrónica en Las Vegas, se volcó con los televisores 4K, dejando de lado el 3D, que había sido el principal atractivo ofrecido por las grandes marcas en años anteriores pero que no acababa de despegar comercialmente. En ese momento se trataba de asombrar con la espectacularidad de la nueva tecnología, ya madura a nivel técnico aunque no lo suficiente como para asaltar el mercado de consumo.
Un año después, con decenas de nuevos modelos producidos y el progresivo abaratamiento de los componentes electrónicos, las grandes marcas han rebajado sus precios. En este CES 2014 la tecnología 4K está dando su siguiente paso evolutivo: abaratarse para llegar al público masivo. Prueba de ello son una serie de monitores presentados cuyo precio baja de los 1.000 dólares.
Dell ha mostrado un monitor de 28 pulgadas con resolución 4K y ha anunciado que su precio, al menos en Estados Unidos, será de 699 dólares (513 euros). Por su parte, Lenovo y Asus han presentado sendas pantallas también de 28 pulgadas que se venderán a 799 dólares (587 euros). Aunque los precios parezcan altos el descenso ha sido significativo. Asus, por ejemplo, tiene a la venta actualmente un modelo de 31,5 pulgadas por más de 3.000 dólares y las características son muy similares al que acaba de mostrar en el CES 2014.
El fabricante low cost Seiki, que vende (en Estados Unidos) un televisor 4K de 39 pulgadas por 499 dólares, también ha anunciado un monitor de 29 pulgadas, destacando que será más barato aún. En España el precio de venta de televisores 4K resulta aún desorbitado. Entre los que ofrecen las marcas mayoritarias, un modelo de 55 pulgadas ronda los 4.000 euros, mientras que los de 65 pulgadas pasan todos de los 5.000 y a veces de los 6.000 euros.
La resolución 4K: qué es
El estándar 4K es la tecnología sucesora de la resolución Full HD (o alta definición) y despliega el cuádruple de píxeles que ésta. Desde la definición de los televisores analógicos, de 576 líneas (720x576), que también ofrece un DVD, la imagen ha evolucionado bastante. Se alcanzó la alta definición o HD, que ofrece 1280x720 píxeles, y de ahí se ha pasado al full HD, que soporta 1920x1080, el estándar del Blu-ray. El 4K es el siguiente paso, que representa un incremento superior a los anteriores, alcanzando los 3840x2160.
Estos números quieren decir que el 4K despliega ocho millones de píxeles, en comparación con los dos millones que ofrece una resolución full HD. La densidad de píxeles es mucho mayor y el tamaño de las pantallas con esta definición ha ido disminuyendo, desde unos primeros modelos de más de 100 pulgadas hasta los monitores para ordenador que ahora se presentan en el CES 2014.
La denominación 4K proviene en realidad del estándar de cine digital, que tiene el mismo nombre. Sin embargo, la resolución varía debido al formato de imagen, siendo la de los cines de 4096x2160, ligeramente superior al nuevo estándar fijado en 3840x2160. Por ello hay quien prefiere referirse al formato de consumo como ultra HD para no dar lugar a error o UHD, las siglas de ultra high definition. Sin embargo, este término sirve para denominar dos tipos de resoluciones, tanto el estándar 3840x2160 como el llamado naciente 8K, que ofrece 7680x4320.
Con una resolución 4K es posible ver detalles que de otra manera pasarían desapercibidos. Hoy en día encontrar contenido con esta definición es difícil, pero en una fotografía de cierta calidad se puede comprobar la diferencia con el full HD. Para los diseñadores gráficos también constituye una valiosa fuente de información, pues las formas y los tonos son más precisos. Ésta es una de las razones por las que en el CES 2014 se han presentado varios modelos de monitores 4K.
El incipiente contenido en 4K
El CES 2014 ha dejado otro anuncio de relieve para el 4K, en esta ocasión de la mano de Netflix, la mayor plataforma de vídeo on demand en Estados Unidos. La compañía ha señalado que a partir de ahora todas sus producciones propias estarán rodadas en 4K y acabadas en esta resolución. Una decisión que se une a la que tomó hace unas semanas Amazon, que filmará también en 3840x2160.
Ambas compañías no son grandes productoras de series o películas, pero se han embarcado en ciertos rodajes que emiten de manera exclusiva en sus respectivas plataformas, como factor de diferenciación respecto a la competencia. Debido a la escasez general de contenido en 4K, estas producciones están llamadas a convertirse en algunas de las primeras que explotarán toda la capacidad de las nuevas pantallas.
La decisión supone igualmente un empujón a los creadores de contenido, ya sean plataformas online, productoras de cine o televisión, para que lancen productos en resolución 4K. Si bien, la distribución de éstos a través de internet no será fácil, pues la infraestructura de las redes normalmente no dispone de las velocidades de transferencia necesarias. Netflix está adaptando su sistema para permitir un streaming de 4K a partir de tasas de 15Mbps.
En Japón también se ha hecho una apuesta por la tecnología 4K. La compañía de telecomunicaciones NTT West ha realizado pruebas con el fin de emitir el Mundial de Brasil de 2014 en 4K. Todo un reto pues se tratará de la primera emisión televisiva sobre satélite en dicha resolución. En España, RTVE ha comenzado a hacer producciones en este formato, una de ellas fue mostrada a principios del pasado año en el Mobile World Congress.
Imagen: Alan Light