La quinta edición de Sónar+D abre sus puertas mañana a las 10 de la mañana, desde el 14 al 17 de junio, como brazo tecnológico y futurista de gran festival de música electrónica de Barcelona. La programación está a la altura de un primer gran aniversario, con más de 180 eventos, entre artistas, performances, conferencias y talleres.
Si hay algo que destaca este año es una cantidad estadísticamente insólita de mujeres en la programación, no porque sean poco representativas del sector, que no es el caso, sino porque este tipo de festivales han sido típicamente malos representantes. Este año, a la exótica Dawn Richard, la pionera Suzanne Ciani, la tunecina Deena Abdelwahed o los pequeños terremotos Princess Nokia y Nadia Rose se suma un dreamteam en la Fira de Montjuïc en el que destacan cinco mujeres que van a cambiar o ya han cambiado el mundo tal y como lo conocemos. Te las presentamos una por una.
Ayah Bdier: democratizar la ingeniería
Ayah BdierA Ayah Bdier le gustaban la física y las matemáticas pero se aburría como estudiante de ingeniería en la Universidad de Beirut. Como sus padres no le dejaron cambiar su disciplina por otra más creativa, decidió cambiarla desde dentro. Así nació littleBits Electronics, el Lego de la era del código.
Los littleBits son módulos electrónicos (motores, osciladores, baterías y módulos con tarjeta de red) que se conectan por imanes de múltiples maneras para crear sistemas complejos, circuitos de sensores o simpáticos robots. El target principal está claro: en muchos colegios ya es material estándar para enseñar diseño interactivo a niños y adolescentes. Los imanes facilitan el proceso de prueba y error, un proceso especialmente productivo gracias la expresividad de los marcadores. Tienen un código de colores (las baterías son azules; los módulos de entrada son rosas; los de salida, azules), hay diferentes canales y pueden activar sonidos, luces y movimiento.
El viernes por la mañana en Sónar+D hablará de cómo consiguió “poner el poder de un ingeniero en manos de cualquiera” y de las últimas novedades de su pequeña gran empresa.
Carla Diana: Electrodomésticos o mascotas
Carla DianaEn un ensayo que fue la primera portada del New York Times Sunday Review de 2013, Carla Diana especulaba sobre nuestra futura relación doméstica con las cosas del Internet de las cosas. “Adoraremos a nuestros nuevos productos como si fueran mascotas, haciéndoles caso y anticipando sus alegrías? ¿O toda esta algarabía de comunicaciones creará una enojosa cacofonía de gadgets?”.
Como diseñadora y exploradora en el mundo de los “smart objects”, Diana quisiera que fuese lo primero; como teórica futurista no está segura de que vaya a ser así. “Dependerá en la habilidad de los ingenieros para diseñar interacciones que consideren la conexión emocional como otro atributo de producto”. Para conseguirlo, propone una solución aparentemente sencilla pero extrañamente escurridiza: contratar más mujeres. Para humanizar a los robots.
Y para humanizar las herramientas. Una de sus propuestas es el Arduino LilyPad diseñado por Leah Buechley para textiles en su laboratorio Hi-Lo Tech del MIT. Su genialidad es que sustituye las conexiones por hilo conductivo, porque no todo el mundo sabe soldar pero todo el mundo sabe coser. O My Artificial Muse, una IA que pinta a partir de figuras hechas con palitos.
Este año en sonar +d, Carla Diana dará una conferencia -Cómo nos seducirán nuestros robots (y por qué queremos que lo hagan); un taller de robótica y una consultoría.
Nadya Peek: cosas que fabrican cosas
Nadya Peek desarrolla nuevas máquinas de fabricación en el Centro de Bits y Átomos del MIT. Su trabajo es hacer máquinas lo suficientemente modulares y flexibles que faciliten el prototipado rápido de prácticamente cualquier cosa, por loca que sea. O, cómo indica el título de su tesis y de su charla en sonar +d, hacer cosas que fabrican cosas. Por ejemplo, PopFab es una maleta que corta vinilos, muele, imprime en 3D y además es un plotter.
El programa dice que esta charla es de acceso preferente para acreditados. Significa que hay que estar en la puerta lo antes posible y portarse muy bien.
Sarah Pink: la Casandra pragmática
Decía William Gibson que la calle siempre encuentra su propio uso para las cosas. El trabajo de Sarah Pink es saber cuál será ese uso, pero antes de que las cosas existan. Diseñadora de formación, adivina de profesión, Pink viene a explicar que las cosas son solo la manifestación cultural de unos patrones que nos mueven y nos atan unos a otros y a todos con el entorno. Y ella trata de identificar, reproducir y evolucionar esos patrones de manera que podamos proyectar soluciones para problemas que todavía no tenemos. En su charla del jueves, Diseño, Etnografía y Tecnología en un mundo incierto, hablará de la práctica del diseño etnográfico y, lo que es más interesante, de su metodología.
Hay muchos motivos para ir a esta charla, no todos intuitivos. Pink es directora del Digital Etnography Research Centre; enseña Diseño y Etnografía Digital en la Universidad RMIT y ha publicado varios libros sobre etnografía digital. Pero su verdadero impacto está en su colaboración con Samsung, Volvo, Intel y Unilever en el diseño de productos. Ve por su bola de cristal, quédate para saber qué forma tiene la capa más superficial del mundo que te rodeará mañana. Como preparación para nuevas formas de resistencia.
Bjork: la diva total
Como su amigo Manabe, Bjork es ya una veterana de Sónar, pero este año se despliega en Barcelona con tantas actividades que los fans no podrán ni dormir. De hecho, este año la islandesa inaugura el primer miércoles del festival con un DJ set en el Sonar Hall. Ojo que es una entrada aparte de 35€, con preferencia para los que tengan abono.
Su parada en la mesa de mezclas viene acompañando la exposición Björk Digital en el CCCB, una “exposición inmersiva de Realidad Virtual” que se inaugura también mañana 14 de junio pero podrá verse hasta el 24 de septiembre. Sus otras actividades en el -D incluyen una charla que claramente no sabemos de qué irá y que suponemos hablará de la relación de la cantante con la vanguardia digital.
Además de uno de los artistas más influyentes de la música pop, Bjork ha sido protagonista de algunos de los mejores videoclips de todos los tiempos, sus giras han servido de percha a brillantes talentos del arte audiovisual y hasta ha sido actriz y musa y fetiche de artistas, fotógrafos y cineastas contemporáneos como Lars von Triers o el propio Matthew Barney, con el que estuvo casada hasta hace poco.
En verdad no es una charla -la diva es encantadoramente tímida- sino una conversación conducida por Brandon Stosuy, editor in chief de The Creative Independent.