Lo que pasó en Bandersnatch no se quedó en Bandersnatch. El último capítulo de la serie Black Mirror, que se caracteriza por proponer relatos provocativos y desconcertantes sobre el futuro de la tecnología y de la sociedad conectada, dio una vuelta de tuerca más al concepto al hacer responsable a cada usuario del destino del protagonista. Lo que al principio pueden parecer elecciones intrascendentes para el desarrollo de la trama acaba en un carrusel de consecuencias dramáticas, hasta que el show pregunta al espectador si quiere resolver una situación matando a una persona, entre otras decisiones igual de perturbadoras. Con todo, no fue de los capítulos más inquietantes de la serie, pero sí dio pie a la paradoja Black Mirror: Netflix ha guardado en una base de datos todas las elecciones de cada usuario, asociadas al resto de sus datos personales.
Lo ha revelado Michael Veale, investigador especialista en protección de datos del University College de Londres. Veale hizo uso del derecho de acceso presente en el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) de la UE, que entró en vigor el pasado 25 de mayo, para preguntar a Netflix qué datos almacenó sobre sus decisiones en Bandersnatch. La respuesta fue clara: todos. Desde el desayuno que eligió en la primera decisión a si escogió matar o no.
Veale ha detallado la respuesta de Netflix especifica que los datos “solo se utilizan para saber qué segmentos de vídeo mostrar a continuación”. No obstante, la plataforma revela que, como hacen con los datos agregados de todos sus títulos (como el número de visualizaciones o el tiempo que pasa un usuario de media en cada contenido) también registran las elecciones de la comunidad efectuadas en Black Mirror: Bandersnatch para ayudarles “a determinar como mejorar esta forma de contar historias en el contexto de una serie o una película, por ejemplo”.
Tras recibir la respuesta a las preguntas que había formulado (“bastante completa”, a su juicio), el investigador ha pasado a preguntar a Netflix sobre el uso que pretender dar a esos datos en el futuro o durante cuánto tiempo los guardará. Todavía no ha recibido respuesta. Este medio ha elevado las mismas preguntas a Netflix, a lo que la plataforma ha contestado con el siguiente comunicado oficial:
Los datos pueden salir de Netflix
Samuel Parra, abogado experto en protección de datos, ha explicado a eldiario.es que los datos que Netflix recopila sobre las elecciones de los usuarios en Bandersnatch no pueden considerarse personales ya que, por si solos, no sirven para identificar a una persona. Esto provoca que no queden cubiertos por las salvaguardas de las que goza la información considerada como de carácter personal, por lo que Netflix puede darles múltiples usos de manera legal, como venderlos.
“Netflix puede facilitar a cualquier tercero los datos sobre las elecciones de los usuarios siempre y cuando no vayan asociados a ningún usuario. Por ejemplo, puede facilitar las miles de tablas que tenga sobre las elecciones, siempre que no los asocie a ningún usuario”, revela Parra. Es el mismo motivo por el cual Netflix no pidió un consentimiento explícito para almacenarlos
“De la misma manera que por ejemplo un médico”, continúa el jurista, “puede facilitar a un tercero tengo cinco pacientes con hepatitis, pero sin dar ningún dato sobre la identidad de esos pacientes, y esa información tengo cinco pacientes con hepatitis no son datos personales. Siempre y cuando no se puedan identificar a esos cinco pacientes”. El análisis solo podría cambiar si el médico solo tuviera cinco pacientes y de la información suministrada se pudiera inferir su identidad, puntualiza.
Saber lo que quieres ver como modelo de negocio
No era un secreto que Netflix monitoriza cada movimiento del usuario en su plataforma la plataforma deja una huella para Netflix. Al contrario que parte de su competencia, el portal de streaming no basa tanto su modelo de negocio en grandes producciones que atraen un público masivo como en tener siempre su algoritmo a punto para hacer una recomendación ultrapersonalizada a todos sus usuarios. Como explicó el medio especializado en información tecnológica Xataka, el sistema de Netflix maneja más de 27.000 microgustos diferentes que asigna a sus usuarios en función de su actividad en la plataforma.
Para este perfilado, Netflix analiza la navegación de sus usuarios, qué contenido ven y durante cuanto tiempo, de dónde venían y a dónde van a continuación. El sistema tiene otras múltiples variables y se desconoce su profundidad real, pero se ha analizado que varía, por ejemplo, la imagen en miniatura que usa para ofrecer un mismo contenido a diferentes personas para hacerlo más atractivo a sus preferencias. Según la respuesta dada ahora al investigador, Netflix reconoce que utiliza las elecciones efectuadas en Bandersnatch en ese perfilado.
Veale ha contado al medio estadounidense Motherboard que su objetivo fue explicar cómo puede usarse la ley de protección de datos para evitar entrar en teorías de la conspiración, ya que “la gente ha estado especulando mucho en Twitter sobre las motivaciones de Netflix” con Bandersnatch. Muchos usuarios expresaron dudas sobre si el capítulo era o no un “experimento de minado de datos” por parte de la plataforma de streaming. No queda claro si la respuesta de Netflix habrá resuelto las dudas.