La Justicia francesa imputó este miércoles al fundador de la plataforma de mensajería Telegram, Pável Dúrov, por cargos que van desde el blanqueamiento de crímenes a la complicidad en la difusión de imágenes pedófilas y ha accedido a su liberación bajo control policial y bajo una fianza de 5 millones de euros.
Tras haberle tomado declaración en París, los jueces de instrucción han ordenado su imputación por la totalidad de cargos elevados contra él en la fase de investigación, que ascendían a una docena en total.
La Fiscalía gala hizo públicos estos doce delitos de los que lo acusa a lo largo de la noche del lunes. Entre los cargos que se le imputan están los de complicidad con el tráfico de drogas, la distribución de pornografía infantil o la pertenencia a banda criminal.
Laure Beccau, máxima autoridad de la Fiscalía francesa ha indicado en un comunicado que Dúrov “ha sido puesto bajo vigilancia judicial, con la obligación de depositar una fianza de 5 millones de euros, presentarse ante la policía dos veces por semana y la prohibición de salir del territorio francés”.
La imputación del cofundador de Telegram, de 39 años, llegó después de cuatro días detenido de manera provisional (el máximo legal dados los cargos por los que se le investigaba), tras su arresto en el aeropuerto privado de Le Bourget, próximo a París, el sábado pasado.
La lista de delitos que se le atribuyen comprende complicidad en la administración de una plataforma en línea para permitir transacciones ilícitas de bandas organizadas, complicidad en estafas y en tráfico.
A eso se añade, entre otros cargos, una presunta responsabilidad del multimillonario de origen ruso por la difusión en Telegram de material de abuso sexual de menores.
También se le acusa de no colaborar con la Justicia al negarse a ofrecer datos e informaciones sobre posibles acciones delictivas y cargos relacionados con el funcionamiento y encriptado de la plataforma de mensajería.
La Fiscalía francesa explicó que Telegram, creada en 2013, ha aparecido en múltiples causas sobre distintas infracciones (como pornografía infantil, odio en línea y narcotráfico) y que la empresa ofreció una “casi total ausencia de respuesta” a las interpelaciones judiciales.
La investigación que llevó a la detención de Dúrov se abrió de manera preliminar en febrero de 2024 y en ella participaron sucesivamente distintas agencias francesas de lucha contra la cibercriminalidad, el crimen organizado y el fraude.
La detención de Pável Dúrov en París ha desatado un debate global sobre las características de Telegram, su papel en el ejercicio de la libertad de expresión en la red y la capacidad de control de los gobiernos de los delitos que se cometen en el ámbito virtual. También sobre cuáles son las verdaderas intenciones de Francia.
El motivo es del arresto es la falta de colaboración de Telegram y, por extensión, de Dúrov, con los tribunales franceses en la investigación de esos crímenes. La app suele ignorar los requerimientos de información de las autoridades, una política contra la que han chocado otros sistemas de justicia europeos, como el español.